El Sevilla se abre el futuro
El equipo de Ramos, con un el¨¦ctrico Navas, se acerca a la 'Champions' tras imponerse en la ida de la ronda previa al AEK
El partido de ayer resumi¨® a la perfecci¨®n la actualidad del Sevilla. Empez¨® espeso y lastrado por su agitad¨ªsimo presente y las exigencias para el futuro. Poco a poco, fue reconoci¨¦ndose y su calidad y potencial aparecieron para solventar la papeleta. El resultado obtenido ayer no se antoja definitivo, pero da tiempo y reposo para afinar el juego para cuando haya que jug¨¢rselo todo a una carta.
SEVILLA 2 - AEK DE ATENAS 0
Sevilla: Palop; Hinkel, Boulahrouz (Renato, m. 46), Fazio, Dragutinovic; Navas, Poulsen, Maresca (Keita, m. 46), Capel; Kanout¨¦ y Luis Fabiano (Mart¨ª, m. 70). No utilizados: Vargas; Duda, Kerzhakov y Mart¨ª.
AEK: Moretto; Edson (Kafes, m. 61), Dellas, Alves, Arruabarrena; Zikos (Tozser, m. 92); Manduca, Nsaliwa, Rivaldo (Kone, m. 67), Julio C¨¦sar; y Liberopoulos. No utilizados: Arabatzis; Papastathopoulos, Pliatsikas y Bourbos.
Goles. 1-0. M. 47. Luis Fabiano empuja a la red un pase en paralelo a la l¨ªnea de gol de Jes¨²s Navas. 2-0. M. 67. Kanout¨¦ remata a placer tras recibir en el ¨¢rea un pase de Navas.
?rbitro: Lubos Michel (Eslovaquia). Amonest¨® a Maresca y Arruabarrena.
Unos 45.000 espectadores en el S¨¢nchez Pizju¨¢n.
El AEK comenz¨® el partido con la cabeza m¨¢s limpia. Pareci¨® tener m¨¢s claro el objetivo que buscaba en el primer asalto de la eliminatoria y c¨®mo pod¨ªa alcanzarlo. Al Sevilla se le juntaron demasiadas cosas. El colosal ruido alrededor del traspaso de Daniel Alves y su obvia ausencia sobre el campo y las v¨ªctimas musculares de la pretemporada eran las m¨¢s determinantes. Lloren? Serra Ferrer dibuj¨® un conjunto con un pivote defensivo, un ariete y dos l¨ªneas como tiradas con escuadra y cartab¨®n. Adem¨¢s, todo esto en muy poco espacio. El mallorqu¨ªn se sabe de memoria al Sevilla. Lo que no estaba dispuesto a permitir Serra Ferrer es que los sevillistas le hicieran un roto por las bandas y para impedirlo pidi¨® a sus centrocampistas que le hicieran la vida imposible a los centrales. Y cortocircuit¨® bastante el f¨²tbol de los sevillistas.
Sin la siempre impredecible e infatigable contribuci¨®n de Alves, el traslado de la pelota hasta las posiciones m¨¢s ofensivas parec¨ªa no tener un encargado claro. Fazio y Boulahrouz tardaban en encontrar a qui¨¦n darle la pelota y para cuando lo consegu¨ªan, la defensa griega ya ten¨ªa cinco futbolistas y el resto se dedicaba a abarrotar el centro del campo. El argentino fue ganando presencia con el tiempo y se rebel¨® contra la asfixia a la que le somet¨ªan los griegos con una jugada de potencia en la que lleg¨® a plantarse en el ¨¢rea a la carrera que se diluy¨® en el pase final. Otro joven, Capel, ilumin¨® la banda izquierda y con su br¨ªo y sus ganas gener¨® las mejores ocasiones sevillistas en la primera mitad. Primero, a los cinco minutos, le puso el bal¨®n a Navas en la cabeza que remat¨® sin cre¨¦rselo. Incluso pudo Capel marcar. El saque largo de un c¨®rner aterriz¨® en su pie izquierdo con el que chut¨® duro a las manos de Moretto.
Luis Fabiano remat¨® un par de veces de cabeza y Maresca lo intent¨® en dos ocasiones desde el borde del ¨¢rea. Pero las ocasiones, cuando no entran, suelen tener un contraproducente efecto desmoralizante. Y ese riesgo empez¨® a tomar forma para los sevillistas
El AEK segu¨ªa su gui¨®n a rajatabla y, hasta entonces, le iba de maravilla. Result¨® impagable su regalo de poder ver en acci¨®n a Rivaldo de nuevo, disfrutar del romance de su pierna izquierda con el bal¨®n y de ese trote suyo tan caracter¨ªstico. El brasile?o se ubic¨® en el centro del campo ligeramente escorado a la izquierda intentando cazar un bal¨®n y convertirlo en un pase mortal de necesidad para algunos de sus compa?eros que a¨²n pueden correr. Suyo fue el primer disparo entre los tres palos del conjunto griego, en el minuto 25. En la segunda mitad, no pudo levantarse tras una falta cometida por ¨¦l mismo.
Ramos aprovech¨® el descanso para agitar al equipo. Boulahrouz dej¨® sitio en la defensa a Poulsen para que Keita entrara al centro del campo y Renato trajo la velocidad en el pase que faltaba con Maresca. El equipo se empez¨® a parecer a lo que parece capaz de lograr. Adem¨¢s, resucit¨® Navas, un jugador muy mermado desde que se lesionara el pasado a?o en un partido de Copa. Una de sus a?oradas internadas acab¨® con un pase infallable a Luis Fabiano. Su gol fue tremendamente terap¨¦utico para un equipo y una afici¨®n que tiene la cabeza como una maraca en los ¨²ltimos d¨ªas. Tambi¨¦n una carrera de Navas facilit¨® el segundo tanto. El menudo jugador se plant¨® a toda pastilla en la frontal del ¨¢rea donde encontr¨® a Kanout¨¦ al que obsequi¨® con un pase que le daba sitio y tiempo para preparar su remate. El africano no fall¨® y el Sevilla se sinti¨® m¨¢s cerca que nunca de la Liga de Campeones. Ayer se gan¨® parte de su futuro.
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