Sarkozy y Bush sellan su alianza

En una visita que marca el reencuentro entre dos naciones claves para la fortaleza de Occidente, el presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy, hizo ayer en Washington profesi¨®n de amistad con Estados Unidos y se comprometi¨® a mantenerse inmutable al lado de este pa¨ªs en su guerra contra el terrorismo. "Am¨¦rica puede contar con Francia", dijo Sarkozy ante una sesi¨®n conjunta del Congreso norteamericano en la que el invitado fue aclamado en incontables ocasiones.

Sin mencionar nunca a Irak, ni para bien ni para mal, Nicolas Sarkozy asegur¨® que Francia "seguir¨¢ en Afganist¨¢n todo el tiempo que sea necesario" y advirti¨® de que "la perspectiva de un Ir¨¢n con armas nucleares es inaceptable". "Hoy como en el pasado", manifest¨®, "tenemos que luchar juntos para defender y promover los valores y los ideales de libertad y democracia. La derrota no es una opci¨®n, el terrorismo no triunfar¨¢".

El discurso del dirigente franc¨¦s en el Congreso fue muy aplaudido

Bush se esforz¨® en dejar clara la calurosa relaci¨®n de los dos pa¨ªses

"Quiero reconquistar el coraz¨®n de los estadounidenses", afirm¨® Sarkozy

Posteriormente, en una conferencia de prensa conjunta, el presidente estadounidense George Bush reconoci¨® algunas diferencias sobre Irak, pero asegur¨® que ambos pa¨ªses comparten su preocupaci¨®n "por la libertad de los iraqu¨ªes". Sarkozy precis¨® que su Gobierno "quiere un Irak unido". Respecto a Ir¨¢n, los dos presidentes estuvieron de acuerdo, seg¨²n Bush, en "trabajar juntos para conseguir una soluci¨®n diplom¨¢tica" al riesgo de proliferaci¨®n nuclear, aunque Sarkozy a?adi¨® que no ten¨ªan objeci¨®n al uso civil de la energ¨ªa nuclear por parte de Ir¨¢n.

Pero el momento m¨¢s emotivo de toda la visita fue cuando Sarkozy confes¨® ante un Congreso puesto en pie: "Cada vez que un soldado americano cae en alg¨²n lugar del mundo, yo pienso en lo que el Ej¨¦rcito americano hizo por Francia y me entristezco como se entristece uno cuando pierde a un miembro de su propia familia".

El presidente franc¨¦s reconoci¨® y elogi¨® en su discurso el papel que Estados Unidos cumple como gran potencia mundial. Record¨®, sin embargo, que ese papel conlleva obligaciones.

Entre ¨¦stas, mencion¨® la necesidad de "denunciar los excesos y abusos del capitalismo financiero" y, especialmente, reclam¨® que "Am¨¦rica est¨¦ junto a Europa en el liderazgo de la lucha contra el calentamiento global que amenaza con la destrucci¨®n de nuestro planeta". "Esta batalla esencial por el futuro de la Humanidad tienen que ser tambi¨¦n una batalla de Am¨¦rica", insisti¨® Sarkozy, que siempre se refiri¨® a este pa¨ªs por su denominaci¨®n m¨¢s afectuosa, "Am¨¦rica", en lugar del m¨¢s fr¨ªo y formal "Estados Unidos".

En un viaje de apenas 24 horas -su primero oficial a Washington- Sarkozy ha abierto un nuevo cap¨ªtulo en la diplomacia francesa. Hace once a?os, cuando Jacques Chirac habl¨® en el Capitolio, su intervenci¨®n fue boicoteada por varios congresistas que protestaban por las pruebas nucleares francesas en Mururoa. Despu¨¦s del 11-S, Chirac encabez¨® el movimiento de protesta europea por la invasi¨®n estadounidense de Irak, culminando un enfriamiento entre los dos pa¨ªses que se ha prolongado hasta la llegada de Sarkozy al Eliseo. Ayer, tanto Sarkozy como George Bush se esforzaron por dejar claro que ese enfriamiento ha dado paso a una calurosa relaci¨®n en la que, sin ignorar las diferencias, los dos Gobiernos est¨¢n interesados en resaltar las coincidencias.

Tras la sesi¨®n del Congreso, Bush y Sarkozy recorrieron juntos la casa de George Washington, el primer presidente de Estados Unidos, en Mount Vernon (Virginia), se entrevistaron y comieron all¨ª hasta bien entrada la tarde. Pocas veces pasa Bush tanto tiempo junto a un l¨ªder extranjero. Y pocas veces rompe su estricta costumbre de retirarse a los ocho de la noche para agasajar a un invitado con una cena oficial, como hizo el martes con Sarkozy.

"Quiero reconquistar el coraz¨®n de los estadounidenses", dijo Sarkozy en los brindis. Bush destac¨® que ambos Gobiernos coinciden en sus pol¨ªticas respecto a L¨ªbano, Darfur o Birmania, y que est¨¢n "de acuerdo en que la reconciliaci¨®n y la democracia en Irak son vitales para el futuro de Oriente Pr¨®ximo".