"Te hac¨ªan creer que eras un in¨²til"

En los momentos m¨¢s dif¨ªciles, a Pablo Garc¨ªa de Vicu?a a veces le asaltaban los peores pensamientos. "Te cuestionaban tu capacidad como profesor. Te hac¨ªan creer que eras un in¨²til por no saber euskera y reflexionabas sobre ello. Pero, ?desde cuando hay que medir la capacidad de un profesional por si sabe o no sabe euskera? ?El no saber euskera significa que no eres nadie como profesor despu¨¦s de tantos a?os dando clase?".

Garc¨ªa de Vicu?a, profesor de historia en el Instituto Miguel de Unamuno de Bilbao, se erigi¨® en el portavoz de los 157 de Bertendona y en uno de los docentes que mejor encarn¨® el esp¨ªritu de aquel encierro. Apenas hace unas semanas consigui¨® sacar el tan ansiado perfil ling¨¹¨ªstico 2. "?Soy ahora mejor profesor por tener esta certificaci¨®n?", se pregunta. Y se responde a rengl¨®n seguido: "Pues no".

Orgullo es la palabra que mejor define la sensaci¨®n que siente al recordar las vivencias de aquellos 141 d¨ªas. "No renuncio a nada de lo que hice, s¨®lo estaba luchando por mi puesto de trabajo. Algunos han querido ver una lucha pol¨ªtica en aquella movilizaci¨®n, pero s¨®lo era una lucha contra algo que consider¨¢bamos injusto. Ni m¨¢s ni menos".

De aquellos d¨ªas le han quedado amigos para toda la vida y tambi¨¦n le han permitido conocer un poco m¨¢s por profundamente la condici¨®n humana. "Hay gente que me ha retirado el saludo en el pueblo". Y en esa l¨ªnea recuerda una an¨¦cdota que se le ha quedado grabada. "Cuando organizamos la marcha hacia Vitoria, pedimos ayuda a los colegios de los pueblos por donde ¨ªbamos a pasar para que nos acogieran y pasar all¨ª la noche. Recuerdo que el jefe de estudios de uno de esos colegios me felicit¨® por un libro de historia que hab¨ªa escrito sobre el Pa¨ªs Vasco y que lo utilizaba de manual el clase. Pero al verme en aquella movilizaci¨®n me acus¨® de significarme pol¨ªticamente y dijo que se iba a plantear seguir utilizando mi libro. Me dej¨® fuera de juego".

Pablo admite que algunos docentes han podido vivir como "un fracaso" todas las movilizaciones, pero ¨¦l se queda con el cari?o recibido aquellos d¨ªas por "gran parte de la sociedad".