La gran fiesta desata buenos recuerdos

Aquel 15 de junio de 1977 supuso un antes y un despu¨¦s en la vida de los espa?oles. Con las velas hinchadas con un aire nuevo. Con el viento de la libertad y la democracia impregn¨¢ndolo todo y empujando con fuerza, el arte, la cultura, el deporte, cobraron un nuevo esp¨ªritu y se lanzaron renovados al futuro hurtado durante 36 a?os de dictadura. ?sta es la memoria prestada por algunos espa?oles que ya hac¨ªan ¨¦poca o empezaban a hacerla en aquella Espa?a de junio de 1977.

MART?N CHIRINO "Con la democracia lleg¨® un canto de alegr¨ªa a mi obra"

Mart¨ªn Chirino (Las Palmas de Gran Canaria, 1925) fue un ni?o de la guerra y es escultor. Chirino cuenta que su obra inicial estuvo marcada por la tensi¨®n de la guerra y la dictadura y que la llegada de la democracia fue "como unos puntos suspensivos".

"Ten¨ªa 52 a?os y estaba con todos los compa?eros de la antigua revoluci¨®n, con los amigos del grupo comunista. ?ramos gente muy reivindicativa y est¨¢bamos apasionados con el cambio. Para m¨ª fue brutal, como si hubiera alcanzado la libertad que luego he llevado en mi obra y en todos los aspectos de mi vida hasta el paroxismo. Soy un ni?o de la guerra, crec¨ª en la desesperanza. Aquellas elecciones fueron algo nuevo, ins¨®lito. Lo miraba todo con cari?o y respeto como si de repente ah¨ª hubieran surgido unos puntos suspensivos", relata.

"Tuve que ir a votar a Madrid y recuerdo que estaba con Rafael Moragas y otros amigos. Camin¨¢bamos hacia el colegio electoral en medio de una fiesta. Yo ten¨ªa claro a qui¨¦n votar. Vot¨¦ a la izquierda, sin ninguna duda. Cada vez que tengo que volver a votar siento esa emoci¨®n ante la urna. La vida para m¨ª nunca fue tan po¨¦tica como despu¨¦s de aquello. Cuando lleg¨® la democracia hubo un canto a la alegr¨ªa en mi trabajo y una p¨¦rdida de tensi¨®n en las curvas que culmin¨® en obras como El Quijote".

N?RIA ESPERT "Pens¨¦: ?qu¨¦ suerte, lo que me queda por delante!"

Nacida en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) hace 72 a?os, N¨²ria Espert ya cosechaba ¨¦xitos como actriz en 1977 y recuerda aquel primer sufragio, en Barcelona, como "un d¨ªa de fiesta".

"Compart¨ªa con todo el pa¨ªs una gran alegr¨ªa y mucha esperanza", recuerda. "Los miedos del primer a?o tras la muerte de Franco estaban superados. Viv¨ª aquel d¨ªa como una fiesta y recuerdo la alegr¨ªa de mi marido y de mi madre. Era el d¨ªa de votar y no hicimos otra cosa aparte de celebrarlo. Acud¨ª con una de mis hijas y mi madre. Fue muy especial. Mi madre estaba muy nerviosa y nos ped¨ªa que la ayud¨¢ramos para no equivocarse y votar a quien quer¨ªa. Ahora veo una democracia fuerte, con momentos oscuros, como esa lacra atroz del terrorismo, que no nos ha dejado en todo este tiempo. Con aquellas elecciones comenz¨® una nueva vida y todo el tiempo pensaba ?qu¨¦ suerte lo que me queda por delante! ?Lo podr¨¦ vivir! Ten¨ªa 42 a?os y s¨®lo hab¨ªa conocido la dictadura".

ORIOL BOHIGAS "Ganase quien ganase, hab¨ªa ganado la democracia"

Oriol Bohigas (Barcelona, 1925) es coautor de la Villa Ol¨ªmpica de Barcelona y uno de los arquitectos m¨¢s influyentes de Espa?a. Recuerda que la democracia se tradujo en un inter¨¦s por la reforma de la Ciudad Condal, a la que ¨¦l contribuy¨®.

"Ten¨ªa 52 a?os, y creo que todo se reduc¨ªa a la ilusi¨®n de votar por primera vez. Ilusi¨®n no tergiversada por los partidos pol¨ªticos. Los pol¨ªticos que se presentaban lo hac¨ªan de buena fe, al margen de intereses partidistas. Siempre salvando los franquistas ac¨¦rrimos. Se trataba de un esfuerzo colectivo a favor de la gobernabilidad democr¨¢tica. Todos cre¨ªamos que cualquiera que gobernase luchar¨ªa por ese bien com¨²n. En Barcelona, donde vot¨¦, esas elecciones se tradujeron en un inter¨¦s por la reforma de la ciudad. Cuando hay unas ganas tan fuertes de reconstruir un pa¨ªs se busca el bien com¨²n con confianza en los pol¨ªticos. Ganase quien ganase, hab¨ªa ganado la democracia".

