aGEnBiTe oF iNWiT
As¨ª de raro es su nombre. O su apodo fingido. Porque no estamos ante un pseud¨®nimo m¨¢s o menos ingenioso. No: aGEnBiTe oF iNWiT, con su distribuci¨®n aleatoria de may¨²sculas y min¨²sculas, es otra cosa. ?Una f¨¢bula de la literatura inglesa del siglo XIII? ?Una frase que Joyce manipulaba en su Ulises para forjar el interior de Leopold Bloom? ?El remordimiento m¨¢s hiriente del mundo? ?La sutil incomodidad ante esa vieja costumbre de empezarlo todo con may¨²scula?
No se sabe. Quiz¨¢s haya que contentarse con uno de los escasos datos que tenemos sobre la persona que se esconde bajo ese antifaz: "proyecto de escritura de identidad inaprensible". En eso consiste aGEnBiTe oF iNWiT: lo leemos en las Vitolas del Ana?s (Cuadernos del Vig¨ªa, Granada, 2007), donde se incluye un poema suyo; veamos la primera estrofa: "Hay perros convencidos / de que un hueso seco / es el mejor manjar sobre la tierra. / Los vemos revolcarse de alegr¨ªa. // Desconocen la carne y su textura. / Son felices".
Para construirse esa "identidad inaprensible", desde junio de 2003, se cuenta con un blog (www.inwit.tk): cada mes un poema, un pu?ado de l¨ªneas para andar un camino contrario: "No pensamos que haya que ser 'sensible' para escribir poes¨ªa, no creemos que haya que cambiar el tono de la voz para recitarla, no queremos que nos roben lo que debe ser de todos. Finalmente, no queremos llamar arte a lo que es artesan¨ªa".
aGEnBiTe oF iNWiT gan¨® el Acc¨¦sit del Premio Garc¨ªa Lorca de la Universidad de Granada, en 2006, con su libro de poemas Extensi¨®n m¨ªnima (Granada, 2007), en la calle desde hace pocos d¨ªas bajo la bandera del Copyleft: "Empec¨¦ a escribir y luego me cans¨¦, miraba alrededor y s¨®lo ve¨ªa poetas en busca de la fama", me dice clav¨¢ndome su iris casi pelirrojo, un iris del mismo color que el color escurridizo de su barba, colores que guardan entre s¨ª la misma relaci¨®n que guarda su escritura con la inteligente etiqueta escogida para alejarse de la vida literaria. No firma los poemas con su nombre porque quien lleva su nombre inici¨® la retirada: "no me gusta el mercadeo po¨¦tico", repite varias veces. Prefiere la otra vida, la que vale la pena. Tal vez sus poemas no sean del todo suyos. Pero tampoco son de nadie. "No quiero encontrarme con lo otro, no busco lo otro, tal vez lo que yo quiera ser es ninguna".
Cuando no escribe poemas, iNWiT toca la bater¨ªa en una banda de rock y de m¨²sica pr¨ªstina (as¨ª autocalifican su m¨²sica) que se hace llamar La Barca de Sua (imprescindible visitar el sitio www.labarcadesua.org); adem¨¢s, dentro de pocos meses, andar¨¢ instalando tres sism¨®grafos en la Pen¨ªnsula Ant¨¢rtica (los caminos de la literatura son inescrutables); y ahora, probablemente, estar¨¢ maldici¨¦ndome por haber escrito estas l¨ªneas: "es posible que gane este certamen / y reciba llamadas de los medios / tan bien intencionados / y entonces me ver¨¢n en los papeles / mentir junto a los pocos / dormir entre cabrones en las hemerotecas / eso es lo que me espera si es que gano".
Jos¨¦ Carlos Rosales es autor del poemario El desierto, la arena.
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