La desaceleraci¨®n como oportunidad
Euskadi se enfrenta a las turbulencias de la econom¨ªa mundial con una industria s¨®lida y unas cuentas p¨²blicas que permiten enfrentarse a las incertidumbres
En econom¨ªa solamente se puede constatar al 100% el pasado. El futuro es un libro abierto en el que las predicciones no son otra cosa que eso, intentos de adivinar o avanzar el futuro con mayor o menor fortuna. Los indicadores de la econom¨ªa vasca al cierre de 2007 son claramente peores que los de un a?o antes. Los datos sencillamente constatan que Euskadi no est¨¢ en crisis, para lo que hace falta una reducci¨®n del Producto Interior Bruto (PIB), sino que se enfrenta a una desaceleraci¨®n (un menor crecimiento del PIB). La situaci¨®n es bastante similar a la de los pa¨ªses y comunidades aut¨®nomas del entorno. Pero Euskadi tiene sus particularidades propias. Los expertos aseguran que la econom¨ªa vasca est¨¢ sujeta en pilares fuertes, con una industria s¨®lida, y que debe mirar el frenazo econ¨®mico como una oportunidad.
La industria debe ser el ancla sobre la que se apoye el desarrollo
La competitividad supone un riesgo mayor que las hipotecas 'subprime'
Es necesario cambiar un modelo con un peso excesivo de la construcci¨®n
"Sab¨ªamos que hab¨ªa que cambiar el modelo de crecimiento. Ya se ve¨ªa que iba haber un exceso de oferta en la construcci¨®n que no iba a verse acompa?ada por la demanda. Se ha adelantado y ahora hay que buscar un equilibrio entre sectores. Se necesita tiempo y pol¨ªticas activas. No es sostenible mantener un modelo bas¨¢ndose en un sector voraz como la construcci¨®n", se?ala Mari Carmen Gallastegi, catedr¨¢tica de Econom¨ªa de la UPV.
Los dos elementos en los que se sustenta el descenso en el ritmo de crecimiento en Euskadi son similares al resto de Espa?a: la crisis financiera provocada por las hipotecas subprime en EE UU y la saturaci¨®n del mercado inmobiliario. A los dos hay que sumarles un tercero, la incertidumbre, la percepci¨®n de los consumidores y las empresas sobre c¨®mo est¨¢ la econom¨ªa vasca.
La crisis de las hipotecas de alto riesgo en EE UU ha tenido como primer efecto directo un problema de liquidez en los mercados y, como segundo, una volatilidad "desmesurada" (vaivenes de alzas y bajas) de las bolsas. Si existe alg¨²n mercado globalizado en el mundo es el del capital. Las alzas y bajas de las bolsas se transmiten y circulan por el mundo en tiempo real. A esta crisis de liquidez, que la Reserva Federal de EE UU hace frente con rebajas de tipos de inter¨¦s, hay que sumar en Euskadi, y en el conjunto de Espa?a, el par¨®n del mercado inmobiliario por saturaci¨®n. La construcci¨®n se hab¨ªa convertido en el motor de un crecimiento econ¨®mico muy superior a la media europea, que rozaba el 4%. El objetivo, como se?ala Gallastegi, es hacer del par¨®n "una oportunidad" para transformar el modelo.
"La gran diferencia entre lo que pasa en EE UU y en Europa y, por tanto, en Euskadi es que nuestra econom¨ªa tiene margen para recuperarse. Gallastegi recuerda que durante a?os, especialmente por las exigencias de austeridad para acceder a la moneda ¨²nica, el euro, los gobiernos han hecho un esfuerzo muy importante para sanear las cuentas p¨²blicas y se han sucedido a?os con super¨¢vit presupuestarios. "La econom¨ªa vasca tiene una gran base industrial que no est¨¢ muy afectada por la crisis de EE UU. No hay una crisis de oferta, ni de obsolescencia tecnol¨®gica, ni de costes de las materias primas. Es distinto. Hay que preocuparse de que la demanda no se frene por la construcci¨®n y apoyar al sector industrial", se?ala Gallastegi.
Aunque la econom¨ªa no es una ciencia como las matem¨¢ticas, pese a que las utiliza, y se encuadra dentro de las humanidades, existe una cierta coincidencia en las predicciones y en los an¨¢lisis en que la industria y el sector p¨²blico pueden ser dos de las claves en las que se debe sustentar la oportunidad que representa para Euskadi la desaceleraci¨®n econ¨®mica.
El pron¨®stico dice que Euskadi crecer¨¢ en 2008, un 3,4%, medio punto porcentual menos que el a?o pasado. Si la proyecci¨®n se cumple, las cosas ir¨¢n francamente bien. Hace menos de un mes, el 28 de diciembre, el secretario general de Confebask, Jos¨¦ Guillermo Zub¨ªa, solamente hablaba de "incertidumbre" y de par¨®n en la construcci¨®n. Sus estimaciones de crecimiento econ¨®mico para este a?o eran de un 3,1%, similares a las de 2001 ¨® 2002. Auguraba un buen ritmo de inversi¨®n, superiores en un 6% a las del pasado ejercicio, y apostaba por la industria, con crecimientos del 3,9%.
Un mes despu¨¦s Confebask no quiere hablar. Se mantiene a la espera por la "incertidumbre" y recuerda los pron¨®sticos de diciembre. Entonces su mayor preocupaci¨®n era la competitividad. El presidente de Mondrag¨®n Corporaci¨®n Cooperativa (MCC), Jos¨¦ Mar¨ªa Aldecoa, coincide plenamente. El problema de las empresas en Espa?a est¨¢ en mantener su competitividad. La previsi¨®n de inflaci¨®n de un 3,7% para 2008, muy por encima de la media de los pa¨ªses que forman parte del euro (3,4%) y ligeramente superior a la espa?ola, juega a la contra.
