"El asociacionismo no est¨¢ re?ido con la disciplina militar"

Bajo el lema de "Gracias, Jorge", la Asociaci¨®n Unificada de Militares Espa?oles (AUME) ha convocado para hoy la primera concentraci¨®n de militares en la reciente historia democr¨¢tica de Espa?a. Se celebrar¨¢ ante la sede del Ministerio de Defensa y cuenta con el apoyo, entre otros, de la Asociaci¨®n Unificada de Guardias Civiles (AUGC), los sindicatos UGT y CC OO e Izquierda Unida. Las mismas organizaciones que respaldaron la concentraci¨®n de agentes de uniforme del pasado 20 de enero en la Plaza Mayor de Madrid, que provoc¨® una tempestad en el instituto armado y desbloque¨® la reforma del r¨¦gimen disciplinario y la aprobaci¨®n de la ley de derechos y deberes de los guardias.

El Jorge al que alude el lema de la concentraci¨®n, cuidadosamente elegido para eludir cualquier matiz de reivindicaci¨®n colectiva, prohibida para los militares, no es otro que el brigada Jorge Bravo, de 47 a?os, quien desde el pasado 17 de octubre cumple un arresto de 40 d¨ªas, el segundo en lo que va de a?o, precisamente por haber participado en la concentraci¨®n de guardias civiles de Madrid. Bravo no podr¨¢ asistir al acto de hoy, pues hasta ma?ana no recuperar¨¢ la libertad, pero EL PA?S ha charlado con ¨¦l en el centro disciplinario del Ej¨¦rcito de Tierra en la base de Colmenar Viejo (Madrid), donde est¨¢ recluido.

"Mi condici¨®n de presidente de la AUME tiene que ver con mis arrestos"

Pregunta. Se le acusa de haber participado en una manifestaci¨®n sindical haciendo uso de su condici¨®n de militar.

Respuesta. Yo particip¨¦ en una concentraci¨®n de guardias, autorizada por la Delegaci¨®n del Gobierno, y en ning¨²n momento hice uso de mi condici¨®n de militar: acud¨ª de paisano, como presidente de una asociaci¨®n que es legal y est¨¢ inscrita en el registro del Ministerio del Interior.

P. Una asociaci¨®n que se dice de militares, lo que parece una contradicci¨®n en sus t¨¦rminos...

R. No veo por qu¨¦. El derecho de asociaci¨®n lo tienen todos los espa?oles, tambi¨¦n los militares.

P. Pero la Constituci¨®n limita los derechos de los militares...

R. El art¨ªculo 28 de la Constituci¨®n deja abierta la puerta para limitar o prohibir la sindicaci¨®n de los militares, pero no obliga a ello. En cualquier caso, no es lo mismo el derecho de sindicaci¨®n o de huelga que el derecho a asociarse por medios pac¨ªficos, en paz y libertad, como dec¨ªa la vicepresidenta Fern¨¢ndez de la Vega, lo que est¨¢ totalmente legitimado.

P. ?Qu¨¦ pueden aportar las asociaciones a los militares?

R. Pueden aportarnos lo que no tenemos: un cauce que nos permita abordar nuestros problemas sociales, retributivos e incluso profesionales.

P. ?No distorsionan las asociaciones la disciplina militar?

R. Algunos quieren hacernos creer que, si se ordena a una compa?¨ªa ir a combatir, har¨¢ una asamblea para decidir si cumple la orden o no, pero eso es una caricatura rid¨ªcula. El asociacionismo no est¨¢ re?ido para nada con la disciplina. Una cosa es la operatividad de las Fuerzas Armadas, el cumplimiento de la misi¨®n, y otra la atenci¨®n social a los militares y sus familias o los problemas derivados de las retribuciones. La prueba es que la mayor¨ªa de los Estados europeos reconocen el derecho de los militares a asociarse e incluso sindicarse, como evidencian los m¨¢s de 500.000 afiliados de 24 pa¨ªses que tiene la federaci¨®n Euromil, sin que la eficacia de sus ej¨¦rcitos se resienta. Al contrario.

P. El Gobierno alega que ya ha subido el sueldo a los militares.

R. Los ¨²ltimos aumentos han ido a complementos y, en el Ej¨¦rcito, ese dinero lo ha repartido una comisi¨®n que no es para nada representativa. Creemos que las asociaciones pueden contribuir a que ese reparto se haga de manera m¨¢s equitativa.

P. Los guardias civiles han conseguido una ley de Derechos y Deberes. ?Aspiran a lo mismo?

R. Lo que han conseguido los guardias civiles no es la soluci¨®n a sus problemas, sino el cauce para solucionarlos. Conseguir algo parecido nos ayudar¨ªa a abordar muchas de las preocupaciones de los militares.

P. ?Cu¨¢ntos miembros tiene actualmente la AUME?

R. Pasan ya de 2.000, la mayor¨ªa militares en activo. Es significativo que mis arrestos hayan coincidido con un notable aumento de los militares que se han asociado, bien por solidaridad o por ver que parte de lo que persigue el movimiento asociativo es tratar de erradicar algunas formas y contenidos.

P. ?Se siente perseguido?

R. Estoy convencido de que mi condici¨®n de presidente de la AUME tiene algo que ver con estos arrestos y que se est¨¢ persiguiendo cercenar el movimiento asociativo.

P. Cuando usted se hizo militar sab¨ªa que no pod¨ªa asociarse.

R. Cuando ingres¨¦ en el Ej¨¦rcito, en 1976, ni siquiera estaba en vigor la Constituci¨®n. Y eso no significa que debamos mantener las leyes que hab¨ªa entonces.