De la Quinta Avenida a la batalla de Brunete
La muestra 'Nueva York y la Guerra Civil' rinde homenaje a los brigadistas
Milton Wolff es, seg¨²n Ernest Hemingway, "alto como Lincoln, flaco como Lincoln, tan valiente y buen soldado como cualquiera que hubiese mandado batallones en Gettysburg". Y, adem¨¢s, Wolff tiene un peculiar sentido del humor. En 1937 dijo a su madre que iba a Espa?a para sustituir en una f¨¢brica a un obrero que acud¨ªa al frente. Y durante un a?o, su madre pens¨® que segu¨ªa trabajando entre tornillos, hasta que en el verano de 1938 abri¨® el ¨²nico peri¨®dico en yiddish que hab¨ªa en Manhattan y vio la portada: Hemingway junto al comandante de la Brigada Lincoln, Milton Wolff, fotografiados por Robert Capa. Pasado el tiempo, el octogenario Milton no cuenta c¨®mo se tom¨® su familia aquella fotograf¨ªa, pero todav¨ªa ironizaba en 2005 sobre su ayuda al bando republicano: "Si vuelven a tener problemas, no duden en llamarme".
Su imagen de joven alto y risue?o que cena con Dolores Ib¨¢rruri o dirige a las tropas de internacionales aparece en numerosas fotograf¨ªas de la muestra Nueva York y la Guerra Civil, que despu¨¦s de exponerse en Nueva York llega al Instituto Cervantes de Alcal¨¢ de Henares (Madrid) hasta el 2 de marzo, como s¨ªmbolo de la solidaridad del pueblo neoyorquino tras el golpe de 1936.
Pasaportes con la prohibici¨®n de viajar a Espa?a para asegurar la no intervenci¨®n -que convert¨ªa a los brigadistas en combatientes clandestinos-, peri¨®dicos y carteles de la ¨¦poca, uniformes, munici¨®n y cartas personales completan esta exposici¨®n organizada por el Instituto Cervantes, la Fundaci¨®n Pablo Iglesias, la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (que el a?o pasado edit¨® un documental sobre los voluntarios de la Lincoln) y el Museo y la Universidad de Nueva York.
"El objetivo de la muestra es doble: por una parte, rescatar del olvido un momento hist¨®rico tan apasionante como el internacionalismo, apenas conocido por el p¨²blico estadounidense. Y, por otra parte, mostrar en Espa?a c¨®mo se volc¨® el pueblo de Nueva York con los ideales democr¨¢ticos". "No s¨®lo la Brigada Abraham Lincoln, que es muy conocida", a?ade, "sino la gente de a pie, los ciudadanos que colaboraban con bailes ben¨¦ficos para recaudar fondos, env¨ªos de material m¨¦dico y otras actividades de apoyo a los republicanos", explica James D. Fern¨¢ndez, coordinador del cat¨¢logo de la exposici¨®n titulado Frente al fascismo, que recoge ensayos de autores como E. L. Doctorow, Robert W. Snyder o el doctor Edward K. Barksky, que en un manuscrito in¨¦dito relata su experiencia como organizador de una expedici¨®n m¨¦dica estadounidense.
"La mayor¨ªa de los brigadistas acudieron organizados por el Partido Comunista de Nueva York, que comprobaba si ten¨ªan experiencia militar y por qu¨¦ la ten¨ªan", se?ala Elisabeth Compa, comisaria de la exposici¨®n. "Lo que compart¨ªan aquellos voluntarios, muchos de origen afroamericano y jud¨ªo, era la lucha contra el fascismo. Identificaban la Espa?a de Franco con Hitler y Mussolini, y por eso quer¨ªan evitarlo".
En algunas de aquellas cartas de los brigadistas a sus familiares advert¨ªan: "Si no hacemos algo, ser¨¢ igual de tarde que para los jud¨ªos de Alemania en 1933, cuando se dieron cuenta de que se hab¨ªan equivocado con Hitler".
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