Barcel¨®, por sus coleccionistas

"Del Barcel¨® pintor hay etapas que me gustan m¨¢s, como la de los lienzos blancos, y otras menos, pero el papel me gusta todo, lo encuentro m¨¢s vivo y espont¨¢neo, sobre todo las obras de Mal¨ª". Lo afirma el industrial Angel Surroca, uno de los grandes coleccionistas barceloneses de Miquel Barcel¨®, rodeado de las gouaches que ha prestado a la Fundaci¨®n Godia para la ¨²ltima exposici¨®n antes de trasladarse en la nueva sede. Barcel¨® en las colecciones privadas de Barcelona, abierta hasta el 5 de enero, re¨²ne 46 obras, algunas muy conocidas y otras que no se hab¨ªan vuelto a exponer en p¨²blico.

"?ltimamente cuesta ver obra nueva. Entiendo su evoluci¨®n hacia las obras monumentales, pero le ha distanciado de los coleccionistas. Me gustar¨ªa comprar m¨¢s, me encantan las figuras con colorido y las esculturas de su primera ¨¦poca y no tengo ninguna. Los precios son desorbitados y no hay exposiciones en galer¨ªas espa?olas", asegura Surroca, quien lamenta tambi¨¦n el insuficiente apoyo fiscal al coleccionismo privado. Este apoyo lo reivindican los empresarios Luisa y F¨¦lix Revuelta: "Estamos aqu¨ª para apoyar a Liliana Godia y su esfuerzo", afirman los coleccionistas, que han prestado uno de los tres barcel¨®s que poseen, Fulles de bleda, que les cautiv¨® "por sus colores, su luz y un patr¨®n que se sale de su registro habitual".

Con sus 27 a?os, Jos¨¦ Mestre debe de ser uno de los m¨¢s j¨®venes coleccionistas de Barcel¨®. Posee seis piezas de gran formato, todas autorretratos. "Es la forma de expresi¨®n m¨¢s valiosa y representativa cuando el artista se hace famoso, aun m¨¢s de lo que ya es, le falta penetrar en el mercado americano", sostiene el joven, delante de los dos lienzos que ha cedido para la exhibici¨®n. En cambio, es una cer¨¢mica peque?a, de forma especialmente curiosa la de Ernest Vent¨®s, experto en aromas y una de las narices m¨¢s c¨¦lebres de Espa?a, quien colecciona exclusivamente obras que le evocan recuerdos e im¨¢genes olfativas.

"Le conoc¨ª en 1998 cuando preparaba la exposici¨®n en el Macba. ?l buscaba una virgen rom¨¢nica para su colecci¨®n; enseguida sintonizamos y desde entonces intercambiamos cuadros por antig¨¹edades", explica el anticuario Arturo Ram¨®n, quien participa con un lienzo blanco, una cer¨¢mica y un papel de termitas. Su relaci¨®n es de amistad, nunca ha querido ser su galerista. "El mercado espa?ol lo apoya mucho, pero se le ve menos desde que perdi¨® a Salvador Riera, su galerista de referencia", explica.

No es el ¨²nico galerista-coleccionista que participa en la selecci¨®n realizada por Enrique Juncosa. Tambi¨¦n est¨¢n Antoni Estrany y ?ngels de la Mota, Marc Dom¨¨nech, de la Galer¨ªa Oriol, y Manel Mayoral.