Sigue la pesadilla
La crisis de las hipotecas 'subprime' frenar¨¢ el crecimiento de la econom¨ªa y los beneficios empresariales en 2008
La tormenta no amaina. Es m¨¢s, se recrudece. La crisis desatada por las hipotecas subprime en agosto pasado, con la mayor¨ªa de inversores de veraneo, ha seguido haciendo estragos hasta las fiestas navide?as y, seg¨²n coinciden los expertos, acabar¨¢ haciendo mella tanto en la econom¨ªa de Estados Unidos como en la europea.
?Se trata s¨®lo de una crisis pasajera o de un golpe de consecuencias graves? ?sa es la pregunta en boca de todos a punto de comenzar el a?o 2008. El director del Servicio de Estudios de La Caixa, Jordi Gual, pronostica que EE UU no entrar¨¢ en recesi¨®n, aunque notar¨¢ el impacto de la crisis sobre todo en el primer y el segundo trimestre. Los da?os sufridos por los sectores inmobiliario y crediticio ralentizar¨¢n la actividad, opina Gual, pero la bajada de los tipos de inter¨¦s, el bajo nivel del d¨®lar y la fuerza exportadora del pa¨ªs ayudar¨¢n a la primera econom¨ªa del mundo a eludir el desastre. "La crisis se ha recrudecido por el efecto fin de a?o, pero los mercados crediticios volver¨¢n a una situaci¨®n m¨¢s razonable conforme avance el a?o", afirma.
El verdadero alcance de la crisis no se conocer¨¢ hasta que todas las entidades afectadas pasen por el confesionario
La Reserva Federal de EE UU trata de frenar una recesi¨®n y ha bajado tres veces los tipos de inter¨¦s desde agosto
La lista de v¨ªctimas en Wall Street es larga y la encabezan pesos pesados: Merrill Lynch, Morgan Stanley, Citigroup, Bear Stearns
?ngel Berges, de Analistas Financieros Internacionales, cree que la crisis restar¨¢ medio punto al PIB espa?ol
Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Alejo, de Inversis Banco, cree que la econom¨ªa de EE UU podr¨ªa tener dos trimestres negativos -lo que t¨¦cnicamente ser¨ªa una recesi¨®n-, pero considera "muy dif¨ªcil" que acabe el a?o con un crecimiento inferior al 2%, el mismo porcentaje que pronostica La Caixa.
?C¨®mo comenz¨® todo? La subida de los precios de la vivienda en Estados Unidos a mediados de los a?os noventa, al mismo tiempo que en Espa?a, acab¨® convirti¨¦ndose en una burbuja inmobiliaria. Las autoridades estadounidenses llevaban a?os animando a las instituciones crediticias a conceder pr¨¦stamos subprime para ayudar a los ciudadanos de escasos recursos a cumplir el sue?o de comprar una casa. Pero el sue?o se convirti¨® r¨¢pidamente en pesadilla: los tipos de inter¨¦s comenzaron a subir, los precios de las viviendas bajaron en picado y muchos compradores fueron incapaces de hacer frente a las cuotas mensuales de sus hipotecas.
Aparece la desconfianza
Las p¨¦rdidas se extendieron r¨¢pidamente por los mercados, donde esas hipotecas se negociaban desde hac¨ªa tiempo como instrumentos financieros con alt¨ªsimas rentabilidades y excelentes calificaciones de las agencias de riesgo. Hasta que la desconfianza hizo su aparici¨®n y desat¨® un problema de falta de liquidez en los mercados de cr¨¦dito que, cinco meses despu¨¦s, a¨²n persiste. Los bancos han dejado de prestarse dinero entre s¨ª porque desconf¨ªan de la solvencia de sus competidores, y tambi¨¦n se lo piensan dos veces a la hora de dar cr¨¦ditos a empresas y particulares.
Para ?ngel Berges, consejero delegado de Analistas Financieros Internacionales (AFI), la crisis se prolonga tanto porque las instituciones financieras est¨¢n tardando mucho en confesar cu¨¢nto dinero han perdido como consecuencia de su exposici¨®n a la crisis. "La sensaci¨®n es que estamos sentados en un polvor¨ªn de subprime", afirma Berges. "Eso aumenta la desconfianza y hace que nadie preste a nadie".
La lista de v¨ªctimas en Wall Street es larga y la encabezan varios pesos pesados: Citigroup, Merrill Lynch, Morgan Stanley, Bear Stearns... pocos se han salvado de la quema. El que m¨¢s y el que menos ha sufrido p¨¦rdidas como consecuencia de inversiones vinculadas a los cr¨¦ditos subprime. Hasta el momento, las p¨¦rdidas reconocidas ascienden a unos 80.000 millones de d¨®lares (56.000 millones de euros), pero la cantidad podr¨ªa ser mucho mayor. La OCDE calcula que ser¨¢n 300.000 millones de d¨®lares, cifra que Goldman Sachs -una de las pocas sociedades de Bolsa que se han salvado de la quema- aumenta hasta los 400.000 millones.
La crisis se ha llevado por delante a los primeros ejecutivos de Merrill Lynch, Stan O'Neal, y de Citigroup, Charles Prince. Los de Bear Stearns, James Cayne, y de Morgan Stanley, John Mack, han renunciado a sus bonos de fin de a?o y aunque se agarran a sus cargos con u?as y dientes, sus cabezas corren peligro.
