"El mercado ha cambiado la naturaleza del artista"
Conversar con Jannis Kounellis (El Pireo, 1936) no es un ejercicio sencillo porque al artista que fue uno de los nombres emblem¨¢ticos del arte povera le gusta lanzar mensajes en diferentes direcciones sin conexi¨®n aparente. Sin embargo, sus ideas son muy v¨¢lidas para explicar lo que sucede actualmente en el arte contempor¨¢neo y cu¨¢les son los desaf¨ªos a los que debe enfrentarse el artista en un nuevo mundo dominado por la tecnolog¨ªa. Pese a que las nuevas obras que presenta en la Fundaci¨®n Caixa Galicia de Santiago de Compostela pueden sorprender por contener elementos in¨¦ditos en su trayectoria, Kounellis se?ala que en el fondo sigue movi¨¦ndose por la misma motivaci¨®n que en sus primeros tiempos. Mesas viejas, clavos, telas o paneles de acero son algunos de los elementos que utiliza en sus nuevas piezas, que siguen manteniendo la esencia po¨¦tica que caracteriza a la mayor¨ªa de sus trabajos.
"Lo universal no existe en el arte, s¨®lo existe en la Bolsa. Hay que partir de un lenguaje para encontrar a los dem¨¢s porque si no se crea una realidad fantasmag¨®rica"
PREGUNTA. ?Cree que el arte est¨¢ perdiendo su capacidad para emocionar pese a que cada vez es m¨¢s accesible a la gente?
RESPUESTA. El espacio donde se presenta la obra de arte es muy importante. Recuerdo cuando viv¨ªa en Alemania y junto a mis compa?eros de generaci¨®n aprovechamos cualquier lugar para organizar una exposici¨®n. Se trataba no s¨®lo de exponer all¨ª nuestros trabajos, sino tambi¨¦n de crearlos en el mismo lugar donde iban a presentarse. En los a?os setenta, en Roma, llegamos a organizar una exposici¨®n en la habitaci¨®n de un hotel. Los grandes espacios ofrec¨ªan la posibilidad de ampliar las ideas que uno ten¨ªa a la hora de crear una obra. Una vieja escuela, una antigua f¨¢brica o un hospital pod¨ªan ser lugares muy apropiados para exponer una pieza. Hoy, en cambio, las indicaciones del mercado est¨¢n cambiando la propia fisonom¨ªa del artista. El problema del mercado siempre ha estado presente en el arte pero ahora se ha agudizado porque ha conseguido cambiar la propia naturaleza del artista. La globalizaci¨®n no tiene en cuenta la identidad de cada uno, s¨®lo presta atenci¨®n al producto que se presenta.
P. A lo largo de su larga trayectoria, ?ha cambiado su motivaci¨®n a la hora de enfrentarse a una obra?
R. Al poco tiempo de llegar a Roma realic¨¦ un trabajo en el que tuve a Beckett como inspiraci¨®n y una de mis ¨²ltimas obras tambi¨¦n trata sobre ¨¦l. Esto significa que en lo sustancial nada ha cambiado, lo que s¨ª ocurre es que he precisado el discurso. Empec¨¦ a trabajar en la ¨¦poca posterior a la Segunda Guerra Mundial cuando los l¨ªmites entre los distintos pa¨ªses estaban muy marcados, no como ahora cuando son m¨¢s d¨¦biles. Yo soy hijo de un tiempo en el que no se pod¨ªa viajar a donde quer¨ªas con tanta facilidad como ahora. Hablar de un lenguaje universal es algo abstracto, no implica a los dem¨¢s. Lo universal no existe en el arte, s¨®lo existe en la Bolsa. Cada artista est¨¢ condicionado por el lenguaje y las peculiaridades de su pa¨ªs de origen y hay que partir de un lenguaje para encontrar a los dem¨¢s porque si no se crea una realidad fantasmag¨®rica. No se consigue nada si pintamos un cuadro en Irlanda y lo exponemos en China, en un contexto totalmente ajeno al que fue creado. En Europa no tenemos derecho a olvidar nuestra tradici¨®n art¨ªstica. ?C¨®mo vamos a olvidar el Renacimiento!
P. Las nuevas tecnolog¨ªas est¨¢n muy presentes en el arte actual. ?Hay peligro de que acaben destruyendo la esencia del objeto art¨ªstico?
R. La tecnolog¨ªa es un medio que unas veces puede introducirse en el trabajo del artista y otras no. No todo puede pasar por el ordenador, s¨®lo ciertas cosas. Para m¨ª el peso es el inicio de un discurso y la polarizaci¨®n de un espacio. Un kilo de carb¨®n es el inicio de la polarizaci¨®n de un espacio y este peso me permite avanzar en lo que para m¨ª se ha convertido en una obsesi¨®n por ser libre. Le pongo otro ejemplo, el cuadro de Picasso Las se?oritas de Avi?¨®n y la fragmentaci¨®n de las figuras que contiene. Me interesa mucho m¨¢s la hip¨®tesis que se desprende de este cuadro que el totalitarismo que nos ofrece la televisi¨®n. De todas formas, es dif¨ªcil saber cu¨¢ndo nace realmente la modernidad, ?fue con la Contrarreforma o con la Ilustraci¨®n?
P. Usted siempre se ha definido como un pintor, aunque la mayor¨ªa de sus obras se alejan de la concepci¨®n cl¨¢sica de la pintura. ?Le interesa el debate sobre la supervivencia o muerte de la pintura?
R. La pintura es una naturaleza, es una l¨®gica. Hay pintores decorativos que pintan muy bien pero no me puedo identificar con las obras que hacen; en cambio, artistas como Goya o Caravaggio forman parte naturalmente de mi paisaje mental. La pintura es un concepto muy vasto en el que entran elementos como la teatralidad o la presencia del drama. En resumen, la pintura es un concepto fundamental.
P. ?Ha conseguido la mercantilizaci¨®n del arte enterrar por completo su vertiente pol¨ªtica?
R. El aspecto pol¨ªtico del arte no es necesariamente ilustrativo. El artista no trata de hacer un concepto ilustrativo de una ideolog¨ªa. El dada¨ªsmo o Jasper Johns, por poner dos ejemplos, son pol¨ªticos en ciertos aspectos aunque no se aprecien a primera vista. Para m¨ª la pol¨ªtica en el arte forma parte de la libertad para hacer un cuadro.
P. ?C¨®mo influye el espacio cuando se enfrenta a la realizaci¨®n de una obra?
R. Los artistas renacentistas pintaban en las iglesias, en espacios p¨²blicos, y no es posible olvidar esta tradici¨®n. Por ejemplo, me gusta el espacio donde presento mi obra aqu¨ª en Santiago de Compostela porque se trata de una ciudad y un edificio con un ambiente muy particular. El inmueble alberga un antiguo pozo y eso es un elemento importante a la hora de realizar las obras. Es fundamental que en las piezas se perciba el peso del lugar en el que est¨¢n colocadas. Hay que adaptarse a las condiciones del lugar en el que vas a realizar el trabajo y ser capaz de crear un espacio para tu obra. -
Jannis Kounellis. Fundaci¨®n Caixa Galicia. Vilar, 19. Santiago de Compostela (A Coru?a). Hasta el 6 de abril. Galer¨ªa Carles Tach¨¦. Consell de Cent, 290. Barcelona. Hasta el 6 de abril.
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