ELENA OCHOA "Celebramos d¨ªas y noches la victoria de Su¨¢rez"

La psic¨®loga Elena Ochoa (Orense, 1958) dirige desde Londres la editorial Ivory Press, y estaba en la universidad aquel junio de 1977.

"Hace 30 a?os viv¨ªa en Madrid, en un colegio mayor en la Ciudad Universitaria, rodeada de gente intensa y divertida. Dorm¨ªamos poco, habl¨¢bamos mucho, fum¨¢bamos sin parar, le¨ªamos todo lo que ca¨ªa en nuestras manos, y nos cre¨ªamos el ombligo del mundo. ?ramos un pu?ado de gente con ambiciones, con historias familiares muy diversas y ambientes dispares, y que de pronto lo compart¨ªamos todo. Estudiaba en la Aut¨®noma en aquel entonces, y mi mejor amigo organizaba reuniones cuasiclandestinas despu¨¦s de clase, en un diminuto seminario en los s¨®tanos de la Facultad, para adoctrinarnos sobre Hegel, Gramsci, Marx... Acab¨¢bamos de madrugada en Mirasierra, en casa de otra amiga, cenando chuletas enfrente de la chimenea, y leyendo en voz alta a Whitman y proclamando que Dios hab¨ªa muerto. Poveda, Escohotado y otros profesores que luego se convirtieron en amigos, nos ense?aron a alucinar sin perder la cabeza".

"En el otro extremo del p¨¦ndulo, y en otras noches, termin¨¢bamos en Tartufo bailando, o con pel¨ªculas de Godard y bandas de jazz en los colegios mayores vecinos. Votamos en Arg¨¹elles, y celebramos d¨ªas y noches la victoria de Su¨¢rez. Semanas despu¨¦s, como una de las representantes de los colegios mayores, fui a La Moncloa con otros que representaban a diversos grupos de universitarios, y pasamos un d¨ªa con el presidente reci¨¦n elegido. Nos sentaron en la mesa del Consejo de Ministros, y Jos¨¦ Coderch nos coloc¨® uno a uno para una foto opportunity con Su¨¢rez. Recuerdo el junio de hace 30 a?os y los meses que vinieron despu¨¦s con una enorme ilusi¨®n, expectaci¨®n, esperanza. Como una inmensa bocanada de aire fresco que arrib¨® entonces a nuestro pa¨ªs. Ojal¨¢ se mantenga as¨ª de fresca siempre".

JOS? MENESE "Sentirse en un sistema democr¨¢tico fue un alivio"

Jos¨¦ Menese naci¨® en La Puebla de Cazalla, Sevilla, en 1942. Menese levant¨® su voz flamenca contra el franquismo y, recordando aquel primer sufragio, vuelve a cantar: "S¨®lo as¨ª puedo expresar lo que siento". Lo cuenta entre sole¨¢ y sole¨¢.

"Fui a votar en las primeras elecciones y siempre que ha habido. Es una responsabilidad. Aquel 15 de junio estaba en Madrid. Nos juntamos en casa de Nicol¨¢s Sartorius, Rafael Alberti, Caballero Bonald y otros. Vot¨¦ en La Latina, que era un barrio bastante comunista. ?bamos a dar la cara por una libertad so?ada que pens¨¦ que no se conseguir¨ªa nunca. Y que no s¨¦ si se ha conseguido porque ahora el entramado democr¨¢tico es bastante endeble. Mi vida hab¨ªa sido un ir y venir y un cantar contra el franquismo. Las elecciones fueron el afianzamiento de la libertad. Mi ni?ez y mi crianza fueron feas. Sentirse en un sistema democr¨¢tico fue un alivio".

SEVERIANO BALLESTEROS "El Rey y Su¨¢rez fueron los grandes art¨ªfices de aquello"

En junio de 1977 Severiano Ballesteros (Pedre?a, Cantabria, 1957) estaba cumpliendo el servicio militar como voluntario en la Base A¨¦rea de Cuatro Vientos. Compaginaba esta actividad con su profesi¨®n de jugador de golf y cuenta que "¨¦se 15 de junio estaba preparando el torneo Uniroyal Championship que se celebraba d¨ªas despu¨¦s en Rickmansworth, en Inglaterra". Su primera victoria en Reino Unido.

"Mi proyecci¨®n internacional coincidi¨® con esa ¨¦poca tan importante para Espa?a. Ten¨ªa 20 a?os y la vida corr¨ªa muy deprisa a mi alrededor. Espa?a tambi¨¦n estaba viviendo una etapa decisiva. Era importante c¨®mo se daban aquellos primeros pasos, y los espa?oles tuvimos la suerte de contar con dos capitanes que supieron llevar el barco con sabidur¨ªa y firmeza. No era f¨¢cil la traves¨ªa pero gracias a su pericia nos alejamos de las galernas, y nuestra democracia tom¨® el rumbo deseado por el pueblo espa?ol. Para m¨ª, tanto nuestro Rey como Adolfo Su¨¢rez fueron los grandes protagonistas y art¨ªfices de aquella important¨ªsima ¨¦poca".

