Inculpaciones y perd¨®n

No hay en El susurro de la mujer ballena, la novela con la que el escritor peruano Alonso Cueto (Lima, 1954) fue finalista en el Premio Planeta-Casa de Am¨¦rica, la inmersi¨®n de su asunto en la violencia pol¨ªtica de Per¨². No hay en ella las referencias sobre los a?os de la lucha entre el Ej¨¦rcito y el grupo terrorista Sendero Luminoso que encontramos en anteriores novelas suyas, como Grandes miradas o La hora azul, con la que obtuvo el Premio Herralde en 2005.

Se dijo de Alonso Cueto que sus primeros libros abundaban en el m¨¦todo de Henry James. El tejido denso, la intriga psicol¨®gica desnudando el mal o las mezquindades humanas. En su nuevo libro, parece que Alonso Cueto ha elegido un argumento de f¨¢cil digesti¨®n. Est¨¢ en su derecho si quiere ganar m¨¢s lectores. Por suerte para todos, la buena literatura de este escritor no cede un ¨¢pice ante la incorporaci¨®n de posibles nuevos consumidores de su narrativa.

En El susurro de la mujer ballena, el autor lime?o urde una historia que la acerca bastante al g¨¦nero de intriga psicol¨®gica. Por ah¨ª pod¨ªa venir el naufragio. Si no se maneja con oficio la novela psicol¨®gica se puede caer en un santiam¨¦n en la psicolog¨ªa de terror. Cueto, desde una impecable voz femenina, nos narra un drama urbano lleno de sentido contempor¨¢neo. Un drama que ocurre en la ciudad de Lima, pero que podr¨ªa ocurrir en cualquier lugar del planeta.

Una periodista prestigiosa

se encuentra inesperadamente un d¨ªa con una antigua compa?era de colegio en viaje en avi¨®n. La antigua compa?era padece de una indisimulable obesidad. Cueto, con una escritura ¨¢gil y quir¨²rgica a la vez, nos introduce con un magn¨¦tico ritmo en una novela de remordimientos, inculpaciones y perd¨®n.

Hay en esta buena pieza de ficci¨®n de nuestros d¨ªas un duelo de protagonistas que el lector no podr¨¢ abandonar hasta el desenlace final. Este dibujo tambi¨¦n entra?aba sus riesgos. El facilismo efectista, televisivo. Alonso Cueto lo sortea con arte e inspiraci¨®n. Y como en toda novela de calidad siempre hay historias paralelas de enjundia, en la de Alonso Cueto se desarrollan dos. Una, la del encuentro de la periodista con un lejano novio de su madre. La otra, la de Mariano y sus mensajes obscenos.