"Los negocios son los negocios"
Las exportaciones de Alemania a Cuba se disparan en s¨®lo dos a?os al margen de distancias ideol¨®gicas
Entre dos de los Gobiernos m¨¢s longevos del mundo, el del alem¨¢n Estado Libre de Baviera y el de la dictadura de Cuba, se han incrementado en los ¨²ltimos a?os las relaciones comerciales.
No parece que los fuertes antagonismos ideol¨®gicos sean un obst¨¢culo para los negocios entre los derechistas de la Uni¨®n Socialcristiana (CSU), que gobiernan desde hace 50 a?os en Baviera, y el r¨¦gimen castrista, que dura ya 48. As¨ª lo formul¨® recientemente en M¨²nich, y de forma tajante, el viceministro de Comercio Exterior cubano, Eduardo Escandell, en unas jornadas dedicadas a Cuba por la C¨¢mara de Industria y Comercio.
Sostuvo Escandell que no hay ning¨²n trasfondo pol¨ªtico en las relaciones econ¨®micas con Baviera: "Es un asunto de negocios, y los negocios son los negocios". Un portavoz del Ministerio de Econom¨ªa de Baviera interrogado por este peri¨®dico respondi¨® a la pregunta de si las diferencias ideol¨®gicas supon¨ªan un obst¨¢culo para el comercio: "Las diferentes opiniones sobre el tema de los derechos humanos, por ejemplo, siempre se tratan. Sobre el respeto a los derechos humanos para nosotros tiene validez el mismo principio que aplic¨¢bamos a los pa¨ªses del Este: cambio a trav¨¦s de la aproximaci¨®n. Despu¨¦s de Fidel Castro tiene que haber en Cuba una transici¨®n libre de tensiones. Tambi¨¦n en esto pueden servir los estrechos contactos econ¨®micos con Baviera".
Las cifras del volumen de comercio son insignificantes para Baviera, pero tienen importancia para Cuba. Seg¨²n el Ministerio de Econom¨ªa b¨¢varo, la suma de exportaciones (37,5 millones de euros) y la de las importaciones (9 millones) supuso un total de 46,5 millones de euros en 2006. Sobre un volumen de 257.000 millones de euros, esto representa para Baviera s¨®lo un 0,02% del total. Las cifras de toda Alemania, que facilita la Oficina Federal de Estad¨ªstica, resultan m¨¢s significativas. Las exportaciones alemanas a Cuba crecieron desde 101 millones de euros en 2003 a 113 en 2004, a 259 (un incremento del 259%) en 2005, y a 412 el a?o pasado. Por el contrario, las exportaciones de Cuba a Alemania apenas aumentan e incluso disminuyen en el mismo periodo: 28 millones en 2003, 36 en 2004, 37 en 2005 y 34 el a?o pasado.
Lo que llama la atenci¨®n en los ¨²ltimos tiempos del comercio con Baviera es la importaci¨®n de algunos de los productos emblem¨¢ticos de la industria alemana. La prensa alemana inform¨® de la compra de 183 autom¨®viles de la marca BMW para los embajadores de Cuba. En la Embajada en Berl¨ªn declararon a este peri¨®dico: "Son coches para las embajadas". BMW espera venderles este a?o otros 60 autom¨®viles. No quisieron confirmar en la Embajada berlinesa la informaci¨®n aparecida en Alemania de que Ra¨²l Castro ya utiliza un BMW muy moderno, comparado con el modelo antiguo de Mercedes que usaba su hermano Fidel. Otros ejemplos: las compras a Man, no de camiones, sino de generadores de electricidad y a IHK de antenas.
Consultados por este peri¨®dico los portavoces de las empresas b¨¢varas que comercian con los cubanos, todos huyen como el demonio del agua bendita a la pregunta de si no temen sanciones de Estados Unidos como consecuencia de la Ley Helms-Burton, que proh¨ªbe el comercio con la dictadura castrista. El Ministerio de Econom¨ªa de Baviera tiene una interpretaci¨®n particular: "Las empresas no norteamericanas tienen que estar atentas en Cuba para no realizar inversiones sobre terrenos expropiados. El comercio normal no se ve afectado por la ley". Alemania tiene un diplom¨¢tico destinado en M¨¦xico que se encarga del comercio con la isla.
En lo que s¨ª coinciden los empresarios b¨¢varos exportadores, el Ministerio de Econom¨ªa y la C¨¢mara de Industria y Comercio, es en atestiguar que Cuba es un socio comercial fiable que paga con puntualidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.