Brasil resucita su programa nuclear
Lula anuncia la construcci¨®n de una nueva central tras 20 a?os de par¨®n
El presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva quiere que Brasil llegue a ser una potencia en energ¨ªa nuclear. Por eso ha anunciado que no escatimar¨¢ en gastos para construir un tercer reactor nuclear y un submarino impulsado con energ¨ªa at¨®mica. El dinero para ambos proyectos, seg¨²n el presidente brasile?o, estar¨¢ disponible por los pr¨®ximos ocho a?os.
Brasil tiene dos reactores de enriquecimiento de uranio, el Angra 1 y el Angra 2. Cuando en los ochenta se dispon¨ªa a construir el Angra 3, al pa¨ªs le falt¨® dinero y no pudo completar el proyecto. Ahora Lula no s¨®lo resucita el proyecto Angra 3, sino que confirma que si "hace falta, construiremos m¨¢s [centrales nucleares] porque es energ¨ªa limpia y segura".
La puesta en marcha del reactor Angra 3 se aparc¨® en los ochenta por falta de fondos
El presidente brasile?o ha a?adido que su pa¨ªs puede darse el lujo de ser uno de esos pocos Estados que dispone de dinero para enriquecer uranio para fines pac¨ªficos. El proyecto Angra 3 requiere una inversi¨®n de 2.700 millones de euros y est¨¢ previsto que entre en funcionamiento para 2013. Tendr¨¢ una capacidad de producci¨®n de 3.000 megavatios, 1.000 m¨¢s que las centrales que ya est¨¢n en funcionamiento.
Brasil es dependiente de la energ¨ªa hidroel¨¦ctrica y ya es energ¨¦ticamente deficitaria. Si no pone remedio, la falta de energ¨ªa provocar¨¢ verdaderas crisis y apagones a partir de 2010, si el pa¨ªs sigue creciendo econ¨®micamente a buen ritmo. En 2001, Brasil hizo frente a una grave crisis energ¨¦tica por una intensa sequ¨ªa que merm¨® mucho la capacidad de producci¨®n de energ¨ªa hidroel¨¦ctrica.
Adem¨¢s de reforzar la producci¨®n de electricidad con energ¨ªa at¨®mica, Lula quiere construir un submarino nuclear. Lo anunci¨® hace unos d¨ªas en presencia del almirante Julio Soares de Moura Neto. Para que nadie piense que ha sido un farol, Lula ha destinado unos 400 millones de euros al proyecto.
Lula les confi¨® que un fuerte proyecto nuclear permitir¨¢ a Brasil "ingresar en el selecto grupo de pa¨ªses con capacidad de llevar a cabo la construcci¨®n de submarinos de propulsi¨®n nuclear". Ha sido siempre el sue?o de Lula que Brasil deje la cola de los pa¨ªses en desarrollo para que pueda pasearse por los lujosos salones de los pa¨ªses desarrollados con programas punta.
Ya en una ceremonia del pasado frente a la c¨²pula de la Marina brasile?a, Lula destac¨® la triple utilidad del programa nuclear: la construcci¨®n de submarinos nucleares, la generaci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica y el desarrollo de nuevos materiales. El presidente siempre ha criticado a los pol¨ªticos de "corto alcance", aquellos incapaces de pensar a 20 a?os vistas, preocupados s¨®lo por el momento que tienen ante las narices y que les proporciona votos.
Durante la campa?a electoral de 2002, cuando Lula gan¨® las elecciones y el Partido de los Trabajadores (PT) lleg¨® al poder, extra?¨® a algunos el hecho de que Lula elogiase el plan econ¨®mico de los militares durante la dictadura, atribuy¨¦ndole la grandeza de haber pensado en planes a muy largo plazo para Brasil. Quien entonces pens¨® que Lula s¨®lo quer¨ªa asegurarse los votos de los militares se equivoc¨®, pues dichos votos ya los ten¨ªa. Lula siempre quiso dialogar con los militares, incluso en los tiempos duros de la dictadura cuando era un reconocido y popular l¨ªder sindical, como confirman hoy sus mejores bi¨®grafos. Los militares nunca le detuvieron -s¨®lo lo hizo la polic¨ªa y por unos d¨ªas apenas- ni se vio nunca forzado a exiliarse en el extranjero. Su car¨¢cter pragm¨¢tico y su deseo de dialogar y hacer pactos con todos le salv¨® ya entonces.
Hoy, con la fuerza de su popularidad no afectada ni por los peores esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de su Gobierno, Lula puede permitirse el lujo de decir lo que siempre pens¨®: que Brasil puede y debe ser una potencia nuclear y que las Fuerzas Armadas no deben ser humilladas y deben gozar de toda la moderna tecnolog¨ªa de defensa, como las grandes potencias.
Lula mantiene una relaci¨®n de cierta tensi¨®n s¨®lo con algunas instituciones ecologistas que le ponen trabas para el aumento de centrales nucleares Lleg¨® incluso a acusarlas de estar impidiendo el desarrollo econ¨®mico del pa¨ªs.
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