"Quiero aprender a protegerla"

Ramona S¨¢nchez, de 71 a?os, vive en la localidad barcelonesa de Viladecans con su marido, su hijo y su madre. Es ama de casa, pero desde hace a?o y medio tiene otra profesi¨®n: cuida de su madre, Manuela, de 101 a?os. Esta mujer lleva un marcapasos, sus bronquios no est¨¢n bien y, sobre todo, su salud es delicada. "Lo que tiene son a?os", dice Ramona.

La levanta, le da de comer, la acuesta... lo hace todo por ella. Y ella le cuenta las historias de su ni?ez. Ramona asegura: "Ella est¨¢ bien de la cabeza, pero no se la puede dejar sola. ?ste es un trabajo de 24 horas. Si salgo a la calle, se queda mi marido". Durante a?os, la anciana ha vivido a caballo entre las tres casas de sus hijas, pero desde que se puso peor se qued¨® con Ramona.

"Tengo muy buena relaci¨®n con la doctora que la lleva, ella me explica c¨®mo lo tengo que hacer y yo controlo la situaci¨®n. Cuando veo que no, llamo a urgencias. Cuando tiene achaques a veces no entiendo qu¨¦ quiere decir. Pero es una enferma muy paciente". No es partidaria de ingresar a su madre en el hospital. "La veo tan mayor... S¨®lo recurro al hospital cuando es muy necesario". Esta ama de casa se muestra dispuesta a estudiar un curso de formaci¨®n, no le importar¨ªa; "Me gustar¨ªa aprender a protegerla. Saber qu¨¦ hacer en los momentos en que est¨¢ m¨¢s cargada o se ahoga. Saber lo que tendr¨ªa que hacer en cada situaci¨®n de peligro".

Ramona no pide mucho. Lo que m¨¢s le gustar¨ªa es que una persona pudiera ir a su casa, aunque s¨®lo fuera una hora, para hacer compa?¨ªa a su madre. "Si la tengo que estar pagando, entonces no me llega".

Manuela cobra de pensi¨®n algo m¨¢s de 300 euros m¨¢s la ayuda de la Generalitat, 240 euros. Pese a ello, su hija es contundente: "No la llevar¨ªa a una residencia. Ya ha sufrido mucho".