El 14% de la poblaci¨®n sufre un nivel de contaminaci¨®n superior al tolerado por la UE
Una de cada cinco personas padecen molestias por el elevado ruido en las ciudades vascas
La relaci¨®n entre el medio ambiente y la salud humana es compleja. Para conocer mejor c¨®mo afectan a ¨¦sta la contaminaci¨®n provocada por sectores como el transporte, la energ¨ªa y la industria, los departamentos de Sanidad y Medio Ambiente han elaborado un estudio en el que analizan hasta 19 indicadores medioambientales. Se trata de comprobar como se resiente la salud por cuestiones como la poluci¨®n del aire o el ruido. Entre las conclusiones obtenidas est¨¢ que el 14% de la poblaci¨®n se halla expuesta a un nivel de contaminaci¨®n superior al tolerado por la UE.
Se trata de poluci¨®n atmosf¨¦rica causada por las conocidas como part¨ªculas PM10. Sus principales fuentes emisoras son los veh¨ªculos a motor, centrales t¨¦rmicas, calderas dom¨¦sticas, procesos fotoqu¨ªmicos, as¨ª como los incendios. Este tipo de part¨ªculas se asocian con efectos adversos para la salud, al incrementar los problemas respiratorios y agravar el asma. El riesgo es mayor en ancianos, ni?os y personas con enfermedades coronarias. En muchos casos, esta contaminaci¨®n provoca muertes prematuras. La consejera de Ordenaci¨®n del Territorio y Medio Ambiente, Esther Larra?aga, y el consejero de Sanidad, Gabriel Incl¨¢n, se esforzaron durante la presentaci¨®n del estudio por asegurar que es una labor de todos obtener una calidad de medio ambiente tal que los niveles de contaminaci¨®n no representen riesgos significativos para la salud de las personas. "Desde instituciones hasta asociaciones, desde las familias hasta los colegios", apuntill¨® Incl¨¢n.
El estudio ha analizado 19 indicadores. La cruz la han representado los relativos a la calidad del aire y el ruido. Adem¨¢s de ese 14% de poblaci¨®n que sufre una contaminaci¨®n m¨¢s alta de la tolerable, el consumo de petr¨®leo y sus derivados en el sector de transporte ha crecido un 87% por persona entre 1994 y 2005. Y es que el 58% de los desplazamientos se realizan en veh¨ªculo privado. En este punto, Larra?aga apel¨® por introducir las medidas que sean necesarios para acabar progresivamente con la poluci¨®n que provocan los coches, el principal caballo de batalla en la lucha contra la contaminaci¨®n. "Todo es bueno, desde la peatonalizaci¨®n de zonas en las ciudades, hasta la reducci¨®n de la velocidad en las ¨¢reas que rodean a las localidades. Hay que alejar las carreteras de la poblaci¨®n y construir coches m¨¢s ecol¨®gicos".
En cuanto al ruido, en el Pa¨ªs Vasco una de cada cinco personas se ve afectada. Bilbao es la ciudad con m¨¢s problemas, ya que seis de cada diez vecinos sufren molestias por esta causa. La orograf¨ªa de la comunidad aut¨®noma, la distribuci¨®n de los asentamientos urbanos y el dificultoso trazado de las v¨ªas de comunicaci¨®n hacen que el ruido tenga un "impacto importante" sobre la calidad de vida de las personas, se lament¨® Larra?aga.
La cara de los indicadores la ofrecen los progresos en la calidad del agua de consumo y la recuperaci¨®n de suelos contaminados. Entre 1990 y 2005, se han descontaminado un total de 229 hect¨¢reas.
Aumenta el c¨¢ncer de piel
El consejero de Sanidad alert¨® sobre el aumento imparable de los casos de c¨¢ncer de piel, debido, fundamentalmente, a la exposici¨®n a las radiaciones solares. La capa de ozono no filtra adecuadamente las radiaciones debido a la contaminaci¨®n y tomar el sol sin las debidas precauciones puede acarrear graves problemas. "Debajo de las t¨ªpicas quemaduras o enrojecimientos de la piel se esconden lesiones a menudo irreversibles. La piel tiene memoria y a la larga esas quemaduras pasan factura". Los casos de c¨¢ncer de piel han pasado de los 144 que se registraron en el a?o 1992 a los 253 contabilizados en 2001.
En cambio, las intoxicaciones alimentarias se han ido reduciendo, aunque siguen siendo significativas. El n¨²mero de brotes en 2005 se elev¨® a 56, afectando a 838 personas. La evoluci¨®n desde 1992 hasta 2005 no sigue una tendencia regular, compagin¨¢ndose a?os con mejoras y otros con empeoramientos. Adem¨¢s, Incl¨¢n asegur¨® que el programa desarrollado por el departamento para vigilar los alimentos que forman parte de la dieta nunca ha obtenido muestras que superen los niveles permitidos de metales como el plomo, cadmio o mercurio.
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