Las dudas del 'cinco cinco'

Capablanca y Zan Tabak poblaron los sue?os de Lazaros Papadopoulos este verano. El p¨ªvot, griego de origen ruso, deb¨ªa decidirse frente a las ofertas de los clubes m¨¢s poderosos de Europa. Sus estad¨ªsticas en la Euroliga -14,7 puntos y 7,2 rebotes-, su fama de jugador ¨²nico y su figura de h¨¦roe griego hicieron que los contratos que llegaron a sus manos pesaran como s¨®lo lo hacen los boletos premiados. Le ofrec¨ªan unos dos millones de euros netos al a?o de media. Oro puro en el mundo del baloncesto. Poco despu¨¦s, su desabrida melena de bucanero y sus bravatas ocuparon el palco de honor del estadio Bernab¨¦u. "Conmigo, el Real Madrid ser¨¢ mejor", asegur¨®. Y, con efecto inmediato, su productividad estad¨ªstica sufri¨® un descenso alarmante.

"En Mosc¨² era clave y la primera opci¨®n de ataque. Aqu¨ª no", dice Zan Tabak

En 23 minutos, el griego logra 5,4 puntos y 4,2 rebotes; Reyes, 12,2 y 6,2

Papadopoulos -que no llega a los seis puntos y cinco rebotes de media-, se hab¨ªa pasado el verano reflexionando sobre su futuro mientras se enfrascaba en sus partidas de ajedrez y en su devoci¨®n por Jos¨¦ Ra¨²l Capablanca y Graupera, el genio cubano que se gan¨® el apelativo de El Mozart del ajedrez por sus victorias de los a?os 20. Mientras se decid¨ªa, el griego rememor¨® sus choques "dur¨ªsimos", m¨²sculo contra m¨²sculo, kilo contra kilo, frente a Zan Tabak, ex p¨ªvot del Madrid y hoy su segundo entrenador. Valor¨® la ventaja de perder de vista a Felipe Reyes como rival. Fich¨®. Y se present¨® a los entrenamientos pensando que en Tabak, adem¨¢s de al valedor de su fichaje, ten¨ªa a un conocido. Gran error.

"Lazaros me ha dicho que se acuerda de aquellos partidos que nos enfrentaron [Panathinaikos-Real Madrid de la Euroliga 2001-2002]", dice Tabak, ex campe¨®n de la NBA con los Rockets de Houston adem¨¢s de plata en los Juegos de Barcelona 1992. "Yo no me acuerdo de ¨¦l. Hab¨ªa otros que jugaban m¨¢s", corta. Y se pone a explicar las razones por las que Papadopoulos, el hombre con el que el Madrid pretende asaltar la Copa de Europa, promediaba hasta la jornada de ayer 5,4 puntos y 4,2 rebotes ligueros en 23 minutos, cuando Reyes, en el mismo tiempo, logra 12,2 y 6,2. El griego sum¨® ayer 2 puntos y 5 rebotes en la victoria del Madrid ante el Cajasol (74-77).

"Lazaros era la pieza clave en todos los sistemas del Dynamo de Mosc¨². Por sus manos pasaban m¨¢s balones que aqu¨ª", argumenta Tabak. "Era la primera opci¨®n de ataque. Aqu¨ª no. Aqu¨ª hay diez jugadores que pueden anotar y no hay ninguna primera opci¨®n. Por eso somos el Madrid, por eso somos los campeones, por nuestra variedad. Lo que pasa es que todav¨ªa nos tenemos que acostumbrar a ¨¦l y ¨¦l a nosotros", a?ade.

Papadopoulos nunca enga?¨® a nadie. Hoy es un jugador que rema desesperadamente en la zona en busca de un pase que nunca llega. Antes fue el hombre al que defini¨® en la p¨¢gina web del club: "Soy un cinco puro al que le gusta jugar en el poste bajo, siempre en posiciones cercanas al aro. El gancho es mi tiro preferido y por eso trabajo duro con ambas manos para mejorarlo". Eso, en baloncesto, es una especie en extinci¨®n. Eso, en la ¨¦poca de los jugadores vers¨¢tiles, le hace ¨²nico, un especialista. Eso merece un t¨ªtulo que justific¨® la apuesta del Madrid: aspirante a p¨ªvot dominante.

El Madrid de Joan Plaza y Tabak, campe¨®n de Liga y de la Copa ULEB, no se entiende sin Felipe Reyes. Y Reyes no se entiende sin Tabak. Papadopoulos y el p¨ªvot madrile?o, que se juntaban con Mumbr¨² y Ra¨²l L¨®pez en los torneos internacionales en su etapa j¨²nior, viven los entrenamientos enfrentados a las pr¨¢cticas espec¨ªficas de Tabak, que fue un maestro del baloncesto de ataque y carga bajo tableros. "?A m¨ª tambi¨¦n me cost¨® adaptarme!", ruge el ex jugador. "De cada jugador que llega al Madrid, a un grande, se duda cuando no empieza muy bien. Se duda de su calidad. ?Lazaros ya la demostr¨®! Esta Liga es distinta a todas: hay m¨¢s igualdad entre los equipos, se corre mucho y es m¨¢s r¨¢pida".

Los problemas de los p¨ªvots del Madrid nacen de la herencia de Bozidar Maljkovic, que apost¨® por un esquema sin referencias, jugado desde el per¨ªmetro. "?Esto ya le pas¨® a Felipe a principios del a?o pasado!", dice el t¨¦cnico. "Tuvimos el mismo problema. Nos costaba que los jugadores buscaran m¨¢s a los interiores. Felipe, sin embargo, tiene un juego distinto: puede jugar en transici¨®n, tiene variedad dentro y fuera de la pintura y est¨¢ acostumbrado a sus compa?eros. Lazaros en un cinco cinco. Un cinco puro. De esos hay pocos. ?l y el equipo deben acostumbrase mutuamente, y eso no pasa en un d¨ªa. ?Enseguida se duda! Trabaja conmigo. Es un gran trabajador. Por eso el ¨¦xito no le va a faltar. Pocos juegan bajo del aro y encuentran tiros o sacan pases como ¨¦l".