Jap¨®n se instala en la Fundaci¨®n Mir¨®

Kawaii es una palabra de moda entre los j¨®venes japoneses. No s¨®lo significa bonito, guapo, mono, sino que define toda una forma de ser y pensar basada en un cierto estrafalario nihilismo y una exaltaci¨®n de la infancia, que tiene su principal icono en los gatitos Hello Kitty y los personajes de los c¨®mic anime/manga, de cuerpo diminuto y cabeza gigante. Los j¨®venes artistas japoneses kawaii son los protagonistas de ?Kawaii! Jap¨®n ahora, un ciclo de exposiciones, organizado por el Espai 13 de la Fundaci¨®n Mir¨® de Barcelona, que arranca con Aya Takano (Saitama, 1976), pintora, dibujante de manga y escritora de ciencia ficci¨®n, miembro del taller de Takashi Murakami, el nuevo gur¨² del arte nip¨®n contempor¨¢neo.

Para su presentaci¨®n en el Espai 13, que con este ciclo estrena un nuevo formato de peque?a retrospectiva, Aya Takano ha seleccionado una veintena de obras entre telas y acuarelas, una pel¨ªcula de animaci¨®n y la escultura de un gato-vaca gigante. Las lolitas y las colegialas sexy de falda plisada y calcetines largos, que caracterizan la est¨¦tica del neopop japon¨¦s, en la exhibici¨®n (abierta hasta el 11 de noviembre) dejan paso a adolescentes andr¨®ginas semidesnudas o envueltas en quimonos, con ojos grandes y asombrados, peinados que recuerdan los de las geishas y piernas largas y delgadas. Pobladores de un mundo on¨ªrico de tonos pastel, los personajes de Takano encarnan las contradicciones del Jap¨®n contempor¨¢neo, en busca de un equilibrio entre la tradici¨®n representada por los biombos decorados con animales y monstruos mitol¨®gicos, y la contemporaneidad de las escenas orgi¨¢sticas en primer plano.

Iconograf¨ªa er¨®tica

La relectura en clave femenina de la iconograf¨ªa er¨®tica otorga un especial atrevimiento, e incluso un refrescante descaro, tanto a las grandes pinturas, que incluyen sutiles homenajes al arte del periodo Edo, como a las delicadas acuarelas, inspiradas en la tradici¨®n de las shunga (im¨¢genes de primavera), que retrataban escenas abiertamente sexuales. Felaciones trazadas con la elegancia y delicadeza de la miniatura antigua, vistas nocturnas de Tokio e instant¨¢nea del desasosiego juvenil, representadas por muchachitas de ojos inocentes a punto de tomarse una anfetamina o destrozando un coche a golpe de garrote, componen un fresco in¨¦dito de la sociedad japonesa, alejado del t¨®pico ex¨®tico.

El rasgo infantil, la pasi¨®n por los c¨®mics y la visi¨®n on¨ªrica y fant¨¢stica de la realidad caracterizan tambi¨¦n las dem¨¢s exposiciones del ciclo, del que es comisaria H¨¦l¨¨ne Kelmachter, agregada cultural de la Embajada de Francia en Jap¨®n y ex conservadora de la Fundaci¨®n Cartier de Par¨ªs. La segunda cita con el arte joven nip¨®n ser¨¢ el 25 de noviembre con la presentaci¨®n de los autorretratos de Erina Matsui. El ciclo continuar¨¢ con las pinturas psicod¨¦licas de Chiho Aoshima y las fotograf¨ªas de Tomoko Sawada, y concluir¨¢ con las esculturas de Kowei Nawa, el ¨²nico hombre de la selecci¨®n.