S¨ª conoc¨ªamos a Aza?a
En su magn¨ªfico art¨ªculo sobre Aza?a (12-12-07), mi admirado y querido amigo Jos¨¦ Mar¨ªa Ridao dice que durante el franquismo "las fuerzas m¨¢s activas contra la dictadura no estaban en condiciones de leerlo, y menos de reconocerlo como propio" (a Aza?a). Deb¨ª ser entonces una excepci¨®n porque, siendo ya miembro del PSOE clandestino, yo s¨ª le¨ª en 1967 las Obras Completas de Aza?a editadas por Oaxis (M¨¦xico), compiladas por Juan Marichal, que mi padre, gran admirador del ¨²ltimo presidente de la II Rep¨²blica, hab¨ªa comprado en la librer¨ªa Lorenzo Blanco de Sevilla, quien naturalmente no lo expon¨ªa en la librer¨ªa, sino que lo ten¨ªa escondido junto con otros libros que llegaban del exilio como los de Ruedo Ib¨¦rico, la editorial Losada de Argentina o el Fondo de Cultura Econ¨®mica de M¨¦xico, para que los amigos-clientes "especiales" pudieran tener acceso a ellos. Por lo dem¨¢s, coincido plenamente con el autor y creo que s¨®lo ahora empieza a valorarse en sus justos t¨¦rminos al que fue probablemente el mayor y mejor estadista que ha tenido Espa?a en todo el siglo XX.
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