Patio menos trasero
El hist¨®rico patio trasero de Estados Unidos ya no lo parece tanto. En opuesta simetr¨ªa al eje del mal, en el que hace cinco a?os el presidente norteamericano George Bush inclu¨ªa a Ir¨¢n, cabe hablar de otro eje entre Ir¨¢n, Venezuela, Bolivia y hasta Nicaragua.
El presidente de Ir¨¢n, Mahmud Ahmadineyad, tras reiterar ante la ONU que Teher¨¢n seguir¨ªa desarrollando su industria nuclear, conclu¨ªa el viernes en Caracas una visita a Venezuela y anteriormente a Bolivia. Y en ambas capitales los l¨ªderes se entregaron a un aquelarre verbal contra el "imperialismo norteamericano".
En los ¨²ltimos a?os, Ir¨¢n y Venezuela han acordado proyectos por m¨¢s de 12.000 millones de euros, y en la capital boliviana, adem¨¢s de anunciar el establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas, Ahmadineyad promet¨ªa inversiones por 700 millones.
Con la inclusi¨®n de la Nicaragua de Daniel Ortega, que exigi¨® en la ONU que nadie discutiera el derecho de Teher¨¢n a dotarse del arma at¨®mica, son ya tres los pa¨ªses latinoamericanos que se alinean con la rep¨²blica isl¨¢mica, lo que habr¨ªa sido impensable s¨®lo hace unos a?os. Hay quien habla ya de Ir¨¢n como una nueva URSS que buscar¨¢ su Cuba, pero con la salvedad de que Venezuela es tan rica como la tierra de los ayatol¨¢s, con lo que ser¨ªan dos versiones de la URSS, las que tratar¨ªan de hacerse con una misma clientela entre los Estados menos favorecidos.
Bien est¨¢ que se amigue quien quiera con quien quiera, pero ni Venezuela ni Ir¨¢n, pueden dar lecciones de democracia. La carrera de injurias a Washington en la que compiten Ahmadineyad y Ch¨¢vez es contraproducente. El presunto patio de EE UU es hoy menos trasero, y eso no es criticable, y menos cuando se hace con tan malos modales.
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