La crisis obliga a cerrar 40.000 agencias inmobiliarias en un a?o

El a?o 2007, que empez¨® en la cresta del boom del ladrillo y termin¨® en plena crisis de ventas, deja tras de s¨ª un largo reguero de cad¨¢veres en forma de agencias inmobiliarias. Los cierres no afectan s¨®lo a cadenas conocidas, como Fincas Corral o Tecnocasa, el par¨®n tambi¨¦n ha herido de muerte a las peque?as oficinas de venta de pisos que en los ¨²ltimos a?os han aparecido en cada esquina de cada ciudad espa?ola al olor del dinero r¨¢pido. El consejo que aglutina a los 46 colegios territoriales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) calcula que de las 80.000 oficinas de intermediaci¨®n que exist¨ªan a principios de 2007, s¨®lo ha sobrevivido la mitad, unas 40.000.

"El ajuste en los pr¨®ximos meses ser¨¢ a¨²n m¨¢s duro", avisan en el sector

Pero no hace falta ir a los datos de los API. Basta un paseo por calles antes repletas de inmobiliarias y en las que ahora, cuando las ventas han ca¨ªdo un 40%, cuelga el cartel de Se traspasa. Y por cada cierre, unos cuantos trabajadores se van al paro.

A pesar de la enorme diversidad del sector -que incluye desde oficinas unipersonales sin m¨¢s infraestructura que un m¨®vil hasta centros con una decena de empleados-, el presidente del consejo estatal de los API, Santiago Baena, estima que la plantilla m¨ªnima de cada agencia profesionalizada es de tres trabajadores (el titular, un administrativo y un comercial).

As¨ª, el cierre de puntos de intermediaci¨®n habr¨¢ enviado al paro a bastantes m¨¢s de 100.000 trabajadores. Esto, sin contar las reducciones de plantilla en oficinas que siguen funcionando, o la conversi¨®n de contratos de jornada completa en eventuales, y otras pr¨¢cticas que, seg¨²n reconoce Baena, se han hecho habituales en los ¨²ltimos meses.

Al hablar de cierres, Baena distingue entre los chiringuitos abiertos cuando los pisos se vend¨ªan solos y las agencias profesionalizadas que encabezan los API. "Han cerrado los advenedizos, los que llegaron a este sector porque ve¨ªan dinero f¨¢cil. De hecho, el n¨²mero de API colegiados ha aumentado ligeramente en el ¨²ltimo a?o, llegando hasta los 20.000. Nosotros permanecemos porque tenemos estructura de supervivencia", dice Baena.

Apoya esta tesis Jaime Cordero, el presidente del colegio madrile?o de agentes, que prefiere ver el lado positivo del efecto domin¨® vivido por las inmobiliarias: "La mayor parte de los desaparecidos eran negocios que a veces no ten¨ªan m¨¢s base que un tel¨¦fono m¨®vil. Ni un solo afiliado a nuestro colegio ha cerrado. Como mucho, algunos han clausurado alguna de las oficinas que encabezaban". Tan s¨®lo en la Comunidad de Madrid han desaparecido 9.000 de las 20.000 agencias que exist¨ªan hace un a?o.

Las grandes cadenas han aguantado el tir¨®n como han podido. Mientras Fincas Corral hab¨ªa cerrado en noviembre la mitad de su red, y Tecnocasa hab¨ªa hecho lo propio con 160 oficinas, Donpiso casi ha mantenido sus 360 puntos de venta. Eso s¨ª, como reconoce su subdirector general, Emiliano Berm¨²dez, si han logrado cumplir sus planes presupuestarios al 90% es s¨®lo porque han emprendido una agresiva pol¨ªtica de venta de autocartera. Donpiso se ha propuesto aprovechar la coyuntura y absorber casi un centenar de agencias en peligro de cierre en Madrid, Valencia y Tenerife.

"Aunque el sector vive una hecatombe, nosotros esperamos llegar a finales de 2008 con una reducci¨®n neta de unas 20 oficinas", asegura Berm¨²dez.

Porque si los ¨²ltimos meses han sido dif¨ªciles, la situaci¨®n no se presenta mucho mejor en el a?o que ahora comienza. "Todav¨ªa tiene que haber m¨¢s limpieza. El ajuste en los pr¨®ximos tres o cuatro meses ser¨¢ m¨¢s duro", avisa el presidente de los colegios de agentes.

En su opini¨®n, la correcci¨®n es positiva porque clarificar¨¢ un mercado en el que no hay ning¨²n censo, que est¨¢ totalmente descontrolado. Y concluye: "La liberalizaci¨®n aprobada en 2000 convirti¨® este sector en un cachondeo. Esto parec¨ªa el patio de Monipodio del que hablaba Cervantes en las Novelas ejemplares, el lugar donde se reun¨ªan los truhanes en Sevilla. Si hubiera estado regulado, el ajuste no habr¨ªa sido tan duro. A pesar de todo, soy optimista, porque esto va a revitalizar el sector, pero nos esperan d¨ªas muy duros".

40000 agencias inmobiliarias espa?olas cerraron sus puertas en 2007