Luisillo, bailaor y empresario flamenco
Comenz¨® como boxeador y luego se pas¨® a la danza
Falleci¨® ayer en Madrid, despu¨¦s de una larga enfermedad, Luis P¨¦rez D¨¢vila Luisillo. Hab¨ªa nacido en M¨¦xico en 1928, en una familia en la que no hab¨ªa antecedentes de baile, aunque ¨¦l de ni?o estudiaba danza cl¨¢sica. En 1941 quiso el azar que Carmen Amaya se exhibiera con su espect¨¢culo en el teatro F¨¢bregas, y Luisillo acudi¨® a verla. Qued¨® completamente deslumbrado. "Me impresion¨®", declar¨® a quien firma estas l¨ªneas. "Nosotros ¨¦ramos gente muy, muy pobre, y pude ir a ver a Carmen Amaya porque me invit¨® una amiga de madre".
Tuvo que hacerse boxeador para poder salir adelante. "El hermano de Roberto Xim¨¦nez era boxeador, y yo me acuerdo que ¨¦l nos llevaba a los chavales peque?os a un gimnasio a que nos pegaran y la gente nos daba monedas, ?no?, nos tiraban monedas... Entonces fue cuando me pusieron Luisillo".
No pas¨® nada en aquel primer conocimiento de Carmen Amaya, ni siquiera puedo hablar con ella aunque lo intent¨®. "Entonces empec¨¦ yo a bailar y me sali¨® una cosa para bailar en un cabaret muy famoso en M¨¦xico que se llamaba El Patio, y vino el due?o de La Habana Madrid de Nueva York, y me llev¨® a Nueva York. Enfrente hab¨ªa otro cabaret que se llamaba La Conga, y ah¨ª trabajaba Carmen Amaya. Fue cuando nos conocimos en realidad, y a poco ella regres¨® a Espa?a y me ofreci¨® venir con ella. Entonces yo bailaba con Teresa".
La experiencia de trabajar junto a Carmen le segu¨ªa pareciendo a Luisillo de importancia excepcional incluso en su vejez. Carmen Amaya era distinta a todo, y tambi¨¦n en su forma de dirigir. "Ella cog¨ªa a la gente, a ver Luis, no s¨¦ qu¨¦, pues vamos a hacer esto, y haces esto... Improvisaba todo aquello que pon¨ªa, y quiz¨¢ por eso ten¨ªa un gran m¨¦rito sobre los que aprend¨ªamos, porque ten¨ªamos que coger aquello, aquello que estaba poniendo, y que no era f¨¢cil... Ella fue ¨²nica, especial en todo".
Cuando Teresa y Luisillo dejaron de bailar con Carmen Amaya formaron su propia compa?¨ªa de baile, con la que durante varios a?os recorrieron el mundo y tuvieron ¨¦xito. De esa ¨¦poca son algunos de sus t¨ªtulos m¨¢s celebrados: En el parque de Mar¨ªa Luisa (Sinfon¨ªa sevillana), con m¨²sica de Turina; Luna de sangre, sobre un poema de Garc¨ªa Lorca; El prisionero y la rosa, con cante y guitarra; Caf¨¦ Flamenco, tambi¨¦n con n¨²meros exclusivamente jondos.
En 1956, Luisillo y Teresa se separan. ?l reorganiz¨® su compa?¨ªa y fund¨® una academia de baile, las dos de larga existencia, en las que hizo efectiva su teor¨ªa de bailar, o hacer bailar a sus artistas, temas que contaban una historia, con un argumento. ?l personalmente era un enfervorizado aficionado al baile por derecho como pod¨ªan hacerlo los viejos flamencos, pero ¨¦stos hab¨ªan ido desapareciendo hasta quedarse en casi reliquia. Descanse en paz el querido amigo.
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