El Gobierno frena la expulsi¨®n de mujeres explotadas por mafias

Las v¨ªctimas de la trata son, en el momento en que los cuerpos de seguridad del Estado desarticulan la red que las explotaba, inmigrantes sin papeles. Son detenidas por estancia irregular, expulsadas y repatriadas. S¨®lo si denuncian a sus explotadores pueden acceder a una "autorizaci¨®n de residencia temporal por circunstancias excepcionales", seg¨²n el reglamento de la Ley de Extranjer¨ªa.

Muy pocas lo hacen. No se atreven a acudir a las comisar¨ªas, precisamente por su situaci¨®n de irregularidad y porque los explotadores se encargan a conciencia de que no hablen amenaz¨¢ndolas con represalias contra sus familias. De modo que en la pr¨¢ctica, la ley se aplica antes a las v¨ªctimas que a sus traficantes.

El Gobierno ultima un plan que puede animarlas a dar el paso. El Plan de Acci¨®n Nacional contra la Trata con fines de explotaci¨®n sexual, en el que participan los Ministerios de Interior, Trabajo y Asuntos Sociales y Justicia, impedir¨¢ la expulsi¨®n inmediata de las v¨ªctimas sin papeles estableciendo un "periodo de reflexi¨®n" de no menos de 30 d¨ªas para que reciban asistencia m¨¦dica, apoyo psicol¨®gico y asesoramiento jur¨ªdico y decidan entonces si quieren denunciar. Algo que ya exig¨ªa una directiva del Consejo de la Uni¨®n Europea cuyo plazo de incorporaci¨®n al derecho espa?ol expir¨® en agosto del a?o pasado.

El Plan, una recomendaci¨®n de todos los partidos en una Comisi¨®n sobre los Derechos de la Mujer de 2003, servir¨¢ en gran medida para incorporar los m¨²ltiples tratados internacionales sobre protecci¨®n de v¨ªctimas de la trata. Est¨¢ todav¨ªa en fase de borrador, aunque fuentes de la vicepresidencia del Gobierno conf¨ªan a¨²n en aprobarlo antes de que termine esta legislatura.

Justicia debate todav¨ªa la incorporaci¨®n al plan de otros cambios legales para facilitar a las v¨ªctimas un permiso de residencia y trabajo no condicionado a la colaboraci¨®n policial, sino a razones humanitarias. "En Italia pueden obtenerlo por la v¨ªa judicial, que implica que la v¨ªctima se compromete a ejercer una acci¨®n judicial contra los autores, y la v¨ªa social, en la que se compromete a participar en un programa social de integraci¨®n. En la pr¨¢ctica, las mujeres que se acogen a este programa ganan confianza en las instituciones y acaban denunciando a los tratantes", explica Gentiana Susaj, coordinadora de la Red Espa?ola contra la Trata de Personas, que agrupa a 23 ONG.

La Red Espa?ola contra la Trata de Personas conf¨ªa en que el Plan suponga un nuevo enfoque del problema. "El modelo imperante criminaliza a la v¨ªctima. Se las castiga por violar las leyes migratorias y ejercer la prostituci¨®n. Y eso no es lo que dicen los est¨¢ndares internacionales como el Convenio Europeo Contra la Trata de Seres Humanos, que Espa?a todav¨ªa no ha firmado y que adopta un enfoque no ya de control migratorio sino de protecci¨®n de los derechos humanos", afirma Itziar Ruiz-Gim¨¦nez, del Comit¨¦ Ejecutivo de Amnist¨ªa Internacional.

Adem¨¢s, el Plan incluye campa?as de sensibilizaci¨®n y advertencia en los pa¨ªses de origen y cursos de formaci¨®n espec¨ªficos para los cuerpos de seguridad. Espa?a es uno de los destinos favoritos de estas redes, seg¨²n la ONU. Es el segundo negocio m¨¢s lucrativo del mundo, seg¨²n recordaban en aquella lejana comisi¨®n que reclam¨® este plan de acci¨®n en 2003. El primero sigue siendo el tr¨¢fico de drogas, y con un riesgo mucho menor para los traficantes. La pena m¨¢xima para la explotaci¨®n de la prostituci¨®n es la m¨ªnima para el tr¨¢fico de estupefacientes.