"Espa?a debe apoyar a Latinoam¨¦rica para que salga adelante"
Un 40% de la poblaci¨®n, por debajo del umbral de la pobreza. El 18%, por debajo de la extrema pobreza. 34 millones de analfabetos. Menos del 20% con acceso a la Universidad. ?ste es el panorama de los pa¨ªses latinoamericanos que dibuja ?lvaro Marchesi (Madrid, 1947), el nuevo secretario general, desde este a?o, de la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (OEI), formada por los gobiernos de 22 pa¨ªses latinoamericanos, Espa?a y Portugal. Despu¨¦s de toda una vida profesional dedicada a la educaci¨®n (ha ocupado distintos cargos de responsabilidad en el Ministerio de Educaci¨®n entre 1984 y 1996), Marchesi afronta desde su actual cargo la tarea de intentar reducir las "enormes desigualdades educativas" de la regi¨®n, "expresi¨®n de la profunda desigualdad social" en un contexto, muchas veces, de debilidad institucional.
"El primer objetivo es que todos los ciudadanos iberoamericanos sean en 2015 alfabetos del siglo XXI, que es m¨¢s que saber leer y escribir"
"La educaci¨®n espa?ola puede llegar en 10 a?os a un puesto intermedio de los pa¨ªses desarrollados; ahora est¨¢ en una inestable posici¨®n final"
Los ministros de Educaci¨®n de los 22 pa¨ªses miembros fijaron este verano en Valpara¨ªso (Chile) un programa de actuaci¨®n para los pr¨®ximos a?os que este mi¨¦rcoles se abordar¨¢ en la Casa de Am¨¦rica, en Madrid, en el umbral de los bicentenarios de las independencias de Am¨¦rica Latina. En el debate participar¨¢n, entre otros, el ex presidente del Gobierno Felipe Gonz¨¢lez y el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias.
La universalizaci¨®n de la educaci¨®n b¨¢sica, acabar con el analfabetismo, educar a las nuevas generaciones en valores democr¨¢ticos, impulsar una m¨¢s que d¨¦bil formaci¨®n profesional y crear un centro de posgrados de la OEI son esas prioridades. Y en ese camino, "la responsabilidad de las instituciones p¨²blicas y privadas espa?olas es enorme", asegura Marchesi.
Pregunta. ?A qu¨¦ cree que les obliga esa responsabilidad?
Respuesta. A asumir la tarea de reducir esas desigualdades, de apoyar a los pa¨ªses para que salgan adelante. Ya se ha hecho mucho, tenemos muchos acuerdos con empresas espa?olas y el Gobierno ha hecho un gran esfuerzo en la ¨²ltima legislatura, pero yo pondr¨ªa el acento en lo que falta.
P. ?Cu¨¢l es la prioridad ahora?
R. La universalizaci¨®n de la educaci¨®n b¨¢sica, que todos los ciudadanos iberoamericanos sean alfabetos del siglo XXI, que es m¨¢s que saber leer y escribir, en 2015. Ah¨ª pueden aportar much¨ªsimo los municipios espa?oles. Por ejemplo, que uno, dos, tres, cuatro municipios, los que sean, se comprometan a financiar los programas de alfabetizaci¨®n de otros municipios latinoamericanos hermanados a trav¨¦s de la OEI. Ya hay algunos que han empezado a hacerlo. Tambi¨¦n es fundamental que los sistemas educativos sean capaces de atraer a los chavales y que no se vayan. Y para eso tienes que extender la cobertura y convencer a las familias de que merece la pena mantener a sus hijos en la escuela en lugar de ponerles a trabajar, por ejemplo, con programas en los que se paga a las familias.
P. ?Hay suficientes recursos para alcanzar estos objetivos?
R. Los pa¨ªses son al final los responsables de los sistemas.
Nuestro papel es colaborar, apoyar, asesorar, diseminar buenas pr¨¢cticas, y buscar fondos cuando es necesario. Unos pa¨ªses son pobres y sus recursos son pocos (Honduras, Nicaragua). Otros dedican m¨¢s recursos, pero la poblaci¨®n escolar es enorme, como Brasil. En el campo de la alfabetizaci¨®n, hay dos pa¨ªses, aparte de Espa?a, que est¨¢n aportando mucho a los dem¨¢s: Cuba y Venezuela. Creo que es justo reconocerlo, sin entrar en otros temas.
