La ciencia declara heredera a la hija de la criada

Que la realidad supera a la ficci¨®n es un hecho. Y la historia de una mujer argentina que ha visto cambiada su vida gracias a una prueba de ADN es la en¨¦sima confirmaci¨®n en un relato en el que hay hasta robo de cad¨¢veres de por medio. Y es que Eva Paole, de 70 a?os, que hasta el viernes habitaba en una humilde casa en La Pampa (Argentina), sobreviviendo con una pensi¨®n de poco m¨¢s de 170 euros al mes, ha podido demostrar que en realidad es el fruto de la relaci¨®n prohibida entre un rico hacendado casado y su criada. Como resultado de ello heredar¨¢ la cifra de 40 millones de d¨®lares (27 millones de euros).

Cuando se abri¨® el ata¨²d se descubri¨® un cuerpo desnudo con cicatrices

De peque?a, Paole nunca se cuestion¨® por qu¨¦ disfrutaba de un buen trato en su entorno. Ella viv¨ªa con sus padres y luego creci¨®, se cas¨® y tuvo hijos. De hecho, la muerte en 1983 de Rufino Otero, un rico hacendado de la zona, con 26 campos, dos aviones particulares y unas 5.000 cabezas de ganado, no pas¨® de ser el fallecimiento del antiguo patr¨®n. En 1990 mor¨ªa la esposa de Otero, y dado que el matrimonio no hab¨ªa tenido hijos toda la fortuna familiar pas¨® a un sobrino.

Pero lo que llevaba a?os en la regi¨®n siendo un sordo rumor, pas¨® a ser un secreto a voces y luego ni siquiera un secreto. Los hijos de Paole le contaron a su madre lo que se dec¨ªa y ella entendi¨® entonces porqu¨¦ aquel a quien hab¨ªa cre¨ªdo su padre se neg¨® a que llevara su apellido.

De modo que en agosto de 1999 la mujer acudi¨® a la justicia, que orden¨® realizar una prueba de ADN al cad¨¢ver de Otero. La fortuna estaba entonces en manos de un sobrino de Rufino Otero, quien vio c¨®mo el dinero heredado pod¨ªa esfumarse igual de r¨¢pido que hab¨ªa llegado. Cuando los funcionarios abrieron el ata¨²d hab¨ªa un cuerpo desnudo con cicatrices. Pero Otero hab¨ªa sido enterrado vestido y no se le hab¨ªa practicado la autopsia. En 2004, un pintor que hab¨ªa comentado en su c¨ªrculo que hab¨ªa participado en el cambio de cuerpos cay¨® de un andamio y muri¨®.

La justicia ten¨ªa ahora un cad¨¢ver desaparecido y otro sin identificar. Cuando se logr¨® conocer la identidad del segundo se descubri¨® que en su tumba hab¨ªa otro cuerpo: ?El de Otero? No, el de una mujer desconocida.

El juez decidi¨® entonces buscar en la tumba de la madre del millonario para hacer una prueba de ADN y poder compararlo con el de Paole. En 2007, con buena parte de la fortuna dilapidada, el sobrino falleci¨®, pero hace unos d¨ªas se supo que los an¨¢lisis de ADN demostraban que Paole, la hija de la criada, es la verdadera heredera. ?Qu¨¦ importa la huelga de guionistas de Hollywood?