El juez Torres se despacha
El instructor del 'caso Malaya' reclama juzgados especializados en delitos urban¨ªsticos y regulaciones "m¨¢s claras"
No dio detalles, ni nombres, pero todo se entendi¨® perfectamente. El instructor del caso Malaya, Miguel ?ngel Torres, asegur¨® ayer que "no es casualidad" que M¨¢laga sea la provincia en la se han dado los casos de corrupci¨®n m¨¢s importantes de Espa?a. Los motivos: el crimen organizado se asienta en zonas que les son favorables y en las que haya gente proclive a este tipo de conducta. La benevolencia del Grupo Independiente Liberal (GIL) vino a la mente de todos. Las im¨¢genes se sucedieron durante toda una hora.
El magistrado habl¨® ayer de la corrupci¨®n urban¨ªstica en los cursos de verano de Ronda. Prometi¨® a sus alumnos que tratar¨ªa de ser lo m¨¢s did¨¢ctico posible y lo dej¨® todo bien claro. Le dio tiempo a reclamar m¨¢s cooperaci¨®n internacional e instrumentos para que los bancos aporten m¨¢s informaci¨®n sobre los investigados, apost¨® por el reclutamiento de arquitectos en las investigaciones y mantuvo que hacen falta juzgados especializados en esta materia. Dej¨® la timidez fuera del aula e incluso se permiti¨® alguna que otra broma con la figura de los arrepentidos. "No existen, porque nadie se arrepiente", dijo. Tambi¨¦n se asombr¨® porque a los alcaldes de los ayuntamientos m¨¢s boyantes les d¨¦ por "poner estatuas por todos sitios".
El magistrado lament¨® que la sociedad no haya reaccionado a¨²n ante los delitos fiscales
Poco antes del mediod¨ªa, el juez concedi¨® su primera rueda de prensa. El motivo era su ponencia y no estaba dispuesto a hablar de otra cosa. En siete minutos respondi¨® a una decena de preguntas de forma escueta. No quiso precisar en qu¨¦ momento de la instrucci¨®n se encuentra el caso Malaya, ni si prorrogar¨¢ su comisi¨®n de servicio en el juzgado n? 5 de Marbella. "S¨®lo s¨¦ que hoy vuelvo a Marbella", dijo. A rega?adientes, reconoci¨® que el caso le hab¨ªa "cambiado la vida", porque no puede salir a la calle o ir a comer con su familia con total normalidad, y dijo que la sensaci¨®n de que "todos los pol¨ªticos roban" es m¨¢s una frase hecha que una realidad.
En su charla, en la que estaba previsto que participara uno de los inspectores de Malaya -estuvo entre el auditorio pero habl¨®-, Torres declar¨® la guerra a las percepciones err¨®neas de la corrupci¨®n. "No se suele vincular un hecho delictivo grave, como un tiroteo con v¨ªctimas ajenas o un ajuste de cuentas, a la actividad de blanqueo. Pensamos que es algo aislado, pero todas estas figuras se buscan y terminan asoci¨¢ndose", dijo. El magistrado destac¨® la importancia de la investigaci¨®n patrimonial porque "ataca a la base econ¨®mica" de las organizaciones y las hace desistir cuando ven que negocios, como el tr¨¢fico de drogas, no les son rentables.
El magistrado venci¨® el p¨¢nico esc¨¦nico mirando siempre a un mismo punto. Mientras hablaba apenas mov¨ªa los brazos, que mantuvo apoyados en la mesa. Las mangas de su traje de chaqueta azul dejaron ver un par de pulseras de piel. A pesar de su fama, el magistrado no supera la primera mitad de la treintena.
Habl¨® de los sentimientos contradictorios que puede generar el auge urban¨ªstico en determinados municipios: "Para muchos ayuntamientos resulta dif¨ªcil resistirse a estas inversiones y cuando las cosas van bien nadie se plantea que hay detr¨¢s". Cont¨® que muchos pueblos peque?os ni siquiera tienen capacidad ni preparaci¨®n para asumir proyectos que les doblan o triplican la poblaci¨®n y que, con frecuencia, se confunden los intereses de los empresarios con los de la poblaci¨®n.
Los efectos de la corrupci¨®n urban¨ªstica no tardaron en llegar. "Se cree que no afecta a nuestras vidas, pero si se construye un bloque de 15 plantas en un lugar en el que no estaba previsto puede quitarte las vistas, un parque o el espacio para un hospital (...) El empresario que paga
nunca va a perder dinero. Se podr¨ªa hacer un estudio sobre el incremento de precio de la vivienda en municipios con corrupci¨®n", sugiri¨®.
Poco a poco, fue repasando el papel de cada uno de los miembros de las tramas. "Hace falta que colaboren t¨¦cnicos, abogados, gestores o asesores que crean una especie de urbanismo a la carta". Las concejal¨ªas de Urbanismo se desgajan con la creaci¨®n de gerencias en las que los servicios jur¨ªdicos son externos y los informes se ama?an. Los t¨¦cnicos, "una figura muy dif¨ªcil de condenar", son nombrados en consonancia con la administraci¨®n y los cabecillas se rodean de dos tipos de abogados: "el que le defiende y el que le gestiona los fondos".
Repas¨® tambi¨¦n el papel de promotor. "Estos empresarios suelen ser personas aclamadas, valoradas, socialmente reconocidas por el pueblo, que incluso reciben premios por su labor en beneficio de determinadas localidades". El peligro llega cuando "ascienden al mundo de los clubes de f¨²tbol, donde se mezclan intereses deportivos y econ¨®micos, se codean con la pol¨ªtica y terminan convirti¨¦ndose en alcaldes".
El magistrado se lament¨® en varias ocasiones de que la sociedad no haya reaccionado todav¨ªa ante el cobro en dinero negro o delitos contra la Hacienda P¨²blica porque cuesta trabajo enmarcarlos como conductas corruptas. "Son percibidas dentro del ¨¢mbito administrativo, no como algo penal", a?adi¨®. Se quej¨® de la creencia de que delitos con una pena de dos a?os de prisi¨®n -como construir en una zona ilegal- no lleven a la c¨¢rcel, o que a partir de los 70 a?os "todo el mundo puede delinquir porque no pasa nada".
Al hablar de las investigaciones alab¨® la creaci¨®n de equipos multidisplinares (en los que colabora la Agencia Tributaria, Fiscal¨ªa y las fuerzas de seguridad) y se quej¨® de que muchas figuras como la del testigo protegido, el arrepentido o el agente encubierto s¨®lo se pongan en pr¨¢ctica "en el cine". Tambi¨¦n reclam¨® una "regulaci¨®n clara" sobre las intervenciones telef¨®nicas y los registros porque la normativa ha quedado obsoleta y muchas veces deriva en situaciones absurdas.
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