P. Es cierto que no hay una, sino muchas latinoam¨¦ricas.
R. Pero las enormes desigualdades cortan pr¨¢cticamente a todos los pa¨ªses. Es cierto que unos son m¨¢s ricos que otros, pero, por ejemplo, Brasil es el pa¨ªs m¨¢s desigual de toda Latinoam¨¦rica.
P. Han puesto en segundo lugar de las prioridades la educaci¨®n en valores democr¨¢ticos, ?por qu¨¦?
R. La educaci¨®n en valores democr¨¢ticos, de respeto a los derechos humanos, el rechazo de la violencia, crear entornos pac¨ªficos... Esto en Latinoam¨¦rica es una necesidad imperiosa. Lo queremos hacer creando una red de escuelas democr¨¢ticas, a trav¨¦s de arte y la cultura -recuperando para la escuela todas las culturas- y a trav¨¦s de deporte.
P. ?Del deporte?
R. Tenemos un proyecto para mejorar la convivencia y los valores a trav¨¦s del deporte. El F¨²tbol Club Barcelona ha elaborado v¨ªdeos y actividades y vamos a invitar a miles de escuelas a que los utilicen. En mayo del a?o que viene convocaremos un concurso en los que parejas mixtas tienen que hacer un trabajo escolar sobre deporte y valores. Los ganadores viajar¨¢n a Espa?a.
P. La transmisi¨®n de valores a trav¨¦s de la nueva materia de Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa ha sido muy pol¨¦mica en Espa?a. ?Qu¨¦ valores debe transmitir la escuela?
R. Hay que aceptar que es un tema controvertido, porque aunque estemos todos de acuerdo en que debemos ense?ar los valores democr¨¢ticos, constitucionales y los derechos humanos, en su concreci¨®n hay distintas ideolog¨ªas. La formulaci¨®n gen¨¦rica de los derechos humanos, del funcionamiento democr¨¢tico y el respeto a las opiniones de los otros y a la ley ser¨ªan las cuestiones irrenunciables. Y luego, la escuela debe fomentar la reflexi¨®n cr¨ªtica, tanto de los valores laicos como de los valores religiosos para que el alumno construya los que considere m¨¢s oportunos. Es un tema que tenemos en la cabeza; algunos pa¨ªses latinoamericanos han solicitado a la OEI que les preparemos un curr¨ªculo de una materia de ciudadan¨ªa.
P. ?C¨®mo ve ahora, desde la perspectiva internacional, la educaci¨®n espa?ola?
R. Compar¨¢ndola con Latinoam¨¦rica, excelente. Pero compar¨¢ndola con Europa estamos recuperando el tiempo perdido. La mayor¨ªa de los pa¨ªses han conseguido en 30 a?os la extensi¨®n a los 16 a?os de la educaci¨®n obligatoria y la integraci¨®n de los inmigrantes. Espa?a lo est¨¢ haciendo en 10. Se part¨ªa de una situaci¨®n muy lamentable a finales de los a?os setenta, entonces hab¨ªa un abismo con Europa, est¨¢bamos en dos categor¨ªas distintas. Ahora ya estamos con todos, aunque sea al final. Ha sido cansado, ha abatido a muchos, pero si mantenemos este esfuerzo, dentro de 10 a?os podremos situarnos en un c¨®modo lugar intermedio dentro de los pa¨ªses desarrollados; ahora estamos en una inestable posici¨®n final. Lo que me preocupa es que pase a un segundo plano.
P. Pero quiz¨¢ hay un poco de frustraci¨®n porque en otros factores, como el econ¨®mico, hemos avanzado mucho m¨¢s r¨¢pido.
R. Los cambios en educaci¨®n necesitan 30 a?os. Y llevamos 17 desde que se aument¨® la edad de escolarizaci¨®n hasta los 16 con la LOGSE.
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