Predicciones de escasez

El petr¨®leo es la fuente de energ¨ªa m¨¢s importante de la econom¨ªa mundial, as¨ª que no es extra?o que peri¨®dicamente sea objeto de previsiones catastrofistas o amenazas de crisis.

La Agencia Internacional de la Energ¨ªa (AIE) acaba de publicar su admonici¨®n: a partir de 2012, el mercado mundial de petr¨®leo sufrir¨¢ una crisis aguda que se manifestar¨¢ en forma de subidas de precios nunca conocidas con anterioridad. La causa es que el ritmo de aumento de la oferta de crudo es mucho m¨¢s lento que el de la demanda. A partir de esa fecha, puede llegarse incluso a situaciones del mercado, probablemente espor¨¢dicas, en las que ni siquiera subidas explosivas de precios garanticen el suministro a los pa¨ªses consumidores.

Las predicciones de la AIE llegan en momento oportuno, cuando el brent supera los 76 d¨®lares por barril, despu¨¦s de otra escalada en los ¨²ltimos meses. Los factores que provocan la subida constante del crudo nacen, en primer lugar, de una demanda que crece en progresi¨®n aritm¨¦tica y que, adem¨¢s, es asim¨¦trica. Mientras los pa¨ªses desarrollados ensayan, con m¨¢s voluntad que acierto, estrategias de ahorro y tecnolog¨ªas que reduzcan el consumo de combustibles, China o India queman sin freno petr¨®leo y derivados para mantener tasas de crecimiento anual por encima del 10%.

La producci¨®n mundial tambi¨¦n atraviesa por un momento endiablado. La inestabilidad pol¨ªtica cr¨®nica en Ir¨¢n o Irak est¨¢ minando el flujo de inversiones para exploraci¨®n y explotaci¨®n. Uno de sus efectos m¨¢s perversos ha sido la desaparici¨®n de los recursos financieros para nuevas perforaciones y para la extracci¨®n r¨¢pida en los pozos que ya est¨¢n en explotaci¨®n cuando un tir¨®n s¨²bito de la demanda as¨ª lo exige. Los mercados energ¨¦ticos saben hoy que los pa¨ªses productores carecen de flexibilidad para responder a las peticiones intempestivas de compra, y el conocimiento de esta escasez marginal encarece tenazmente los precios.

As¨ª que el pron¨®stico de la AIE tiene visos de credibilidad. Sorprende incluso que la crisis del mercado mundial se aplace hasta 2010, cuando es evidente que los factores que la producen est¨¢n operando ya. Es una cuesti¨®n relevante saber si los pa¨ªses consumidores ser¨¢n capaces de atemperar la escalada insoportable de los precios mediante estrategias comunes de ahorro que reduzcan la presi¨®n de la demanda. Dada la descoordinaci¨®n que se aprecia entre los pa¨ªses desarrollados, su incapacidad para sustituir el petr¨®leo por otras fuentes energ¨¦ticas incluso en ¨¢reas supuestamente coordinadas, como la eurozona, y la pereza de los pa¨ªses en poner en marcha pol¨ªticas efectivas de ahorro -el caso de Espa?a es de libro-, la conclusi¨®n s¨®lo puede ser pesimista.