Gaddafi aterriza en Sevilla con tres aviones y rodeado de misterios
El coronel planta al Sindicato de Obreros del Campo y cena con Aznar
La agenda privada de Muammar el Gaddafi es secreta. Ayer qued¨® claro durante su primer d¨ªa de estancia en Sevilla, donde permanecer¨¢ hasta el pr¨®ximo lunes, momento en que se desplazar¨¢ a Madrid para una visita oficial. Durante los d¨ªas previos a su llegada se sucedieron los rumores sin que nadie pudiese confirmarlos. Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores apelaban al car¨¢cter privado de la visita, el mismo argumento de la embajada de Libia. Nadie sabe lo que el l¨ªder decidir¨¢ hacer con su tiempo libre.
Desde las diez de la ma?ana, varios medios de comunicaci¨®n esperaban, junto a miembros de las fuerzas de Seguridad del Estado y organizadores del entorno de Gaddafi, los aviones que presumiblemente aterrizar¨ªan a las once de la ma?ana con el coronel libio, su hijo y el numeroso s¨¦quito que viaja con ellos. La espera dur¨® cinco horas.
Recluido en un hotel de lujo, nadie conoce la agenda de su visita
A lo largo de la ma?ana se iba incrementando el n¨²mero de agentes de seguridad espa?oles, al igual que el n¨²mero de personas de rasgos ¨¢rabes que deambulaban por la zona. Unos portaban maletas, otros esperaban fumando y no pocos vest¨ªan gabardinas que recordaban a las pel¨ªculas de detectives de los a?os cincuenta. Un grupo que parec¨ªa ser de reporteros se limitaban a responder "libian, libian" al ser interrogados.
Sobre las dos de la tarde, m¨¢s de medio centenar de coches de alta gama, unos pocos con matr¨ªcula ¨¢rabe o del cuerpo diplom¨¢tico, llegaron hasta la zona reservada para la salida de la comitiva. Hasta all¨ª se acerc¨® el delegado del Gobierno de Andaluc¨ªa, Juan Jos¨¦ L¨®pez Garz¨®n, para recibir a la delegaci¨®n ¨¢rabe.
A las cuatro de la tarde aterrizaron tres aviones privados. Una primera comitiva de una docena de coches sali¨® escopetada junto a un veh¨ªculo que ostentosamente cargaba con los inhibidores. El resto de la caravana libia se desplaz¨® inmediatamente despu¨¦s con el mismo rumbo: la Hacienda La Boticaria, situada a 10 kil¨®metros de la capital hispalense, un hotel de lujo donde los libios han reservado 115 de las 127 habitaciones. Tambi¨¦n se ha instalado una jaima (tienda t¨ªpica ¨¢rabe) en los jardines y junto a la piscina del establecimiento. Seg¨²n los comentarios, aunque nadie lo confirma oficialmente, Gaddafi ha gastado medio mill¨®n de euros en este viaje.
Todo indicaba que el coronel no saldr¨ªa del recinto hasta hoy. Malik Ruiz, presidente de la Comunidad Isl¨¢mica de Espa?a, promotora de la mezquita de Granada y del templo que se construir¨¢ en Sevilla, hab¨ªa declarado en d¨ªas anteriores que acudir¨ªa a una recepci¨®n con Gaddafi, al igual que el Sindicato de Obreros del Campo. No fue as¨ª.
S¨ª acudi¨®, pasadas las nueve de la noche, el ex presidente del Gobierno Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, con su esposa, Ana Botella. El presidente de la Fundaci¨®n para el An¨¢lisis y los Estudios Sociales (FAES) cen¨® cordero, sacrificado y preparado por los cocineros de Gaddafi, seg¨²n confirmaron a Europa Press el due?o de La Boticaria y la FAES. Cenaron los tres solos.
Fue la segunda vez que se reun¨ªan, lo que ya ocurri¨® en 2003 cuando Aznar se convirti¨® en el primer l¨ªder internacional que visit¨® Libia despu¨¦s de que el Consejo de Seguridad de la ONU levantara el embargo comercial y a¨¦reo impuesto en 1992, cuando el coronel neg¨® su ayuda en la investigaci¨®n de un atentado.
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