La receta para luchar contra este mal es la innovaci¨®n. Aldecoa coincide as¨ª con expertos y empresarios: hay que apostar por el sector industrial y hay que innovar, hacer un esfuerzo en la tan manida I+D+i (investigaci¨®n, desarrollo e innovaci¨®n). Euskadi debe apostar de forma definitiva por productos que generen mayor valor a?adido y por relaciones de cooperaci¨®n, que seg¨²n el esquema de Aldecoa permitan cooperar a dos partes distintas para lograr un beneficio com¨²n. El presidente del grupo cooperativo anima a buscar estas relaciones dentro o fuera de Euskadi.
Aldecoa pronostica que en 2011 Espa?a recuperar¨¢ los crecimientos por encima del 2% si se aplica esta receta. "Necesitamos de alguien que tire para remontar el par¨®n de la construcci¨®n", dice Gallastegi apuntando a la industria.
"Aunque el escenario internacional est¨¢ dominado por la incertidumbre y la crisis financiera, los avances registrados durante los trece ¨²ltimos a?os de crecimiento ininterrumpido de la econom¨ªa vasca nos permiten contar con una posici¨®n mucho m¨¢s s¨®lida para sortear las consecuencias de una crisis que, aunque de origen lejano, no nos es ajena del todo", se?ala un portavoz de la direcci¨®n de BBK, la entidad financiera con m¨¢s presencia en Euskadi.
Pese a todo, el par¨®n de la construcci¨®n tendr¨¢ su primer reflejo en el paro. Todos est¨¢n de acuerdo que el ritmo de creaci¨®n de empleo va a caer, pero la tasa actual, entorno a un 3,3%, seg¨²n los datos del Eustat, no se prev¨¦ que aumente mucho. El ¨²ltimo mes del pasado a?o aument¨® tan solo en 150 personas el paro registrado en el Inem. Lo ideal es que la industria se convierta en el contrapeso en la generaci¨®n de empleo. "Evitar un ajuste de empleo", en palabras de Gallastegi.
La buena salud de las cuentas p¨²blicas hace que un ligero repunte del paro no sea un problema y se pueda aguantar mientras se aprovecha para reequilibrar los sectores productivos como se viene predicando desde hace a?os. Dejar un sector de la construcci¨®n acorde con el tama?o de Euskadi y pensar en un crecimiento que, adem¨¢s, se plantea el modelo de desarrollo y ordenaci¨®n del territorio que se desea. Est¨¦, bien basado en el ladrillo y el hormig¨®n o bien equilibrado y que respete el medioambiente.
"Las fortalezas adquiridas durante los a?os anteriores, si bien no nos inmunizan frente a la crisis, nos sit¨²an en una posici¨®n s¨®lida para sortearla", se?alan desde la BBK, aunque advierten de la necesidad de evitar la autocomplacencia y advierten, como todos, sobre la necesidad de mantener una "competitividad, basada en la innovaci¨®n y en la internacionalizaci¨®n" para sostener los niveles de renta y empleo.
El propio Gobierno vasco coincide en el an¨¢lisis. I?aki Berestiain, director de Econom¨ªa, dice que la Industria se ver¨¢ menos afectada y su jefa, la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, se?ala que hay que estar "atentos" pero "sin alarmas" por una crisis que, a su entender, no afecta a la econom¨ªa real.
El miedo al d¨¦ficit presupuestario
Los ¨²ltimos a?os ser un gestor p¨²blico ortodoxo exig¨ªa cerrar el a?o con super¨¢vit presupuestario. Los ¨²nicos que ped¨ªan un peque?o d¨¦ficit para aumentar las coberturas sociales eran los sindicatos. No estaba bien visto. Euskadi ha sido campe¨®n en ortodoxia. Lo fue el ex presidente Bill Clinton en EE UU y no lo ha sido su sucesor, George Bush, que dejar¨¢ a su heredero una econom¨ªa lastrada por los gastos de guerra y en una muy probable recesi¨®n.
La virtud de la gesti¨®n ortodoxa de la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, descansa en que ha cumplido una de las premisas b¨¢sicas de cualquier econom¨ªa familiar: ahorrar en tiempos de bonanza. Lo que no se sabe es si tiene intenci¨®n de utilizar este dinerito para hacer frente a las turbulencias.
Mari Carmen Gallastegi, catedr¨¢tica de Econom¨ªa de la UPV, asegura que existe margen para implantar est¨ªmulos fiscales: "Si queremos innovaci¨®n e investigaci¨®n hay que hacerlo. A m¨ª no me da miedo el d¨¦ficit si es temporal". La tesis de la catedr¨¢tica es que la pol¨ªtica fiscal debe jugar con el ciclo y no debe asustar gastar m¨¢s de lo que se ingresa. La pol¨ªtica fiscal es la ¨²nica que queda en manos de los gobiernos despu¨¦s de que la monetaria pasara a estar bajo control del Banco Central Europeo. "Hay que ser inteligente y utilizar los instrumentos que se tienen cuando hacen falta", se?ala Gallastegi antes de recordar que entre lo importante est¨¢ el crecimiento, la sostenibilidad, los elementos redistributivos de la riqueza, la calidad de vida y el medioambiente
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