"Es un triunfo de todo el pueblo iraqu¨ª"
Los jugadores de la selecci¨®n de Irak que gan¨® la Copa Asia temen ser asesinados si vuelven al pa¨ªs
En el partido inaugural de la Copa Asia, celebrado el pasado 7 de julio entre Irak y la anfitriona Tailandia, se produjo un incidente entre dos jugadores iraqu¨ªes que hizo temer que la violencia sectaria tambi¨¦n afectara al equipo de f¨²tbol. Las dos estrellas de la selecci¨®n iraqu¨ª, Hawar Mohamed, kurdo, y Yunis Mahmud, sun¨ª, se daban cabezazos mientras discut¨ªan sobre un error defensivo. D¨ªas despu¨¦s, los protagonistas fueron preguntados por el suceso. El seleccionador, el brasile?o Jorvan Vieira, respondi¨® por ellos a la prensa: "?Tienen hermanos? Es como cuando se discute por un juguete o una pelota, no tenemos problemas en el grupo".
En el siguiente partido, Irak dio la sorpresa y se impuso a Australia, uno de los favoritos, por 3-1. Hawar marc¨® el segundo gol y Yunis le felicit¨® efusivamente con un beso en la nariz. Desde entonces el equipo iraqu¨ª no encaj¨® ning¨²n gol y se impuso en la final del pasado domingo a Arabia Saud¨ª gracias a un remate de cabeza de Yunis tras un pase de Hawar.
La situaci¨®n del defensa Haidar Abdul-Amir resume la de la mayor¨ªa de los jugadores: juega en el extranjero pero su familia vive en Bagdad. "Dedicamos el triunfo a todo el pueblo iraqu¨ª", contaba ayer en conversaci¨®n telef¨®nica desde la capital jordana. S¨®lo siete de los 22 jugadores permanecen en clubes iraqu¨ªes, que s¨®lo disputan partidos en el norte por problemas de seguridad. Del resto, que est¨¢n clubes de Oriente Pr¨®ximo, ninguno quiere regresar.
Yunis Mahmud, capit¨¢n de la selecci¨®n, aprovech¨® para pedir la retirada estadounidense. "Hoy, ma?ana o pasado quiero que se vayan de Irak, espero que sea pronto", dijo enfadado. Declarado mejor jugador de la Copa Asia por la organizaci¨®n, Yunis, de 24 a?os, record¨® la inseguridad que vive su pa¨ªs: "Nos encantar¨ªa celebrarlo en autobuses descubiertos por Bagdad, pero reunir¨ªamos a mucha gente y eso ser¨ªa ideal para un ataque de la insurgencia".
Las celebraciones de las victorias de la selecci¨®n en la Copa Asia han sido la mayor alegr¨ªa para el pueblo iraqu¨ª desde la ca¨ªda del r¨¦gimen de Sadam Husein en 2003. Pero despu¨¦s de cada triunfo se produc¨ªa una matanza. Tras clasificarse para la final, 50 personas murieron en las celebraciones. Una mujer de Bagdad perdi¨® a su hijo tras las semifinales y mand¨® un mensaje a los jugadores: no aceptar¨ªa ninguna condolencia salvo que Irak ganara la final.
Los futbolistas iraqu¨ªes, conocidos como los leones de los dos r¨ªos, consiguieron que los atentados en su pa¨ªs les dieran una motivaci¨®n extra en lugar de separarlos. "Todo lo que sucede en Irak nos anima a intentar hacer feliz a la gente de nuestro pa¨ªs", dijo Hawar el d¨ªa antes de marcar contra Australia. Poco antes de viajar a Tailandia, Anwar, su fisioterapeuta, al que han dedicado el triunfo, fue asesinado en Bagdad. Durante el torneo, cuatro jugadores perdieron a miembros de su familia, como el portero Noor Sabri, un chi¨ª de 23 a?os, cuyo cu?ado fue asesinado.
La Federaci¨®n de F¨²tbol iraqu¨ª hab¨ªa ofrecido el puesto a tres entrenadores antes de que Vieira, de 54 a?os, tomara el cargo dos meses antes del torneo. Tras entrenar a 26 clubes y 5 selecciones, el t¨¦cnico brasile?o acept¨® el reto de formar un conjunto unido. En mayo, al arrancar en Jordania los entrenamientos, dominaba la divisi¨®n. "Acept¨¦ porque hab¨ªan conseguido mantener vivo el f¨²tbol. Cuando llegu¨¦ me encontr¨¦ varios grupos formados y problemas como cuando el kurdo no le pasaba el bal¨®n al sun¨ª", dijo Vieira el lunes en conversaci¨®n telef¨®nica desde Bangkok. "Tuve que apartar a tres chicos que no se integraron con el grupo", explica Vieira, que ahora se dispone a descansar mientras estudia nuevas ofertas. El seleccionador decidi¨® entonces no preguntar por el origen de ninguno de los futbolistas convocados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.