La rebeli¨®n de los polic¨ªas 'mileuristas'

Los turistas deambulaban ayer un tanto desorientados por el casco hist¨®rico de ?beda (Ja¨¦n), la ciudad que, junto a la vecina Baeza, fue declarada en 2003 Patrimonio de la Humanidad. Ni un polic¨ªa en la calle al que preguntar por d¨®nde circular o d¨®nde encontrar un monumento. Tan sorprendidos como los turistas est¨¢n los ubetenses que, desde hace tres d¨ªas no ven a ninguno de sus 46 agentes patrullando por sus calles.

La mayor parte de los polic¨ªas est¨¢n de baja psicol¨®gica y el resto, fuera de servicio. Un huelga encubierta por motivos econ¨®micos puesto que su sueldo se ha resentido tras revisarse y anularse varios complementos. Los polic¨ªas dicen que ganan 1.160 euros y los 18 bomberos, que comparten la misma reivindicaci¨®n, apenas 1.040 euros. "No queremos ser mileuristas; en pueblos de poco m¨¢s de 1.000 habitantes ganan 200 y 300 euros m¨¢s que nosotros, es algo inadmisible", indicaba Diego Melero, presidente del sindicato policial que ha puesto contra las cuerdas al equipo de gobierno socialista ubetense.

El tr¨¢fico es un caos y el SUP dice que ha aumentado la delincuencia

"Nos molesta el menosprecio que los pol¨ªticos tienen a nuestro trabajo"

De no ser por los 46 miembros de la comisar¨ªa del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, ?beda ser¨ªa una ciudad sin ley con 36.000 habitantes. De momento, el desorden ya se advierte en el aumento de la delincuencia, como denuncia Benito Garc¨ªa, del Sindicato Unificado de Polic¨ªa (SUP), y tambi¨¦n en la anarqu¨ªa en los aparcamientos y el caos en el tr¨¢fico en las zonas m¨¢s c¨¦ntricas. Y es que el plante de los agentes impide regular el tr¨¢fico, que funcione el servicio de gr¨²a y, por supuesto, que se pongan multas.

"Menos mal que somos una ciudad pac¨ªfica, porque esto es algo inaudito", comentaba at¨®nita Mar¨ªa, una vecina del barrio de San Pedro, preocupada por la falta de vigilancia en las inmediaciones de los colegios a los que acuden sus hijos. M¨¢s indignado se encontraba el comerciante Juan Ram¨ªrez, que lleva varios d¨ªas soportando los ruidos "a deshora" de un pub debajo de su casa. "La verdad es que en ?beda los alguaciles [t¨¦rmino con el que a¨²n se asocia a los polic¨ªas locales en ?beda] nunca han tenido buena fama, porque casi siempre est¨¢n inactivos".

Este cierto desapego de los agentes con la poblaci¨®n se hace a¨²n m¨¢s patente en sus relaciones con la clase pol¨ªtica. "Nos molesta la indiferencia y el menosprecio que tienen hacia nuestro trabajo", se quejaba uno de los agentes mientras aguardaba el resultado de la reuni¨®n en la que el alcalde, el socialista Marcelino S¨¢nchez, sent¨® en la mesa a los sindicatos de la polic¨ªa y bomberos.

El encuentro no sirvi¨® m¨¢s que para constatar las diferencias que separan a las dos partes. Los polic¨ªas dicen que hay un d¨¦ficit de plantilla del 30% y que la desaparici¨®n de varios complementos hace que muchos agentes "lo tengan dif¨ªcil para llegar a final de mes", seg¨²n Diego Melero. El alcalde, en cambio, les ofert¨® una revisi¨®n salarial, pero en el marco de toda la plantilla municipal para no crear agravios, y record¨® que se han convocado cinco nuevas plazas.

Marcelino S¨¢nchez ha pedido la mediaci¨®n de la Subdelegaci¨®n del Gobierno y advierte que abrir¨¢ expedientes por falta grave y acudir¨¢ a la Fiscal¨ªa si la inspecci¨®n m¨¦dica demuestra que las bajas m¨¦dicas son simuladas. El conflicto, lejos de resolverse, sigue enconado.