La due?a de una casa se niega a venderla a una familia gitana por la presi¨®n vecinal
S¨®lo los inquilinos de dos de las 11 chabolas de Poio han encontrado nuevo techo
La familia de Jaime Jim¨¦nez que, por el momento, reside en el asentamiento gitano de O Vao (Poio), no podr¨¢ adquirir la vivienda sobre la que hab¨ªan presentado ya una opci¨®n de compra en el lugar de Vilarch¨¢ns, en el municipio de Pontecaldelas. Ayer mismo, el abogado que representa a la familia Jim¨¦nez, Fernando Romay, afirm¨® que la propietaria "ya no se la quiere vender", despu¨¦s de que ella misma reconociese sentirse abrumada por la expectaci¨®n levantada. Los 130 vecinos de Vilardech¨¢ns est¨¢n dispuestos a pagar a escote los 240.000 euros que cuesta la vivienda.
Los vecinos sostienen que no act¨²an por racismo sino para impedir que se instale en su pueblo "nuevo O Vao", con todos los conflictos derivados del tr¨¢fico de drogas que han jalonado la historia del poblado de Poio. El alcalde de Pontecaldelas, el popular Perfecto Rodr¨ªguez, prefiere mantenerse al margen de la pol¨¦mica pero afirma "comprender" los temores de sus vecinos.
El proceso de realojo de las nueve familias de O Vao (Poio) que el d¨ªa 31 de octubre perder¨¢n sus chabolas, sobre las que pesa una orden de derribo, se complica por momentos. El alcalde de Poio, el nacionalista Luciano Sobral, se reuni¨® ayer con algunos de los gitanos afectados para poner sobre la mesa dos nuevas ofertas de compra, dentro de la propia comarca, que ahora estudiar¨¢n los interesados, todav¨ªa alterados por el rechazo en bloque de los vecinos de Vilarch¨¢ns. El regidor reconoce que los gitanos se sienten "indefensos y enfadados" y confiesa que la tensi¨®n de los ¨²ltimos d¨ªas no ayuda a encontrar una salida.
En tanto la empresa de demolici¨®n "ya est¨¢ avisada", si llegado el d¨ªa los afectados no tienen un techo, el gobierno local dar¨¢ parte a la Audiencia Provincial "para que sea el juez quien decida", al entender que quedar¨ªan en situaci¨®n de "desamparo". Este pol¨¦mico suceso destapa una realidad que trae de cabeza al alcalde de Poio, y es la imposibilidad de realojar a los perjudicados que, acaso "m¨¢s por miedo que por racismo", dice Sobral, no son admitidos en r¨¦gimen de alquiler y disponen de escasas opciones de compra. De los once expedientes abiertos, s¨®lo dos familias chabolistas han conseguido, tras meses de b¨²squeda, un domicilio alternativo.
A pesar de la insistencia de los vecinos de Vilarch¨¢ns en desvincular su decisi¨®n de cualquier contenido racista, las asociaciones que engloban al colectivo gitano de Galicia no han tardado en reprobar su postura. As¨ª, la Asociaci¨®n Pueblo Gitano de Galicia, a trav¨¦s de su presidente, Sina¨ª Jim¨¦nez, ha manifestado su decisi¨®n de denunciar los hechos ante el Valedor do Pobo y solicitar entrevistas con el presidente y el vicepresidente de la Xunta a fin de que "se proteja al pueblo gitano de estos ataques racistas". Jim¨¦nez recalc¨® que "se trata de una familia trabajadora y honrada" y matiz¨® que los temores en Vilarch¨¢n se basan en datos "falsos, racistas y discriminatorios". "Est¨¢n acusando a una familia sin conocerla", asever¨®. "Yo los conozco y son gente trabajadora y humilde que se dedica a las ferias y a la chatarra". Esta asociaci¨®n est¨¢ estudiando plantear una denuncia por v¨ªa judicial contra los vecinos de Vilarch¨¢ns por entender que se ha vulnerado la Constituci¨®n.
El rechazo a la familia Jim¨¦nez ha causado "rabia, dolor e impotencia" en los afectados, seg¨²n Santiago Gonz¨¢lez, presidente de la Fundaci¨®n Secretariado Gitano,.ya que "ellos hacen un esfuerzo importante al partir de una situaci¨®n de desventaja".
Por su parte, la conselleira de Vivenda, Teresa T¨¢boas, descarg¨® en el Ayuntamiento de Poio la responsabilidad de dar "una respuesta" al "problema" de O Vao. No obstante, T¨¢boas se?al¨® que su departamento "estar¨¢ ah¨ª para todo lo que le compete", entre lo que se incluyen subvenciones de hasta el 20% en la compra de vivienda con precios inferiores a 120.000 euros.
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