"El cambio deber¨ªa ser m¨¢s acelerado"
Tres legislaturas despu¨¦s, deja el Congreso de los Diputados para regresar a la vida org¨¢nica del BNG desde un "papel distinto", que se niega a desvelar. En una conversaci¨®n mantenida en gallego, Paco Rodr¨ªguez (Ferrol, 1945) pronostica que el Bloque subir¨¢ en votos el 9 de marzo y descarta rotundamente cualquier pacto con el PP. En clave interna, reclama a las conseller¨ªas nacionalistas que "aceleren el cambio" en la Xunta.
P. ?Qu¨¦ balance hace de sus tres legislaturas en el Congreso?
R. Positivo, con un punto de partida fatal, 20 a?os en los que el nombre de Galicia no fue pronunciado. Hab¨ªa que dejar claro que la representaci¨®n gallega no era digna y eficaz. Se ha conseguido con cambios significativos en el presupuesto, la capacidad de dialogar con los m¨¢s altos responsables del Gobierno y para que se entienda que Galicia tiene perfil pol¨ªtico propio. Esta legislatura fue la m¨¢s productiva, pero sirvieron los a?os en los que ganamos prestigio y conseguimos que se nos viese como un partido trabajador que sab¨ªa adaptar su discursos a los diferentes momentos. Con un gobierno sin mayor¨ªa, capacidad de di¨¢logo y cuando fuimos aritm¨¦ticamente necesarios, los resultados fueron mejores.
"El PSOE es desleal con Galicia no con el Bloque, boicotea medidas buenas"
"Nunca pactaremos con este PP antinacionalista y espa?olista"
"Subiremos en votos y reforzaremos posiciones en el Congreso"
"El BNG hizo en la Xunta cosas importantes y otras que debe rectificar"
P. ?Encontr¨® mayor complicidad en Zapatero?
R. Claro, es que Aznar era de pl¨¢stico, profundamente antinacionalista y antigallego. Era autoritario y disciplicente, no con nosotros, es que no ten¨ªa relaci¨®n siquiera con sus ministros, s¨®lo con Rato. Son circunstancias que no re¨²nen los requisitos de una democracia formal. Zapatero no es prepotente, tiene capacidad de o¨ªr y, atendiendo a nuestra lealtad, tuvo una actitud de mucha consideraci¨®n con el Bloque. Fue un reconocimiento mutuo, probablemente Zapatero tendr¨¢ muy presente la conducta mod¨¦lica del BNG.
P. Llegan otras elecciones generales muy bipolarizadas. ?Qu¨¦ expectativas tiene el BNG?
R. Es cierto. Hay una gran bipolarizaci¨®n, cada vez las campa?as son m¨¢s medi¨¢ticas, una evoluci¨®n preocupante que enfoca la dial¨¦ctica como una lucha entre PP y PSOE. Para el BNG la campa?a, siendo importante, es residual. Un segmento de la poblaci¨®n sabe que el BNG hizo su papel, hay que apuntalar esa posici¨®n y recordar que Galicia no puede permitirse el lujo de no tener cada vez m¨¢s peso pol¨ªtico. Hay que hacer una campa?a incidiendo en las bases. 30.000 votos arriba o abajo no son indiferentes. El BNG aumentar¨¢ sus votos de manera clara y reforzar¨¢ posiciones en el Congreso. En estas circunstancias no ser¨ªa un mal resultado pero no me atrevo con el n¨²mero de diputados.
P. El BNG ans¨ªa un escenario sin mayor¨ªas. Lo reclama Quintana con una cierta ambig¨¹edad como si el Bloque pudiera pactar a derecha e izquierda. ?Contempla acuerdos con el PP?
R. No. Es inviable por la posici¨®n del PP, un partido involucionista desde el punto de vista democr¨¢tico, de un antinacionalismo visceral y un espa?olismo que no es el de la unidad de Espa?a entre iguales, sino concebido en lo peor de los t¨¦rminos tradicionales e hist¨®ricos.