MARUJA TORRES "Entonces el que perd¨ªa, perd¨ªa"

La periodista y escritora naci¨® en Barcelona, en 1943. All¨ª vot¨®, antes de ir de un colegio electoral a otro, reportera intr¨¦pida, de paquete en la moto de un fot¨®grafo.

"Vot¨¦ en el l'Eixample. La ciudad entera, Barcelona, era un gran escenario de mensajes y esl¨®ganes, y hab¨ªa tantos partidos y tantas siglas como im¨¢genes de mujeres desnudas en los quioscos. Mi novio de aquel tiempo era reportero gr¨¢fico; iba en su moto de un colegio electoral a otro, y yo le acompa?aba, de paquete. Los dos hab¨ªamos votado al PSUC por la ma?ana temprano -"Mis manos, mi capital", era su lema; y la foto de unas manos de obrero, su cartel-, y durante el recuento recorrimos las sedes. No era como ahora. Entonces, el que perd¨ªa, perd¨ªa. Pero no nos resultaba dif¨ªcil aceptarlo; ¨¦ramos los ilusionados padres primerizos de una todav¨ªa fr¨¢gil democracia. En la sede del PSUC, calle Ciutat, comunistas y simpatizantes nos reunimos en torno a Gregorio L¨®pez Raimundo y nos consolamos de que nuestros primos, los socialistas, nos hubieran superado. Pero gan¨® UCD, ?no? ?ramos prudentes".

?NGEL GABILONDO "La gente iba temblorosa a identificarse"

El rector de la Universidad Aut¨®noma de Madrid acababa de llegar a la capital cuando se celebraron las elecciones. En el recuerdo de ?ngel Gabilondo (San Sebasti¨¢n, 1949) qued¨® una ciudad que era "espacio de convivencia y de comunicaci¨®n" y en la que "por todas partes hab¨ªa un clima de fiesta y alegr¨ªa social".

"Ten¨ªa 28 a?os y recuerdo que la gente iba a identificarse temblorosa. Lo asoci¨¢bamos con lo policial y no ten¨ªamos ni idea de la cara que se pon¨ªa, ni de que uno se pudiera identificar para depositar el voto o decidir algo con ¨¦l. Creo que todos ten¨ªamos la sensaci¨®n de no saber si estar¨ªamos a la altura de las circunstancias. Tuvimos la suerte de que hubo grandes hombres que s¨ª supieron".

"Digan lo que digan ahora, Espa?a est¨¢ mejor. Tenemos los problemas de un pa¨ªs en desarrollo. Pero ven¨ªamos de la penuria democr¨¢tica y econ¨®mica. Entonces todo era precario: la educaci¨®n, los hospitales... Ahora estamos apesadumbrados y timoratos. Pero no hay que tener nostalgia. A?oranza s¨ª: de los valores y de la valent¨ªa (que debemos recobrar). Pero no nostalgia".

SOLEDAD PU?RTOLAS "Volv¨ª a un pa¨ªs gris y de repente hubo luz"

La escritora, nacida en Zaragoza, en 1947, no tiene un recuerdo concreto de las primeras elecciones, pero s¨ª la sensaci¨®n de que "de repente todo hab¨ªa cambiado".

"Recuerdo que ir al colegio electoral y buscar el nombre en las listas fue novedoso, pero no tengo un recuerdo n¨ªtido de la votaci¨®n. Estuve fuera de Espa?a hasta 1975, cuando regres¨¦ tras la muerte de Franco. Llegu¨¦ a un pa¨ªs gris y horrendo y de repente todo se aceler¨®. Pasamos a un periodo en color y con mucha luz. ?Y con libertad! Era un alivio. Est¨¢bamos tan sorprendidos. Todo estaba transform¨¢ndose de tal manera que aun siendo el voto el cambio m¨¢s importante, fue una novedad m¨¢s en toda la vor¨¢gine".

?NGEL NIETO "Hubo incertidumbre al principio, luego cambi¨®"

Campe¨®n del mundo de motociclismo, 12 veces m¨¢s una, ?ngel Nieto (Zamora, 1947) viv¨ªa su mejor momento profesional cuando vot¨® por primera vez.

"El pueblo estaba en una situaci¨®n de temor y votamos con una inmensa alegr¨ªa. Yo lo hice en Boadilla del Monte [Madrid]. Creo que todos sentimos una enorme incertidumbre por lo que pasar¨ªa, pero luego todo cambi¨®. Ten¨ªa 30 a?os y estaba en el mejor momento de mi carrera, llevaba seis o siete mundiales. Realmente estaba muy centrado en mi trabajo, que era correr y ganar. Aquello fue un cambio muy fuerte y el Rey hizo un papel impresionante. Adolfo Su¨¢rez me pareci¨® una gran decisi¨®n, porque fue la de la mayor¨ªa. Y para eso eran unas elecciones democr¨¢ticas, ?no?".