Magdalena ?lvarez sufre un nuevo 'martirio' en el Congreso

Segunda sesi¨®n del martirio de Magdalena ?lvarez en el Congreso. Ya sin el riesgo de la votaci¨®n apurada, liberada despu¨¦s de haber superado por tres votos su reprobaci¨®n, y con la obligaci¨®n de hablar y defenderse sola -el d¨ªa anterior no intervino en la tribuna-, la ministra de Fomento se despach¨® a gusto respondiendo uno tras otro a los seis ataques en forma de preguntas que el PP, ERC y EA desplegaron en la sesi¨®n de control.

El hemiciclo, con los bancos de visitantes a rebosar -incluida una delegaci¨®n de diputados mexicanos que asist¨ªa al espect¨¢culo con asombro- se incendi¨® varias veces.

El presidente, Manuel Mar¨ªn, de despedida, estuvo a punto de expulsar de nuevo a Vicente Mart¨ªnez Pujalte, diputado del PP. Al final revent¨® cuando Joan Tard¨¤, de ERC, en medio de un gran esc¨¢ndalo y hablando en catal¨¢n, aprovech¨® su intervenci¨®n para llamar a los catalanes a manifestarse el s¨¢bado: "Esto es el Parlamento del Estado, esto es la representaci¨®n de la soberan¨ªa popular que no se puede convertir en un pandemonium. Este presidente est¨¢ cansado, muy cansado, toda la legislatura, de decir lo mismo", salt¨® Mar¨ªn, con aire de desolaci¨®n.

Antes, a la ministra le hab¨ªan llamado chula, soberbia, nefasta, incompetente y tramposa. Pero sobre todo le hab¨ªan pedido de todas las formas posibles que dimita. "Le har¨ªa un favor a la democracia y a su presidente de Gobierno, si dimitiera por dignidad pol¨ªtica", le dijo Jorge Fern¨¢ndez (PP).

"V¨¢yase a su casa, se?or¨ªa, y deje de re¨ªrse de la paciencia, del civismo, de la dignidad de los catalanes que estamos hartos de su incompetencia y de sus errores. Estamos hartos de sus ofensas. Se?or¨ªa, v¨¢yase a su casa y h¨¢gase olvidar", le solt¨® en un tono dur¨ªsimo Dolors Nadal, tambi¨¦n del PP.

La ministra le contest¨® que eso se parece demasiado al famoso "v¨¢yase se?or Gonz¨¢lez", y en tono altivo pidi¨® un poco m¨¢s originalidad. Adem¨¢s, le devolvi¨® el rejonazo: "Ustedes deber¨ªan de calmarse un poquito. Un poquito de serenidad, controlar m¨¢s la situaci¨®n, no decir tantas tonter¨ªas y menos en un Congreso, respetar un poco a los ciudadanos".

A¨²n m¨¢s lejos fue Alejandro Ballesteros, otro diputado popular, que le acus¨® de obstaculizar investigaciones de accidentes y en tono despectivo le espet¨®: "Suspende las entrevistas cuando no le gustan las preguntas, va por el cuarto jefe de prensa y el tercero de gabinete, impide que las c¨¢maras graben el polvo de los vagones del AVE en su pat¨¦tico viaje a Valladolid... eso s¨ª, la culpa de todo es siempre de los dem¨¢s, y por eso antes part¨ªa que dobl¨¢".

?lvarez contest¨® a todos sin inmutarse, siempre con una sonrisa y al contraataque. Nada m¨¢s empezar, ya se not¨® que tra¨ªa ganas de revancha. "Perm¨ªtanme agradecer a esta C¨¢mara su apoyo de ayer, pues supone un est¨ªmulo para continuar con mi labor", dijo olvidando que hab¨ªa vencido s¨®lo por tres votos.

Cuando le reprocharon que es la peor valorada del Gobierno, tampoco se arredr¨®: "Mi valoraci¨®n es similar a la de Rajoy, y ¨¦l es candidato a la presidencia", se ri¨®. "No tienen el m¨¢s m¨ªnimo respeto a la verdad, mienten una y otra vez", insisti¨® cada vez que la atacaban.

En todo momento dej¨® claro que va a seguir porque cuenta con el apoyo de Zapatero, y de mucha gente. "Ni las encuestas, ni las cartas que me mandan a m¨ª, demuestran esa afirmaci¨®n", le espet¨® a Nadal. La ministra not¨® entonces el cachondeo que se extend¨ªa entre las filas populares por esa idea de las cartas de apoyo y, de nuevo, entr¨® al trapo: "S¨ª, se?or¨ªas, s¨ª, porque hay gente normal. Todo el mundo no va a ser como ustedes. Hay gente normal, gracias a Dios", se ri¨® entre los aplausos socialistas.