El toro del futuro es del pasado
Los ganaderos abrazan la clonaci¨®n de reses de lidia aunque los genetistas dudan de su utilidad - La r¨¦plica tiene permiso de EE UU pero no de Espa?a
Victoriano del R¨ªo se enciende al hablar de sus mejores toros. "Mira c¨®mo Cantap¨¢jaros buscaba la muleta de El Juli en Las Ventas. El toro humillaba y embest¨ªa pero no s¨®lo al principio, sino hasta el final del pase".
La ganader¨ªa teme la chifla del p¨²blico cuando un toro suyo caiga por el ruedo
"La clonaci¨®n no mejora la especie. La raza no avanza", dice un catedr¨¢tico
Victoriano -chaqueta verde, corbata de toros estampados y boina para la lluvia- recorre su finca en Guadalix de la Sierra (Madrid). Con su todoterreno, sortea las encinas y las vacas hasta llegar a Alcalde, el semental del que ha encargado un clon en la empresa estadounidense Viagen. "Alcalde tiene 16 a?os, es muy mayor. Es el padre de al menos 20 toros de puerta grande. El Juli tiene dos cabezas en su casa de dos de sus hijos, Cantap¨¢jaros y Desv¨¢n. No hay otro as¨ª, por eso queremos clonarlo". Alcalde, de unos 450 kilos, negro, camina cansino entre las 40 vacas y terneros que componen su lote. Uno se puede acercar lentamente pero no cortarle el paso ni hacer movimientos bruscos.
Victoriano gan¨® dinero con la miner¨ªa y tambi¨¦n se dedica a la promoci¨®n inmobiliaria. Pero su pasi¨®n es su ganader¨ªa, de la que podr¨ªa hablar sin parar. ?l es la sexta generaci¨®n que la lleva. "Esos de all¨ª" -se?ala a un grupo de astados a pocos metros del periodista y sin barrera de separaci¨®n- "probablemente los lidiar¨¢ Jos¨¦ Tom¨¢s en Las Ventas el 4 de junio en pago por visi¨®n". Los toros tienen los pitones cubiertos por fundas de fibra de vidrio para evitar que se hieran o se les rompan.
La fibra de vidrio resume la filosof¨ªa de la ganader¨ªa. "La buena suerte no existe. Existe el cuidado pormenorizado de todos los detalles. Por eso apostamos por la investigaci¨®n. S¨¦ que el clon no tiene por qu¨¦ ser id¨¦ntico a Alcalde pero merece la pena intentarlo. Los m¨¢s de 30.000 euros que pagar¨¦ merecen la pena. Me garantizan la misma carga gen¨¦tica pero no que el semen, la bravura o el comportamiento sea igual".
Otro ganadero, Francisco L¨®pez Rubio, ha encargado otras r¨¦plicas: "Queremos clonar un semental y una vaca, Clavillera, que tiene 14 a?os y todas las temporadas ha dado muy buenos ejemplares". L¨®pez Rubio gestiona los pedidos de otros dos empresarios. As¨ª que cuatro ganaderos espa?oles ultiman clones de sus mejores reses. Otro quiere clonar caballos de rejones, seg¨²n Viagen.
Los ganaderos, al menos los m¨¢s vanguardistas, han abrazado esta t¨¦cnica pero temen que en un mundo tan tradicional la jugada les salga mal. Victoriano sabe que la pr¨®xima vez que un toro suyo ruede por Las Ventas sin motivo, la chifla del tendido 7 puede resonar en Pernambuco: "Hay quien que se lo puede tomar as¨ª y mucha gente nos ha llamado para decirnos que estamos acabando con la tradici¨®n. Pero pasar¨¢". El ganadero apunta que El Juli se ha felicitado por la clonaci¨®n del padre de toros que le han dado tardes de gloria.
Pero Victoriano es un convencido de la tecnolog¨ªa. En 1989 pag¨® 100.000 pesetas por cada muestra del esperma de un semental de vaca lechera y en pocos a?os sus vacas produc¨ªan 30 litros diarios (la media era de 23). En 1997, al conocer la clonaci¨®n de Dolly, pidi¨® precio para clonar a Aldeano, padre de Alcalde. Le pidieron 150 millones de pesetas y lo dej¨® correr.
El pr¨®ximo 10 de marzo, Jos¨¦ C¨®rdoba, veterinario de Viagen, tomar¨¢ muestras de tejido de Alcalde en la finca de Victoriano y las llevar¨¢ a EE UU. El departamento de Agricultura de EE UU ha autorizado la importaci¨®n del tejido. Los cient¨ªficos extraer¨¢n el n¨²cleo de una de esas c¨¦lulas y lo inyectar¨¢n en el ¨®vulo de una vaca al que previamente le han quitado su ADN. As¨ª formar¨¢n un embri¨®n con la misma carga gen¨¦tica que el padre. En unos meses, la empresa enviar¨¢ estos embriones de vuelta a Madrid para implantarlos en vacas. En marzo de 2009 deben nacer los clones.
El ganadero afirma que no ha pedido permiso al Gobierno espa?ol porque no lo necesita, ya que importar¨¢ un embri¨®n normal. La Ley de organismos modificados gen¨¦ticamente de 2003 afirma que el Gobierno debe autorizar la importaci¨®n de "cualquier organismo cuyo material gen¨¦tico ha sido modificado de una manera que no se produce de forma natural". Aunque la ley est¨¢ pensada para las plantas transg¨¦nicas, esta definici¨®n afectar¨ªa tambi¨¦n al clon de Alcalde. El Ministerio de Agricultura no respondi¨® el viernes pasado si conoce el ensayo y si lo ha autorizado.
Al margen de la burocracia, los expertos tampoco ven clara la apuesta. Javier Ca?¨®n, catedr¨¢tico de Gen¨¦tica y experto en la lidia, duda de la utilidad: "La clonaci¨®n no mejora la especie. As¨ª la raza no avanza". Adem¨¢s, duda de los cruces de la ganader¨ªa, ya que en 16 a?os no ha conseguido mejorar a Alcalde. Ca?¨®n prosigue: "Si es cuesti¨®n de publicidad o sentimental, no tengo nada que decir, pero como inversi¨®n ser¨ªa m¨¢s rentable la inseminaci¨®n artificial". En el mismo sentido se expresan otros veterinarios consultados.
A Victoriano las cr¨ªticas no le arredran. Muestra la libreta de su ganader¨ªa, uno de los tesoros mejor guardados de cada criador. En ella, escrito a mano, aparece el n¨²mero de cada toro, su madre, el origen de ¨¦sta, su padre y el mes de nacimiento. El resultado es una matr¨ªcula que s¨®lo los expertos pueden leer. 61Alcalde196J867. Cuando en marzo de 2009 nazca el clon recibir¨¢ una matr¨ªcula id¨¦ntica. Como su c¨®digo gen¨¦tico. Alcalde habr¨¢ vuelto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.