Espa?a crea el primer parque submarino

En 1948, el franc¨¦s Edouard Le Danois sorprendi¨® al mundo con su libro Las profundidades del mar, en el que detallaba la existencia de una monta?a submarina a 60 kil¨®metros de la costa asturiana. Le Danois hab¨ªa descubierto el banco 10 a?os antes, en una expedici¨®n cient¨ªfica y la bautiz¨® con su nombre. La monta?a submarina, de hasta 4.500 metros de altura, era nueva para la ciencia, pero no para los pescadores del Cant¨¢brico, que a principios del siglo XX ya la conoc¨ªan como El Cachucho, nombre que en la zona se da a la palometa roja, seg¨²n explica el cient¨ªfico del Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa de Santander Francisco S¨¢nchez. Casi un siglo despu¨¦s, El Cachucho ser¨¢ el primer parque submarino protegido de Espa?a.

El banco alberga m¨¢s de 550 especies: corales ¨²nicos, raras estrellas y peces de profundidad

El pico m¨¢s alto de la Pen¨ªnsula, el Mulhac¨¦n, tiene 3.482 metros, as¨ª que El Cachucho lo supera y se acerca m¨¢s a los 4.800 metros del Mont Blanc. La cara norte de la monta?a submarina sube casi vertical desde los 5.000 metros de profundidad de los fondos abisales hasta los 440 metros de la superficie en el punto m¨¢s alto. Mide unos 50 kil¨®metros de este a oeste y 17 de norte a sur.

El banco alberga unas 550 especies: corales de agua fr¨ªa, peces de profundidad, raras estrellas y crust¨¢ceos ¨²nicos. S¨®lo con un robot submarino se pueden estudiar los efectos de la pesca de arrastre sobre el fondo. S¨¢nchez explica que "en una sola muestra a 500 metros de profundidad aparecieron 102 especies de las cuales nueve son nuevas para la ciencia".

El Ministerio de Pesca y el de Medio Ambiente han elegido este lugar para cumplir las exigencias de la UE de proteger zonas marinas y declararlo ¨¢rea marina protegida. El Cachucho ser¨¢ el primer parque natural sumergido. El secretario general de Pesca, Fernando Curcio, afirma que el Gobierno trabaja para "proteger la biodiversidad marina de espacios como El Cachucho". Curcio anuncia que "antes de 2008 ser¨¢ ¨¢rea marina protegida, algo que limitar¨¢ actividades humanas: pesca, prospecciones, tendidos submarinos o tr¨¢fico mar¨ªtimo".

La principal actividad humana en El Cachucho es la pesca de arrastre que practican barcos especialmente portugueses. S¨¢nchez dirige desde 2003 campa?as para cartografiar el suelo del banco y explica que "la pesca de arrastre con un tren bolos, una t¨¦cnica muy agresiva con el fondo marino, est¨¢ prohibida para los barcos espa?oles, pero no para los europeos, por eso es urgente la declaraci¨®n de ¨¢rea marina protegida, porque si no, este tesoro desaparecer¨¢ en a?os".

Actualmente, algunos parques naturales, como el del Cabo de Gata, Do?ana o las Islas C¨ªes incluyen parte de su costa como espacio protegido, pero no hay ning¨²n banco exclusivamente marino protegido por razones ambientales. S¨ª hay reservas para favorecer la pesca sostenible.

Las reticencias de los pescadores espa?oles est¨¢n vencidas, seg¨²n S¨¢nchez: "Desde el punto de vista pesquero, evitar el arrastre en esa zona puede ser positivo, ya que all¨ª se re¨²nen muchas especies reproductoras como la bacaladilla, la locha o el cachucho". Es decir, al limitar la pesca en el banco, puede mejorar las capturas en otras zonas del Cant¨¢brico.

El Gobierno no ten¨ªa claro c¨®mo proteger los fondos marinos,ya que no estaba delimitado si era competencia del Ejecutivo central o auton¨®mico. Por eso encarg¨® un informe al Consejo de Estado que, en 2006, dictamin¨® que las aguas alejadas de la plataforma continental eran competencia estatal. Los estudios sobre la cordillera submarina cant¨¢brica se realizaron mientras el Consejo de Estado realizaba su dictamen y siguieron mientras Medio Ambiente redactaba la Ley de Biodiversidad, que ampara la creaci¨®n de estos parques y que el pasado viernes aprob¨® el Consejo de Ministros.

Pero si declarar un parque protegido en tierra es complicado, aplicar por primera vez el procedimiento en el mar lo es mucho m¨¢s. Curcio asegura que el Cachucho estar¨¢ protegido antes del fin de la legislatura, pero que la decisi¨®n llegar¨¢ incluso "al Consejo de Ministros de la UE". Las aguas del banco son de pesca de la UE y con este paso Espa?a se garantiza que cuando otros pa¨ªses declaren zonas protegidas lo har¨¢n con informes cient¨ªficos y que no proteger¨¢n sin motivo caladeros explotados por la flota espa?ola.

Con la declaraci¨®n de el Cachucho, Espa?a comenzar¨¢ a cumplir el Convenio Ospar, por el que hace 10 a?os los pa¨ªses europeos se comprometieron a proteger el 10% de sus ¨¢reas marinas. Los oc¨¦anos son las grandes reservas de la biodiversidad y a la vez los grandes desconocidos, ya que s¨®lo se ha explorado un 5% de ellos.

Los ecologistas aplauden la medida pero critican el retraso de Pesca en la tramitaci¨®n que, aseguran, ha ralentizado los planes de Medio Ambiente. El responsable del programa marino de WWF-Adena, Jos¨¦ Luis Garc¨ªa, afirma que "el Cachucho deber¨ªa estar protegido hace meses, porque hemos estado en las reuniones y hay acuerdo entre las partes". Garc¨ªa critica que esta legislatura s¨®lo se vaya a declarar un ¨¢rea marina, cuando el Ministerio de Pesca anuncia que estudia otras 10 de las 20 que hace un a?o propuso la organizaci¨®n ecologista. Al Cachucho lo podr¨¢n seguir en los pr¨®ximos a?os el banco de Galicia, el ca?¨®n del Cabo de Creus o el Canal de Mernoca, entre otros.