Los barceloneses se hacen a la idea de que los desplazamientos son m¨¢s largos
Segundo d¨ªa con dificultades de circulaci¨®n en Barcelona, en especial en su frente sur, donde siguen cortadas tres l¨ªneas de Cercan¨ªas y una de Ferrocarrils de la Generalitat. El n¨²mero de pasajeros creci¨® ayer respecto al primer d¨ªa, al comprobar ¨¦stos que, mal que bien, al final llegan al destino. Eso s¨ª, con m¨¢s tiempo del que empleaban habitualmente. La gratuidad del servicio es otro aliciente para arriesgarse al combinado de tren y autob¨²s.
El primer d¨ªa utilizaron el servicio combinado 86.262 personas, lo que supuso una p¨¦rdida de usuarios del 16%. Ayer, la mitad de los desertores volvieron al tren. ?Satisfechos? No mucho. Juan Carlos A. vive en Sitges. Cuando las cosas iban regular su tiempo medio para llegar al trabajo en Barcelona era de unos 35 minutos. Ayer necesit¨® hora y media. Tuvo que subir al tren en Sitges, bajar en Gav¨¤, subir al autob¨²s tras hacer una cola de unos 10 minutos, bajar en Reina Cristina y dirigirse hacia el metro para llegar al centro de Barcelona, donde trabaja.
El trayecto del autob¨²s no fue sencillo. Tard¨® m¨¢s de 20 minutos en poder incorporarse a la autopista que iba llena. Luego, a unos 500 metros de Barcelona, vio como se desviaba. No lo entend¨ªa, porque el destino estaba cerca, en l¨ªnea recta y con un carril segregado para autobuses que, adem¨¢s, es de los que se respeta. Pero el comit¨¦ de emergencia decidi¨® el s¨¢bado que era mejor dirigir todos los autocares por otra ruta, que cruza una zona industrial, otra residencial, se encarama a la monta?a de Montju?c y, al final, llega al mismo sitio. "De momento, no llueve, pero cuando lo haga, esto ser¨¢ un suplicio", comentaba.
Sonrisa y des¨¢nimo
Los directivos de Renfe explicaron ayer los esfuerzos que hacen por ofrecer un servicio lo m¨¢s parecido posible a la normalidad con una sonrisa forzada que no ocultaba el des¨¢nimo. Por dos motivos: muchos empleados se est¨¢n esforzando para minimizar los efectos del corte de Cercan¨ªas, pero los resultados est¨¢n muy lejos de lo que quisieran ofrecer.
La segunda raz¨®n para el des¨¢nimo es que Renfe es el payaso de las bofetadas. Recoge todas las que se pierden incluso cuando no son para la empresa. Renfe s¨®lo mueve trenes y la mayor¨ªa de percances se han producido en v¨ªas o sistema de se?ales. Pero la gente lo que ve es el tren que llega tarde, que no da servicio. "Tratamos de garantizar el derecho a desplazarse", afirmaba un dirigente de Renfe, reconociendo que los pasajeros necesitan m¨¢s tiempo para el mismo recorrido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Cercan¨ªas
- VIII Legislatura Espa?a
- Ministerio de Fomento
- Obras municipales
- Barcelona
- Ayuntamientos
- Legislaturas pol¨ªticas
- Catalu?a
- Transporte urbano
- Trenes
- Ministerios
- Administraci¨®n local
- PSOE
- Gobierno
- Transporte ferroviario
- Partidos pol¨ªticos
- Espa?a
- Administraci¨®n Estado
- Urbanismo
- Pol¨ªtica
- Transporte
- Administraci¨®n p¨²blica