Las fundaciones de la Generalitat pasan de tres a 30 en doce a?os

Las fundaciones p¨²blicas de la Generalitat Valenciana, aquellas en las que m¨¢s de la mitad del presupuesto procede de subvenciones de la Administraci¨®n, se han multiplicado por diez desde que el PP controla las instituciones auton¨®micas. En 1995, la Generalitat financiaba tres fundaciones p¨²blicas: el Centro de Estudios Ambientales del Mediterr¨¢neo, la Fundaci¨®n de Estudios Burs¨¢tiles y Financieros, y la Fundaci¨®n Servicio Valenciano de Empleo. Ocho a?os m¨¢s tarde, en 2003, eran 19. El resumen de la cuenta de gastos e ingresos de la Generalitat a lo largo de 2006 recoge los balances de 29 fundaciones p¨²blicas. Finalmente, entre las modificaciones presupuestarias publicadas el lunes en el DOCV, se cita un acuerdo del Consell de 13 de abril que dispone que ciertos ingresos no previstos derivados y otros fondos disponibles "permiten dotar de cobertura actuaciones consideradas ineludibles", entre ellas, destinar una subvenci¨®n de 170.000 a una nueva fundaci¨®n de la Generalitat Valenciana, Gesti¨®n y Eficiencia Empresarial, que eleva a 30 el n¨²mero de entidades sin ¨¢nimo de lucro cuya supervivencia depende mayoritariamente de las arcas auton¨®micas.

La ley establece que las fundaciones "deben perseguir bienes de inter¨¦s general" como de "asistencia social, c¨ªvicos, educativos" y un largo etc¨¦tera. Funciones todas ellas atribuibles a la Administraci¨®n y que, sin embargo, la Generalitat ha derivado en muchos casos hacia fundaciones.

Gesti¨®n y excelencia

Pero no solo se derivan funciones. Una fuente no oficial vinculada al ¨¢rea de Econom¨ªa apunta que la fundaci¨®n Gesti¨®n y Excelencia Empresarial se cre¨® apresuradamente a principios de abril pasado para garantizar el acomodo de Justo Nieto, quien dej¨® el rectorado de la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia para convertirse en consejero de Empresa hace dos a?os y que no fue incluido en las candidaturas del PP en las pasadas elecciones auton¨®micas.

Al margen de las funciones que asumen o de las personas que ocupan, el objeto de algunas fundaciones p¨²blicas resulta de dudoso inter¨¦s general. Una de las entidades m¨¢s pol¨¦micas es Agua y Progreso, una entidad que defiende la necesidad de garantizar el suministro h¨ªdrico en territorio valenciano en una sinton¨ªa muy estrecha con las tesis que ha venido defendiendo el presidente de la Generalitat.

La legislaci¨®n establece que deben someterse a auditor¨ªa las fundaciones cuyos gastos e ingresos superen los 2,4 millones de euros en dos ejercicios consecutivos. Sin embargo, todas las fundaciones p¨²blicas son auditadas. En el caso de Agua y Progreso, por ejemplo, una entidad que declara un activo circulante superior a los 450 euros en 2006, los auditores apuntan que la entidad tiene abierta la revisi¨®n fiscal de los ¨²ltimos ejercicios no prescritos y se desentienden del resultado que pueda derivar de esa revisi¨®n fiscal.