P. ?Por la actitud del PP o la convicci¨®n del Bloque?
R. Con este PP nunca nos plantear¨ªamos pactar. Ahora, con un hipot¨¦tico partido conservador, tolerante con el nacionalismo, no habr¨ªa problema para pactos puntuales que no para acuerdos estables. Esta circunstancia no se da en el Estado espa?ol. La gente debe saber que los presidentes no se eligen en las elecciones sino en el Parlamento. Ah¨ª ser¨¢ la mayor¨ªa la que vote a los candidatos. Para el BNG s¨®lo hay una opci¨®n [Zapatero], de ser necesario el voto, siempre que haya di¨¢logo y sin un pacto de Estado para poder actuar con libertad. Ser¨ªa absurdo subordinar el BNG a un partido en el Gobierno.
P. ? Cree que Quintana se juega mucho el 9-M?
R. No creo en una concepci¨®n de los partidos subordinada ¨²nicamente a resultados electorales. Ahora, no es lo mismo para el BNG quedar estancado que avanzar, dentro del contexto en que estamos. Hay que subir en votos, esa posibilidad existe. El electorado no puede estar desenga?ado con el papel del BNG en el Congreso, una opci¨®n pol¨ªtica gallega que ha contribuido a una mayor democratizaci¨®n en el Estado y porque este pa¨ªs necesita que miren por ¨¦l.
P. El electorado valorar¨¢ adem¨¢s el papel del BNG en la Xunta. ?Cu¨¢l es su opini¨®n?
R. Hizo cosas muy positivas y otras que hay que rectificar.
P. ?Como cu¨¢les?
R. Algunas importantes, relacionadas con la concepci¨®n democr¨¢tica que debe tener el Gobierno y otras para gestionar mejor las conseller¨ªas que prefiero no concretar. Algunas se podr¨¢n rectificar en esta legislatura como el nombramiento del director general de CRTVG, otras son inasumibles. El BNG opera pol¨ªticas con aspectos muy positivos pero quiz¨¢s el ritmo de cambio en muchos casos deber¨ªa haber sido m¨¢s acelerado o con mayor impacto social.
P. Una de las rectificaciones ha sido el relevo del Secretario de Relaciones Institucionales, Antonio Losada. ?El cambio en Vicepresidencia fue para mejor?
R. Evidentemente. Con los respetos que merece todo el mundo, los cambios fueron muy positivos. Todo el mundo tiene virtudes, pero la reorganizaci¨®n y que ahora haya secretar¨ªas especializadas y m¨¢s preocupadas por la gesti¨®n, es muy positivo.
P. ?Ese ritmo de cambio mayor no se est¨¢ dando en las ¨¢reas del BNG ni en las del PSOE?
R. Hubo cambios espectaculares en Medio Rural, de cierta entidad en Benestar y hay un intento en Industria que tropieza con una animosidad tremenda del PSOE en el Gobierno espa?ol y tambi¨¦n aqu¨ª, que merma su capacidad. Las gestiones en Cultura est¨¢n condicionadas por la Cidade da Cultura, un peso muerto que hasta que se vea su uso y sus contenidos, da derecho a determinados juicios.
P. ?El cambio prometido despu¨¦s de Fraga, sigue esperando?
R. En algunas cosas, evidentemente, s¨ª. Lleva m¨¢s retraso el PSOE, pero eso no me gratifica.
P. ?Es desleal el PSOE?
R. No es un problema de ser leal con el BNG, sino de deslealtad con Galicia. Ser¨ªa mejor competir por ver qui¨¦n sirve m¨¢s al pa¨ªs. No tiene sentido parar lo que beneficia a Galicia. Sigue habiendo cierta distorsi¨®n, un acompa?amiento insuficiente.
P. ?Esas fricciones en el bipartito tienen s¨®lo que ver con la actitud del PSOE?
R. Las que trascienden son menos importantes, es m¨¢s grave la obstrucci¨®n a la transferencia de competencias que est¨¢n en el Estatuto. O boicotear otras cuestiones desde un ministerio. La leg¨ªtima preocupaci¨®n para ocupar protagonismo es comprensible, oponerse a cuestiones buenas para Galicia no tiene sentido, sobre todo cuando el PSOE tiene el plus presidencial.
P. ?A partir de ahora, a qu¨¦ se dedicar¨¢ ? ?Se ve en el bipartito?
R. No, para nada. En la primera l¨ªnea pol¨ªtica hay muchas funciones: desde el seguimiento de la marcha org¨¢nica del partido, a la formaci¨®n de los cargos m¨¢s relevantes del BNG. Tambi¨¦n puedo participar en la cultura nacional desde distintos campos. Seguir¨¦ en primera fila desde otro papel.
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