Todos se conocen en El Coronil

Las tres primeras llamadas como alcalde de Jer¨®nimo Guerrero han sido a la Guardia Civil. Sentado en un despacho deslavazado y a medio traspasar, el nuevo regidor de El Coronil respira hondo mientras recibe informes sobre la calma con la que ha amanecido este pueblo de la sierra sur sevillana, famoso por las vistosas hileras de jornaleros que llegaban a la capital, junto a las muchedumbres de Marinaleda, para reclamar justicia social en el campo. La investidura de Guerrero, socialista y t¨¦cnico electricista de 33 a?os, se culmin¨® el s¨¢bado a trompicones cuando arrebat¨® de improviso la alcald¨ªa a la lista m¨¢s votada, la de IU, merced al voto del ¨²nico concejal del MAI (Movimiento Alternativo de Izquierda). Hubo gritos, insultos, empujones. Volaron monedas, papeles y hasta un zapato. Por la noche, la gresca degener¨® en agresi¨®n y un parte de lesiones al n¨²mero 11 de la lista de los independientes, Juan V¨¢zquez Mart¨ªn.

IU cree que el nuevo alcalde recibi¨® el aval del PSOE provincial para arrebatarle la alcald¨ªa

"Durante 20 a?os se ha estado criminalizando al PSOE, inculcando el odio en los vecinos". El nuevo alcalde pinta un panorama estremecedor. Dice que no exagera, que todav¨ªa no se puede hablar en un bar libremente, que fluye la amenaza: "Hemos pasado de Franco a la dictadura del miedo. Estamos viviendo en Cuba". Por su puesto, Jer¨®nimo Guerrero apoya en todas estas acusaciones la decisi¨®n de desobedecer la directriz del PSOE de dejar gobernar a IU. "Estoy dispuesto a asumir los expedientes que sean", afirma. Parece que no va hacer falta. En el comit¨¦ provincial del PSOE del domingo, Guerrero casi fue ovacionado y ayer se empezaron a o¨ªr de dirigentes socialistas teor¨ªas exculpatorias.

"Mi impresi¨®n es que Guerrero ha tenido el aval del PSOE provincial". Jos¨¦ Antonio N¨²?ez, el alcalde saliente, despacha ya en el llamativo caser¨®n de la sede del SOC (Sindicato de Obreros del Campo). La versi¨®n de N¨²?ez es disculpatoria: los ¨¢nimos se dispararon por la fogosidad con la que se vive la pol¨ªtica en El Coronil. "Nos fuimos a la cama con la promesa del PSOE de que se iba a respetar el pacto, y al llegar al ayuntamiento nos encontramos con el pastel. Hubo provocaciones, las cosas duelen, pero eso ya pas¨®". Empleado de mantenimiento de 46 a?os, el ex alcalde se define como un "politiquillo de pueblo con experiencia" que le sirve para deducir que "Guerrero, liberado del PSOE en la Diputaci¨®n, no se ha saltado ninguna orden de su partido, porque cuando alguien tiene el poder, no se lo salta ni Dios". N¨²?ez est¨¢ tan enfadado con el PSOE como con IU. O m¨¢s. "No nos hemos sentido defendidos; hab¨ªa un ¨®rdago [la ciudad de Sevilla] para poder presionar. Si esto no se arregla, nos saldremos de IU". De los motivos de Manuel Lara (el concejal del MAI) para aliarse con el PSOE, sostiene tajante: "Su obsesi¨®n es Diego Ca?amero", el famoso l¨ªder jornalero, secretario general del SOC y ex alcalde, a quien m¨¢s se ha visto estos d¨ªas meg¨¢fono en mano. De hecho, su hijo Jos¨¦ ha sido hasta ahora teniente de alcalde.

Lara est¨¢ en su casa, vigilada a ratos por la Guardia Civil tras ser asediada en la noche del s¨¢bado por una turbamulta. Muestra el convenio que ha firmado con el PSOE y tambi¨¦n un discurso bien armado sobre el d¨¦ficit de la libertad de El Coronil y la supuesta transmutaci¨®n del SOC en una organizaci¨®n absolutista. Fundador de este sindicato, le llamaban el maestro por su esmerada formaci¨®n (tiene estudios de Magisterio) y su manera de razonar. ?l no quiere hablar de nada personal, pero otros lo hacen por ¨¦l. Estuvo casado con una hermana de Diego Ca?amero y su separaci¨®n coincidi¨® con la crisis en el sindicato. A partir de ah¨ª las relaciones entre ambos, en un pueblo de apenas 5.000 habitantes, se hicieron imposibles. Lara asegura que su argumento es ajeno a las rencillas: "En El Coronil la izquierda no acab¨® con el sistema de dominaci¨®n del franquismo, lo perfeccion¨® a su favor".

El caso es que en el pleno de la algarada se oyeron mas referencia personales que en una boda. Porque en El Coronil todos se conocen, y eso parece lo malo.