El sentido de los acontecimientos

M¨¢s de treinta a?os despu¨¦s de su aparici¨®n, se publica por fin la traducci¨®n de la obra cumbre del canadiense Erving Goffman (Alberta, 1922-Pensilvania, 1982), el gran microsoci¨®logo que cerr¨® la Escuela de Chicago tras alcanzar celebridad como inventor del m¨¦todo dramat¨²rgico en su libro de 1959, La presentaci¨®n de la persona en la vida cotidiana (Amorrortu, 1971). En este cl¨¢sico se compara la interacci¨®n social con una representaci¨®n teatral, donde los actores proyectan ante el p¨²blico una imagen aparente mientras preservan su identidad resguard¨¢ndola en la intimidad. Ante el ¨¦xito de ventas, pronto se tradujeron al castellano sus dem¨¢s obras tempranas: Estigma e Internados (Amorrortu, 1970 y 1971) as¨ª como Relaciones en p¨²blico (Alianza, 1979). Y tambi¨¦n por entonces se tradujo este Frame Analysis, original de 1974, aunque no lleg¨® a editarse porque tras su temprana muerte en 1982 la moda Goffman empez¨® a caducar. Pero s¨®lo se trataba de un eclipse, pues tres lustros despu¨¦s su obra retorn¨® al primer plano tras la reivindicaci¨®n de que fue objeto por autores como Randall Collins. Y a ello contribuy¨® la biograf¨ªa intelectual (EG: retrato del soci¨®logo joven) que le dedic¨® Yves Winkin (Los momentos y sus hombres, Paid¨®s, 1991), donde se narra la carrera ascendente de este jud¨ªo ruso-canadiense desde la condici¨®n de paria hasta la de parvenu, pues gracias a su estrategia matrimonial (tras casarse con una rica heredera de la Costa Este) y especuladora (como jugador de casino y de Bolsa), logr¨® acceder a la cumbre dorada del cosmopolitismo gentil, cumpliendo el ansiado sue?o de emular a su modelo de inspiraci¨®n: Sigmund Freud.

Si sus dem¨¢s obras son impresionistas y de peque?o formato (algunas como recopilaciones de textos sueltos), ya que rechazaba expl¨ªcitamente la gran teor¨ªa, este Frame Analysis es de factura opuesta, pues se trata de un libro de gran formato y considerable densidad te¨®rica. Pero su contenido es muy preciso, pues se trata de definir y clasificar los marcos de referencia que utili-zan las personas para interpretar los acontecimientos que protagonizan atribuy¨¦ndoles alg¨²n sentido. Recu¨¦rdese la f¨®rmula de Macbeth: "La historia es un cuento narrado por un idiota, lleno de ruido y de furia, que carece de sentido". He ah¨ª el problema: que las cosas tengan o no sentido. Goffman no se refiere a la Historia macro sino a las historias micro de las relaciones interpersonales, pero tambi¨¦n aqu¨ª se plantea el mismo problema: ?tienen alg¨²n sentido los sucesos que vivimos? Pues bien, para Goffman, las interacciones s¨®lo tienen sentido si las interpretamos de acuerdo con ciertos marcos de referencia que nos permitan encuadrarlas: es decir, definirlas, clasificarlas y calificarlas, evalu¨¢ndolas en t¨¦rminos moralmente significativos. Es lo que hacen los marcos (frames): encuadres (como los cinematogr¨¢ficos) que nos permiten atribuir sentido a las situaciones en que participamos. Pero ese sentido no surge de los acontecimientos sino de los marcos con que se los encuadra. De ah¨ª que puedan ser usados para fabricar (Goffman dixit) la interpretaci¨®n de la realidad: ¨¦sta es su funci¨®n estrat¨¦gica.

El concepto de marco de re

ferencia no procede del mismo Goffman sino de uno de sus principales inspiradores, al que cita desde la p¨¢gina 7 del libro: Gregory Bateson, el gran maestro de la primera cibern¨¦tica que cre¨® la escuela de Palo Alto e invent¨® la teor¨ªa del doble v¨ªnculo. Pero esa intuici¨®n de Bateson fue luego sistem¨¢ticamente desarrollada por Goffman para construir sobre ella una de las teor¨ªas de alcance medio m¨¢s influyentes que se han propuesto en los ¨²ltimos lustros: el framing, enmarcado o encuadre, tal como se la conoce en la jerga de las ciencias sociales. Una l¨ªnea de investigaci¨®n que hoy es la predominante en el campo de las movilizaciones colectivas (donde los movimientos sociales pugnan por imponer a los dem¨¢s sus propios marcos de legitimaci¨®n y deslegitimaci¨®n: de ah¨ª el apodo del subcomandante Marcos), en el estudio de la opini¨®n p¨²blica (pues el spin o manipulaci¨®n de la agenda implica la fabricaci¨®n de nuevos marcos o climas de opini¨®n, como se?ala el principal te¨®rico de la agenda setting, Maxwell McCombs) y en el an¨¢lisis del debate pol¨ªtico (tambi¨¦n centrado en la creaci¨®n de marcos cognitivos que fabrican la realidad, seg¨²n revela el ling¨¹ista Lakoff en su ¨²ltimo libro traducido al castellano: No pienses en elefante). Y todas estas l¨ªneas son herederas directas del Frame Analysis, de Goffman.