Todo por 10 millones de votos

Lo llaman el huevo frito y se sirve en La Moncloa todos los lunes por la ma?ana. Se trata de un folio apaisado lleno de cuadr¨ªculas de colores donde, de un solo vistazo, Zapatero y sus ¨ªntimos analizan la semana. El rojo indica un acto del presidente. El azul, una intervenci¨®n de Rajoy. En amarillo aparecen rese?adas las distintas actividades de los ministros, de ah¨ª que sea el color predominante, una mancha amarilla sobre un folio blanco, un huevo frito. Pero, conforme se iba acercando la campa?a, el rojo y el azul se fueron adue?ando del papel. Y, a partir de hoy, ya son los ¨²nicos colores que importan. Rojo contra azul. Zapatero contra Rajoy. De esa guerra sin cuartel, a deg¨¹ello, depender¨¢ qui¨¦n desayune los pr¨®ximos cuatro a?os en La Moncloa.

Rubalcaba es uno de los ¨ªntimos de Zapatero. Ayer por la ma?ana le hicieron una entrevista en televisi¨®n. Un r¨®tulo sobreimpresionado informaba de que estaba en C¨¢diz, donde el titular de Interior encabeza la lista del PSOE. Los periodistas le hac¨ªan preguntas alternativas sobre Rajoy y sobre ETA, y el pol¨ªtico pon¨ªa un gesto u otro, escog¨ªa unas palabras u otras seg¨²n entend¨ªa que las cuestiones afectaban a su faceta de ministro o a la de candidato. Un intento encomiable, pero in¨²til. La campa?a que oficialmente se inicia hoy lleva mucho tiempo en cartelera, y todo, absolutamente todo, desde los indicadores econ¨®micos hasta las redadas de la Guardia Civil, se interpretan desde hace tiempo en clave electoral.

El mejor ejemplo de los ¨²ltimos d¨ªas son los ataques de grupos de estudiantes contra Mar¨ªa San Gil, Dolors Nadal y Rosa D¨ªez. Sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, Rajoy lo atribuy¨® a la oscura mano de Zapatero, la misma que alent¨® el 11-M, la crisis econ¨®mica mundial, los problemas de la familia cristiana, la crispaci¨®n... A este respecto, sin embargo, Zapatero encontr¨® ayer un apoyo inesperado. El fil¨®sofo Fernando Savater, impulsor del partido en que milita Rosa D¨ªez, declar¨® ayer que los ataques a las candidatas antes citadas "no tienen absolutamente nada que ver" con el clima electoral. Y puso un ejemplo: "No est¨¢bamos en periodo electoral ni estaba Mariano Rajoy enfadado y a m¨ª me montaron un n¨²mero exactamente igual al de Mar¨ªa San Gil, con el mismo tipo de carteles, insultos y agresiones a los escoltas". No detall¨® Savater la fecha exacta en que sufri¨® el ataque, pero el servicio de documentaci¨®n de este peri¨®dico lo averigu¨® en 30 segundos: fue el 3 de marzo de 2003, en la universidad de Barcelona. Aznar llevaba siete a?os justos en el poder.

Los ciudadanos saben, no obstante, que los excesos verbales forman parte del espect¨¢culo electoral. Un espect¨¢culo en pos de los 10 millones de votantes, verdadera tierra prometida para unos y para otros. Los de Zapatero y los de Rajoy se saben esas cifras al dedillo. En Espa?a votan 25 millones de personas. Y el PSOE y el PP se reparten 20 millones de esos votos. As¨ª que el que supere el list¨®n de los 10 millones podr¨¢ formar gobierno. El PSOE est¨¢ convencido de que para que Zapatero siga en La Moncloa la participaci¨®n debe superar el 71% (en 2004 fue del 75%). Los socialistas se lanzaron ayer en tromba contra la abstenci¨®n.

Si en algo coinciden socialistas y populares es en utilizar cualquier recurso para atraer la atenci¨®n de las c¨¢maras. Desde las nuevas tecnolog¨ªas -v¨ªdeos colgados en YouTube, webs que permiten darse un paseo por el despacho de Rajoy- hasta los m¨¦todos tradicionales. Ya se ha visto a Zapatero practicando el viejo arte de besar ni?os, a Rajoy delante de un muestrario de morcones ante el delirio de los suyos o a Pizarro visitando -tal vez por primera vez en su vida- un mercado de fruta. Visita que sirvi¨® a Solbes para meterse con ¨¦l: "Fue al mercado... y compr¨® cerezas fuera de temporada. ?A 20 euros el kilo!". El ministro de Econom¨ªa, tan alica¨ªdo en los ¨²ltimos tiempos por culpa de un ojo a la virul¨¦ y de los indicadores econ¨®micos, tuvo ayer sin embargo un respiro. Mientras se preparaba el debate con Pizarro se conoci¨® que el super¨¢vit de 2007 fue el 2,23% del PIB, el mayor de la democracia. Y tambi¨¦n ayer se supo que Pizarro y los suyos cobraron de Endesa 22 millones de euros de indemnizaci¨®n. Eso s¨ª, si el PP gana, Espa?a podr¨¢ presumir de tener el ministro m¨¢s rico de Europa.