Los primeros cl¨¢sicos para ni?os y j¨®venes

LA PRIMERA aproximaci¨®n a las grandes obras de la literatura viene a trav¨¦s de las adaptaciones para menores de edad. En esas lecturas de colegio o voluntarias es cuando los ni?os y j¨®venes conocen a Simbad el Marino o a Al¨ª Bab¨¢, de Las mil y una noches; saben del enfrentamiento del Quijote con los molinos de viento; son testigos de c¨®mo Mois¨¦s abre las aguas del mar en la Biblia; se entristecen con el frustrado amor de Romeo y Julieta, y m¨¢s obras de Shakespeare; admiran la valent¨ªa de Aquiles y se maravillan con la astucia de la creaci¨®n del Caballo de Troya, en Il¨ªada; viven las aventuras de La isla del tesoro, de Stevenson; descubren el odio y la venganza en El conde de Montecristo, de Dumas, o se asustan ante la existencia del conde Dr¨¢cula, de Bram Stoker.

Se trata del acercamiento m¨¢s com¨²n a los cl¨¢sicos en todo el mundo. Un trabajo que requiere de una gran capacidad de asimilaci¨®n por parte del adaptador que debe crear una obra nueva a partir de ese original respetando la ¨¦poca, el espacio y el esp¨ªritu genuino del autor. "Es necesario que existan estas adaptaciones para que el ni?o empiece a conocer los cl¨¢sicos. Adem¨¢s, porque cada obra original tiene una edad para ser le¨ªda y estas versiones despiertan el inter¨¦s", dice Mart¨ªn Casariego, que tambi¨¦n escribe literatura juvenil, y que acaba de obtener el IV Premio Anaya con Por el camino de Ulectra.

"En las adaptaciones hay que usar las claves del chaval de hoy que en el fondo le interesan los mismos temas que al autor de cl¨¢sicos", asegura Luisg¨¦ Mart¨ªn. Sin olvidar que los profesores deben saber qu¨¦ libros y qu¨¦ versiones son adecuados para cada edad, recuerda Antonio Basanta de la Fundaci¨®n Germ¨¢n S¨¢nchez Ruip¨¦rez.