Sanidade proyecta prohibir por ley el consumo de alcohol en la calle

Ley seca para combatir el botell¨®n. La Xunta pretende que Galicia se una a otras comunidades aut¨®nomas como Valencia, Madrid o Catalu?a y proh¨ªba por ley beber alcohol en la calle. La Conseller¨ªa de Sanidade propone introducir esta medida en la nueva Lei de Prevenci¨®n, Asistencia e Inserci¨®n en Materia de Drogodependencias con el prop¨®sito de erradicar la creciente costumbre de los j¨®venes de reunirse en plazas y parques para tomar copas.

La prohibici¨®n dejar¨ªa a salvo otras fiestas s¨ª aceptadas entre los adultos, ya que los ayuntamientos podr¨ªan aprobar excepciones para no poner en peligro los festejos patronales o eventos como las ferias de vinos. "Lo que se pretende es prohibir el consumo indiscriminado en la v¨ªa p¨²blica como norma general, dejando al criterio de los ayuntamientos, que tienen la competencia sobre el dominio p¨²blico de su territorio, hacer excepciones", explic¨® ayer el subdirector general de Drogodependencias de la Xunta, V¨ªctor Pedreira, en declaraciones a Radio Galega.

La conseller¨ªa ha celebrado ya una veintena de reuniones con diferentes administraciones y colectivos para presentarles su propuesta. El texto definitivo que regular¨¢ la prohibici¨®n del consumo de alcohol en la calle a¨²n no se ha concretado, asegura Sanidade, aunque los responsables de la Federaci¨®n de Municipios e Provincias (Fegamp) ya han tenido acceso a algunas versiones. Su presidente, el socialista Carlos Fern¨¢ndez, adelanta que la medida no le disgusta, aunque la organizaci¨®n que representa a los gobiernos locales no tomar¨¢ un posicionamiento oficial hasta que el anteproyecto de ley no est¨¦ redactado. "La primera lectura es positiva", avanza Fern¨¢ndez.

La celebraci¨®n de botellones cada semana se ha convertido en un quebradero de cabeza para los alcaldes por la presi¨®n de los vecinos y hosteleros. Los primeros est¨¢n hartos del ruido, la basura y los destrozos que generan estas reuniones festivas. Los segundos se desesperan ante la cantidad de dinero que dejan de ingresar. "Estamos en contra del botell¨®n porque nadie saca beneficio, ni quienes lo consumen, porque afecta a su salud, ni quienes lo distribuyen. Y perjudica a algunos, como vecinos y hosteleros", se?ala Miguel L¨®pez Crespo, de la Uni¨®n de Consumidores de Galicia.

L¨®pez Crespo, que es miembro del Consello Galego de Sa¨²de, un ¨®rgano asesor de la conseller¨ªa, apoya la propuesta de prohibir por ley el consumo de alcohol en la calle, aunque advierte de los problemas que puede traer su aplicaci¨®n. "Lo que a¨²n no sabemos es a qui¨¦n le corresponder¨ªa su aplicaci¨®n a nivel local", apunta el portavoz de los consumidores. "El mayor problema es la ejecuci¨®n y el control".

Este miembro del consejo asesor de Sanidade lamenta que "muchas leyes no se cumplen" y reclama que, si la medida sale finalmente adelante, la Administraci¨®n garantice los medios para que se aplique.

El presidente de la Fegamp afirma que los alcaldes a los que ha consultado no consideran la prohibici¨®n generalizada del alcohol en la calle una "f¨®rmula lesiva". "Ya rige en muchos pa¨ªses europeos, en los que tambi¨¦n se hacen excepciones seg¨²n las tradiciones y fiestas", explica Fern¨¢ndez, quien cree que "ayudar¨¢ a regular el botell¨®n en sus aspectos de orden p¨²blico y convivencia". "En esta pol¨¦mica se necesitaban medidas legislativas".

El tambi¨¦n regidor socialista de Ames aprovecha para alabar a Sanidade, en manos de su partido, por consultar la aplicaci¨®n de la medida y subraya que respeta "la autonom¨ªa local". "S¨®lo nos sentimos molestos cuando toman decisiones sobre nuestra competencia", remacha Fern¨¢ndez apuntando, sin decirlo, hacia el BNG. Desde que tom¨® posesi¨®n hace tres meses ha tenido varios conflictos con las conseller¨ªas que esta fuerza controla.