De Baden Powell a Leon Degrelle para aterrizar en la Luna
Georges Remi, nacido en Bruselas en 1907 y estudiante del colegio cat¨®lico de San Bonifacio, comenz¨® a edad temprana a colaborar en la ilustraci¨®n de revistas y magazines para boy scouts -organizaci¨®n laica fundada por Baden Powell- y para adolescentes, as¨ª como en suplementos period¨ªsticos juveniles.
Pronto adopt¨® el seud¨®nimo de Herg¨¦, que coincide con la pronunciaci¨®n invertida de las iniciales de su nombre y apellido. Su educaci¨®n religiosa, al parecer en clave rigorista, influy¨® en su percepci¨®n del mundo. Uno de sus primeros ¨¢lbumes, relativo al pa¨ªs de los s¨®viets, destilaba un anticomunismo evidente, bajo la influencia de un libro-relato escrito por un c¨®nsul de B¨¦lgica en Mosc¨², seg¨²n ha explicado el comisario de esta muestra, Jordi Tard¨¤.
Su amistad con R. De Beker, quien le llev¨® consigo al diario Le Soir en la etapa en la que ¨¦ste se aline¨® con los nazis durante la ocupaci¨®n militar de los Pa¨ªses Bajos, le condujo a ilustrar con un ex libris un texto de Le¨®n Degrelle, dirigente del movimiento rexista belga, fascista, que fue protegido luego por el ministro franquista de Trabajo Jos¨¦ Antonio Gir¨®n en Fuengirola. Ello habr¨ªa de acarrearle el ser considerado traidor al finalizar la II Guerra Mundial, en 1945. Rehabilitado poco despu¨¦s, mostr¨® en sus ¨¢lbumes un alejamiento de los trasuntos con alcance directamente ideol¨®gico, para tratar otros como la carrera espacial a la Luna o la parapsicolog¨ªa. Se ha insinuado que en Herg¨¦ habitaba una vocaci¨®n cient¨ªfica frustrada.
Influido por el ilustrador Saint-Ogan y por E. P. Jacobs, su colaborador, adquiri¨® el h¨¢bito de documentar sus dibujos y comenz¨® a pulirlos incorpor¨¢ndoles una informaci¨®n objetual excelente, a juicio de Luis Alberto de Cuenca, que se confiesa tintin¨®logo. Aplic¨® a sus dibujos un trazado n¨ªtido y una ambientaci¨®n que, por su sencilla pero magn¨ªfica hechura, se convirti¨® en impermeable a la erosi¨®n del tiempo. Sus creaciones han conservado la perenne actualidad de la belleza que implica toda obra de arte. De igual modo, sus 23 ¨¢lbumes, traducidos en 25 lenguas, se han transformado en amena cr¨®nica del siglo XX.
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