Mario Gas lleva al Romea 'Homebody / Kabul', premonitoria obra contra los totalitarismos
En 1998, airado ante los primeros bombardeos de Afganist¨¢n por parte de EE UU, el dramaturgo Tony Kushner (Nueva York, 1956) empez¨® a escribir una obra premonitoria: Homebody / Kabul. Tard¨® cuatro a?os en acabarla. La pieza, una cr¨ªtica contra el colonialismo ejercido por Occidente sobre culturas milenarias y contra todo totalitarismo, se estren¨® con pol¨¦mica tres meses despu¨¦s del atentado contra las torres gemelas. El a?o pasado, el Teatro Espa?ol de Madrid produjo una versi¨®n de la pieza firmada por Mario Gas, director art¨ªstico del teatro. El aclamado montaje, En casa / en Kabul, se presenta desde ma?ana y hasta el 3 de febrero en el teatro Romea de Barcelona.
Vicky Pe?a, Gloria Mu?oz, Mohamed el Hafi, Montse Morillo, Roberto ?lvarez, Jordi Collet y Mostafa el Houari son algunos de los int¨¦rpretes de este espect¨¢culo, para el que el director realiz¨® un casting en varios pa¨ªses. "Me interesaba que los distintos acentos no sonaran falsos", explica. La historia arranca con el mon¨®logo de un ama de casa brit¨¢nica (Pe?a) que, pese a tenerlo todo, est¨¢ insatisfecha con su vida. Hace a?os que atesora gu¨ªas de viaje de Afganist¨¢n. Hasta que un d¨ªa se decide a visitar Kabul, donde se dice que est¨¢ enterrado Ca¨ªn. All¨ª desaparece. Su esposo y su hija deciden tratar de localizarla.
Kushner, jud¨ªo, de izquierdas y "antisionista", como se declara, no pod¨ªa aceptar que el derramamiento de sangre fuera el modo de solucionar la situaci¨®n del pueblo afgano. Por eso su obra fue, en primera instancia, una reacci¨®n contra la campa?a del entonces presidente, Clinton. Kushner (que en su haber tiene t¨ªtulos como ?ngeles en Am¨¦rica) asegura no poder escribir nada que no sea pol¨ªtico. Pero niega su condici¨®n de visionario. A decir de Gas, el valor de la obra radica en que no es esquem¨¢tica, sino "muy dial¨¦ctica. Apela a la raz¨®n y a los sentimientos. Y no es panfletaria".
Tras su estreno en Nueva York, que entre otras cr¨ªticas recibi¨® la de "peligrosa propaganda talib¨¢n", el primer montaje de la pieza pudo verse en ingl¨¦s en el Teatre Lliure en julio de 2002, en el marco del Grec. Gas asume la dramaturgia de la versi¨®n en espa?ol, traducida por Carla Matteini. Franc¨¦s, past¨²n, ¨¢rabe, esperanto y dari se intercalan tambi¨¦n en el montaje, que Gas define como "una profunda reflexi¨®n sobre el mundo contempor¨¢neo, sobre los totalitarismos, sobre la colonizaci¨®n de Europa y EE UU sobre culturas milenarias, sobre el poder y la gente que lo sufre". En opini¨®n del director, ¨¦sta es una obra "demoledora, potente, estremecedora y de alta calidad", en la que ve resonancias "shakespearianas, brechtianas, millerianas. Es absolutamente arrebatadora".
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