Los ejecutivos no cambian de pareja

"No entendemos por qu¨¦ nos cuesta tanto reclutar a directivos para que vayan a Buenos Aires. Cre¨ªamos que nos iban a sobrar voluntarios". Los m¨¢ximos directivos de Qualytel, una empresa de atenci¨®n telef¨®nica que acaba de adquirir una compa?¨ªa argentina, se hacen cruces ante las inesperadas dificultades para desplazar a directivos de la matriz a la nueva filial de Buenos Aires. "Y eso que es para una estancia temporal. Si fuera un destino definitivo no sabemos qu¨¦ pasar¨ªa", se lamentan en la compa?¨ªa.

El caso de Qualytel no es un hecho aislado, seg¨²n revela un estudio elaborado para la Asociaci¨®n de Empresas de B¨²squeda y Selecci¨®n de Personal (BYS) por la consultora Jakobsland Parteners, especializada en gestionar personal directivo en situaciones de cambio, en 141 empresas analizadas.

Solo un 13% cambiar¨ªa de residencia por motivos profesionales, cuando la media europea se sit¨²a en un 27%. Creen que en Espa?a se vive mejor

A los directivos espa?oles les cuesta cambiar de empresa. Su promedio de rotaci¨®n es de un 7%, muy por debajo de la media europea, que bascula entre el 10% y el 17% anual.

El arraigo territorial y los lazos familiares son las principales ataduras que impiden la movilidad geogr¨¢fica. S¨®lo un 13% cambiar¨ªa de residencia por motivos profesionales, cuando la media europea se sit¨²a en un 27%. Esta resistencia reduce las posibilidades del mercado de trabajo y, por tanto, las alternativas a cambiar de empleo. Pero mientras se mantenga el tradicional apego de los espa?oles a la propiedad de la casa (el 81% de sus ocupantes son propietarios) y se mantenga la creencia de que en Espa?a se disfruta de una calidad de vida muy superior a la de los vecinos el salto a otra empresa no resultar¨¢ f¨¢cil.

Aunque la incorporaci¨®n de la mujer a la actividad laboral es creciente, la mayor¨ªa de los altos cargos son los que aportan la principal, cuando no la ¨²nica, fuente de ingresos familiar. "Con todos los huevos en la misma cesta, los altos cargos miden con cuidado los riesgos que asumen, incluidos los que comporta un cambio de empleo y el consiguiente desplazamiento familiar", se?ala el estudio. Los directivos menores de 35 a?os, con pocas cargas familiares, son los m¨¢s dispuestos a cambiar de puesto laboral.

Otro elemento que incide en la escasa movilidad es el tejido empresarial espa?ol, dominado por las peque?as empresas en las que el due?o coincide ser el principal ejecutivo de la compa?¨ªa.

La escasa o elevada rotaci¨®n de directivos tiene sus luces y sombras. Las compa?¨ªas en las que perduran los directivos dif¨ªcilmente tendr¨¢n la misma capacidad de innovaci¨®n que las que renuevan sus equipos. Si la rotaci¨®n es excesiva crecen los costes de selecci¨®n y formaci¨®n, se pierde experiencia y conocimientos y cae la productividad. ?se es el motivo de que algunas compa?¨ªas procuren fidelizar a sus altos cargos mediante pol¨ªticas de desarrollo y retribuci¨®n.

El dinamismo de fusiones y adquisiciones de los ¨²ltimos a?os ha impulsado un cambio en esta tendencia, seg¨²n Juan Planes, vicepresidente de BYS, porque ha generado un aumento de los despidos y rotaciones forzosas.