Tambi¨¦n han sufrido lo suyo los bancos europeos. UBS ha efectuado provisiones por 14.000 millones de d¨®lares por su exposici¨®n al subprime; Soci¨¦t¨¦ G¨¦n¨¦ral y HSBC han apartado 3.400 millones cada uno, por poner s¨®lo unos ejemplos. El banco brit¨¢nico Northern Rock, la entidad brit¨¢nica m¨¢s castigada por la crisis, ha tenido que pedir prestados 50.000 millones de d¨®lares al Banco de Inglaterra para sobrevivir. Sus acciones han ca¨ªdo un 93% y se conjetura con su nacionalizaci¨®n como v¨ªa de salvamento. Quiz¨¢ la imagen m¨¢s elocuente que ha dejado la crisis sea la de sus clientes haciendo cola ante las sucursales para retirar sus dep¨®sitos.
El verdadero alcance de la crisis no se conocer¨¢ hasta que todas las entidades afectadas pasen por el confesionario, opinan los expertos. "Esperamos que en el primer y segundo trimestre, con los datos de los bancos ya auditados, la crisis de liquidez se vaya reconduciendo y la confianza se vaya recuperando", dice Gual.
La intervenci¨®n coordinada de los bancos centrales ha sido providencial para evitar una cat¨¢strofe. El Banco Central Europeo, que ha vivido el momento estelar desde su nacimiento, en 1999, ha inyectado enormes cantidades de dinero en el mercado para garantizar la liquidez del sistema. Hace dos semanas efectu¨® la ¨²ltima operaci¨®n de salvamento, al poner a disposici¨®n de los bancos 348.607 millones de euros, la mayor cantidad de su historia, hasta el pr¨®ximo 4 de enero.
En Estados Unidos, Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal, trata de impedir una recesi¨®n. Hace dos semanas, el banco central estadounidense rebaj¨® los tipos de inter¨¦s por tercera vez desde agosto, en un intento de devolver la confianza a los mercados y revitalizar la actividad. En total, el precio del dinero ha bajado un punto desde agosto, hasta el 4%. Los mercados piden m¨¢s recortes, temerosos de que el consumo -dos terceras partes de la econom¨ªa estadounidense- se estanque. No parece ser el caso. Seg¨²n datos difundidos el jueves, la confianza de los consumidores ha subido en diciembre -por sorpresa y por primera vez en cinco meses-, impulsada por el optimismo sobre el empleo, la inflaci¨®n y las perspectivas econ¨®micas.
?ngel Berges, de AFI, apunta que la subida de la inflaci¨®n tanto en EE UU como en la Zona Euro deja a los bancos centrales menos margen para bajar los tipos de inter¨¦s. Por ello, cree que las autoridades monetarias deben seguir actuando con generosidad y renovar sus promesas de ayuda con mecanismos similares al adoptado por el BCE hace dos semanas. As¨ª podr¨¢ recuperarse la confianza. Garc¨ªa Alejo, de Inversis, tampoco cree que la bajada de los tipos de inter¨¦s sea el mejor remedio. "Ayudan a bajar la morosidad y a reforzar el consumo, pero la crisis interbancaria s¨®lo se solucionar¨¢ si los bancos empiezan a financiarse entre s¨ª". Por ello considera vital que contin¨²en las inyecciones de dinero en el sistema.
Los bancos espa?oles se han salvado, por ahora, de la quema. "La crisis subprime no es m¨¢s que una crisis de especulaci¨®n financiera", explica Pablo Montesano, experto en servicios financieros de la consultora Arthur D. Little (ADL). "Los bancos m¨¢s afectados son los que tienen m¨¢s negocio de inversi¨®n, y los espa?oles se dedican principalmente al retail". En su opini¨®n, el sistema bancario espa?ol no est¨¢ amenazado, pero los bancos tendr¨¢n que abrir nuevas v¨ªas de ingresos, como los j¨®venes, los inmigrantes o las pymes para apuntalar sus cuentas de resultados. Una consecuencia de la crisis, vaticina Montesano, va a ser la intensificaci¨®n de los procesos de consolidaci¨®n entre bancos y cajas espa?olas y el aumento de las adquisiciones en el extranjero por parte de entidades espa?olas.
?Qu¨¦ impacto tendr¨¢ la crisis subprime en la econom¨ªa espa?ola? Jordi Gual, de La Caixa, cree que la falta de liquidez mermar¨¢ la actividad, pero subraya que la econom¨ªa espa?ola tiene importantes v¨¢lvulas de seguridad para afrontar el problema, entre ellas un sector bancario y financiero solvente y con grandes provisiones, adem¨¢s de un sector p¨²blico muy saneado. Espa?a, calcula Gual, crecer¨¢ en 2008 menos que en 2007, pero podr¨¢ cerrar el a?o con un aumento del PIB del 2,9%. ?ngel Berges, de AFI, cree que la crisis ha sido la puntilla para el sector inmobiliario, motor de la econom¨ªa en los ¨²ltimos a?os. A su juicio, la ca¨ªda en la actividad constructora va a restar un punto al PIB espa?ol, que crecer¨¢ el a?o que viene, seg¨²n sus previsiones, entre un 2,7 y un 2,8%. Berges atribuye directamente a la crisis subprime medio punto del crecimiento.
Los expertos coinciden en que el sector inmobiliario es el que m¨¢s va a sufrir, sobre todo por las dificultades para acceder al cr¨¦dito por parte de promotores y consumidores. "El grifo se est¨¢ cortando", dice Montesano, de ADL. "De hecho, muchos lo han cortado ya". En ese ambiente, Montesano vaticina que muchas promotoras van a caer en bancarrota y que habr¨¢ una dr¨¢stica reducci¨®n del cr¨¦dito a la vivienda.
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