"?ste es el premio m¨¢s 'glamouroso"

"Me acabo de enterar ahora mismo", dijo Doris Lessing ayer por la tarde, reci¨¦n conseguido el Premio Nobel de Literatura, que la Academia Sueca le concedi¨® "por su ¨¦pica narrativa de la experiencia femenina, que con escepticismo, pasi¨®n y poder visionario, ha sometido a examen a una civilizaci¨®n desunida". "Hab¨ªa llevado a mi hijo al hospital y no me enter¨¦ hasta que vi a los fot¨®grafos. Al principio pens¨¦ que estaban grabando alg¨²n culebr¨®n en la calle". Vestida con falda vaquera y chaleco guateado y con un vaso de agua en la mano, la escritora brit¨¢nica sali¨® a recibir a la prensa y a las personas que se acercaron a la puerta de su casa en West Hampstead, al noroeste de Londres.

"Ustedes, en lugar de hacer tantas preguntas deber¨ªan haber tra¨ªdo algo de champ¨¢n"

"Que me telefoneara Garc¨ªa M¨¢rquez es algo maravilloso porque le admiro"

"Estoy encantada. Pero no sorprendida. Llevo escuch¨¢ndolo unos cuarenta a?os y no te puedes sorprender a?o tras a?o", dijo. Su nombre ha entrado en las quinielas como potencial ganadora en innumerables ocasiones. Y ahora, a los 87, se ha convertido en la ganadora del Premio Nobel de Literatura de m¨¢s edad. Con buen humor y una vitalidad extraordinaria, tuvo tiempo de rega?ar a la prensa. "?C¨®mo lo voy a estar celebrando con champ¨¢n? No me ha dado ni tiempo a comprarlo. Ustedes, en lugar de venir aqu¨ª y hacer tantas preguntas, deber¨ªan haber tra¨ªdo una botella. En alg¨²n momento tendr¨¦ que ponerme a brindar", contest¨® cuando se le pregunt¨® c¨®mo lo estaba celebrando. Lessing revel¨® que "un mensajero" relacionado con los Nobel le avis¨® de que nunca ganar¨ªa el premio. "Me dijo que no les gustaba y que nunca lo conseguir¨ªa. Deben haber cambiado de opini¨®n". "Yo creo que me lo han dado porque ya estoy muy mayor". "He ganado muchos premios, en toda Europa". "?ste es el galard¨®n m¨¢s glamouroso, todo el mundo lo conoce, pero no quiere decir que sea el mejor".

La Academia Sueca la describi¨® como una autora que retrata "la ¨¦pica de la experiencia femenina". "No s¨¦ a lo que se refieren con eso, los hombres y las mujeres no son tan diferentes", dijo ce?uda.

La autora, nacida en Persia (actual Ir¨¢n) en 1919 y criada en Rodesia (actual Zimbabue), abandon¨® el colegio con 14 a?os. Con 31, dej¨® atr¨¢s dos hijos y dos ex maridos y aterriz¨® en Londres con un hijo y la firme voluntad de convertirse en escritora. Durante sus m¨¢s de cincuenta a?os de trayectoria profesional ha mantenido su compromiso pol¨ªtico y su defensa de las libertades. Critic¨® abiertamente los reg¨ªmenes segregacionistas de Rodesia y Sur¨¢frica y fue miembro del Partido Comunista brit¨¢nico, que abandon¨® desencantada. Su libro El cuaderno dorado fue clave en el movimiento feminista durante la d¨¦cada de los sesenta, pero recientemente ha realizado declaraciones en contra del feminismo radical que libra una batalla frontal con los hombres. Lessing afirma que sigue escribiendo.

Por ahora, lo que m¨¢s ilusi¨®n le ha hecho a Doris Lessing en medio de la vor¨¢gine que implica haber ganado el Nobel ha sido la llamada de tel¨¦fono de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez para darle la enhorabuena. "Para m¨ª es algo maravilloso, porque se trata de un escritor magn¨ªfico al que admiro profundamente", declar¨® con una enorme sonrisa. Acto seguido entr¨® en su casa para seguir recibiendo llamadas. Se despidi¨® haciendo un brindis con su vaso de agua. "Es ginebra", brome¨®.

Lessing ha vivido en la misma calle de casas de ladrillo durante 25 a?os. Y siempre ha tomado parte activa en la vida del barrio. En ocasiones se sienta a escribir en uno de los caf¨¦s de la zona, donde ambient¨® uno de sus cuentos de Historias de Londres. Ha colaborado con la biblioteca y es cliente de West End Lane Books, la librer¨ªa del barrio. "Es una mujer con mucho carisma. Ahora la veo menos porque creo que tiene la espalda mal, pero ven¨ªa a leer a la librer¨ªa, que se llenaba hasta los topes. Y tambi¨¦n formaba parte de un club literario: hasta coment¨® con los otros miembros fragmentos de El cuaderno dorado", contaba Jane May, empleada de la librer¨ªa. En West End Lane Books tambi¨¦n encarga la escritora sus lecturas y aunque en el establecimiento son reticentes a desvelar los t¨ªtulos de sus lecturas para mantener la intimidad de su cliente, s¨ª confirman que Lessing "lee mucho y variado y est¨¢ a la ¨²ltima. Lee obras de nuevos escritores europeos y gran cantidad de libros de no ficci¨®n".