Los da?os de la inundaci¨®n se agravan por el urbanismo salvaje

Coches flotando como simples mecanos en medio de barrancos colmados de agua o enseres dom¨¦sticos a lomos del desatado caudal del Girona en las inmediaciones de la playa de Les Marines, en D¨¦nia, revelan que la ordenaci¨®n del territorio y el desarrollo urban¨ªstico en la Comunidad Valenciana han dado la espalda en las ¨²ltimas d¨¦cadas a la l¨®gica de la naturaleza.

La proliferaci¨®n de urbanizaciones en la desembocadura del Girona o en los cauces de los barrancos que atraviesan el municipio de Calp ha engordado la lista de p¨¦rdidas materiales, que en el caso de la ¨²ltima localidad y s¨®lo en el apartado del parque m¨®vil se eleva a nada menos que 1.200 unidades da?adas. Calp es uno de muchos pueblos del litoral valenciano con las laderas de sus montes y barrancos poblados por decenas de urbanizaciones.

Los coches arrastrados por el agua delatan la edificaci¨®n en los cauces de r¨ªos y barrancos

La parte baja de esta poblaci¨®n era la ma?ana del viernes una enorme balsa en la que se acumul¨® el cauce desbocado de los barrancos. Todav¨ªa ayer hab¨ªa gran cantidad de agua embalsada en su playa. Para evitar males mayores, el Ayuntamiento no tuvo m¨¢s remedio que tirar el muro del paseo mar¨ªtimo para aligerar la evacuaci¨®n mar adentro.

El urbanismo salvaje y su empe?o por no dejar a salvo ni un cent¨ªmetro cuadrado del litoral tambi¨¦n ha sido clave en los apuros en que puso la riada a un centenar de vecinos de las urbanizaciones de Les Marines, acosados por una inundaci¨®n que oblig¨® al r¨¢pido despliegue de los equipos de emergencias para su rescate.

En el caso de los municipios afectados por el desbordamiento del Girona, a la construcci¨®n de viviendas pr¨¢cticamente junto al cauce del r¨ªo se suma la pol¨¦mica sobre su adecuada limpieza. Este r¨ªo, seco en verano y con un caudal de apenas medio metro en su curso central en invierno, se desbord¨® a causa de la intensa lluvia registrada en la cabecera (cerca de 400 litros por metro cuadrados en apenas unas horas). La riada baj¨® sin aparentes problemas hasta que se top¨® con los puentes de El Verger y Els Poblets. Los vecinos responsabilizan al ca?izo que cubre el cauce del taponamiento de los ojos de los puentes, extremo que habr¨ªa acentuado la inundaci¨®n. La Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del J¨²car rechaza la denuncia.

A pesar de que cada a?o, la lluvia torrencial, inherente a la geograf¨ªa valenciana, pone en evidencia el desarrollo urban¨ªstico en este ¨¢mbito territorial, se mantienen nuevos proyectos ubicados en zonas potencialmente inundables. Como ejemplos de estas nuevas iniciativas urban¨ªsticas se encuentra el PAI previsto en el r¨ªo Algar, en Altea, o una urbanizaci¨®n en San Miguel de Salinas que ocupa parcialmente una rambla.