El Gobierno mantiene las elecciones pese a la conmoci¨®n

El Gobierno provisional paquistan¨ª anunci¨® ayer que mantendr¨¢ las elecciones previstas para el 8 de enero, pero las protestas que sacuden el pa¨ªs, el vac¨ªo dejado por Benazir Bhutto y el plante de los otros partidos de oposici¨®n sumen al pa¨ªs en la incertidumbre m¨¢s absoluta.

La decisi¨®n de confirmar las legislativas en la fecha prevista fue tomada a primera hora de ayer, durante una reuni¨®n de emergencia del gabinete del primer ministro, Mohammamian Soomro. "El Gobierno usar¨¢ todos los medios para desenterrar esta conspiraci¨®n", dijo Soomro en un discurso al pa¨ªs. Pero la inestabilidad que atraviesa Pakist¨¢n hace dudar a muchos analistas de la viabilidad de los comicios legislativos y provinciales.

En medio del desconcierto, ha sido el ex primer ministro Nawaz Sharif el primero en pedir la suspensi¨®n de los comicios y la dimisi¨®n de su gran enemigo, el presidente Pervez Musharraf. Tambi¨¦n Imran Khan, antigua estrella del cr¨ªquet y l¨ªder de la formaci¨®n Tehreek-e-Insaf, pidi¨® la dimisi¨®n del presidente del que, dijo, "es parte del problema, no la soluci¨®n".

"Si las autoridades siguen obstinadas en mantener las elecciones para el 8 de enero, nos llevar¨¢n por el camino de la autodestrucci¨®n, que no conducir¨¢ ¨²nicamente a la destrucci¨®n del Gobierno, sino tambi¨¦n del pa¨ªs", dijo Sharif, l¨ªder de la Liga Musulmana de Pakist¨¢n-N (PML-N), a quien la Comisi¨®n Electoral le ha prohibido presentar su candidatura.

Sharif, destituido en 1999 por el golpe de Estado de Musharraf, acus¨® entre l¨ªneas al Jefe del Estado de ser responsable del asesinato de Benazir Bhutto, "prueba", dice, de que "no tiene ninguna intenci¨®n de celebrar elecciones libres y equitativas". "Musharraf tiene que dejar el poder. ?sa es la principal exigencia de la naci¨®n. La gente quiere que lo haga lo m¨¢s r¨¢pidamente posible".

Sharif, que dirige la segunda fuerza de oposici¨®n, parece dispuesto a llevar el vac¨ªo que deja Bhutto, que con el Partido Popular de Pakist¨¢n (PPP) encabezaba los sondeos de intenci¨®n de voto. Ante el hospital donde falleci¨® la primera ministra, Sharif prometi¨® "continuar su guerra" contra Musharraf.

En busca de un l¨ªder

Lo que no est¨¢ claro es cu¨¢l va ser la posici¨®n del PPP, que se enfrenta a la tesitura de buscar sobre la marcha al sucesor de Bhutto. Elegida presidenta vitalicia del partido, la l¨ªder asesinada hab¨ªa impedido el surgimiento de otras figuras. Todas las encuestas apuntaban a que ella iba a ganar las elecciones, y ten¨ªa la lealtad sin fisuras de al menos un tercio del electorado. Dos nombres se barajan como posibles sucesores: el "oficial" es el vicepresidente del PPP, Makhdoom Amin Fahim, aunque tambi¨¦n ha salido a la palestra Aitzaz Ahsan, el dirigente del movimiento de abogados.

Algunos expertos consideran que, con Bhutto convertida en m¨¢rtir, el PPP podr¨ªa intentar sacar provecho de la conmoci¨®n y de la escasa popularidad de Musharraf para ganar las elecciones a pesar de la ausencia de su figura m¨¢s carism¨¢tica.