50.000 cazadores contra Narbona

A la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, le debieron de pitar los o¨ªdos. Los 50.000 cazadores y agricultores que se manifestaron ayer en Madrid no jalearon al PP ni criticaron al PSOE. Pero no escatimaron cr¨ªticas a la ministra. La acusan de estar vendida a "talibanes del ecologismo" y de limitar la caza con la Ley de Patrimonio Natural que se aprob¨® en diciembre. El presidente de la Federaci¨®n de Caza, Andr¨¦s Guti¨¦rrez, resumi¨®: "Es imprescindible que se vaya Narbona, que no tiene ni idea, que nos ha ninguneado y se ha cachondeado de nosotros. Si gana el PSOE, no la queremos de ministra". A mediod¨ªa, la marcha arrancaba desde el Santiago Bernab¨¦u hacia el Ministerio de Medio Ambiente. La Federaci¨®n Espa?ola de Caza y el sindicato agrario Asaja (junto a otras 40 asociaciones) hab¨ªan movilizado cientos de autobuses para hacer una demostraci¨®n de fuerza.

El halconero mayor del reino defendi¨® el valor ecol¨®gico de la caza

Acusan a la ministra de estar en manos de ecologistas "talibanes"

Hab¨ªa cazadores con pelo engominado, jersey al hombro, gorra campera y gafas de sol de marca, pero tambi¨¦n gente de campo, trabajadores de los cotos y humildes aficionados a la caza menor. Algunos, como Jes¨²s Pozuelo, iban con su perro: "Se llama Kun, por el Kun Ag¨¹ero y es el mejor para cazar conejos". La marcha junt¨® galgueros, rehaleros, partidarios de la contrapasa (una modalidad de caza de palomas), halconeros... Un coche lanzaba consignas: "Narbona nos quiere dar perdices de goma" o "Narbona, no nos acojonas".

Los motivos de la protesta son difusos, pero el detonante ha sido la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad, aprobada tras dos a?os de tramitaci¨®n sin protestas p¨²blicas. "Es una ley intervencionista que supone la tutela de la caza por la Administraci¨®n", asegur¨® Antonio de Castro, halconero mayor del reino. "Lo importante de esta manifestaci¨®n es demostrar que los cazadores estamos unidos, que la caza es natural, que no deteriora el medio ambiente, que ayuda a conservarlo".

Los convocantes cifraron en 700.000 los asistentes, algo imposible. Antes de los discursos, el periodista Antonio P¨¦rez Henares proclam¨®: "Me dicen que a¨²n hay gente saliendo del Bernab¨¦u". No era as¨ª. Una hora antes, la marcha ya hab¨ªa superado el estadio y cubr¨ªa unos 800 metros de Castellana, lo que supone unos 25.000 metros cuadrados. A dos manifestantes por metro (hab¨ªa zonas apretadas y grandes claros), podr¨ªa haber unas 50.000 personas. El c¨¢lculo coincide con la cifra que dio la Polic¨ªa Nacional y supone, en cualquier caso, una marcha muy numerosa.

La protesta del sector es una vieja aspiraci¨®n de algunos de sus representantes como Andr¨¦s Guti¨¦rrez y el presidente de la Oficina Nacional de Caza, Juan Antonio Sarasketa. Para ello, han utilizado la ley de Biodiversidad y forzado su contenido. "Queremos que quede claro d¨®nde est¨¢ prohibido el uso de munici¨®n de plomo, y que el cambio de cartuchos no nos cueste un euro", clam¨® Guti¨¦rrez desde el estrado. En realidad, la prohibici¨®n de usar plomo en humedales protegidos est¨¢ vigente desde 2001 y la ley ampl¨ªa la prohibici¨®n a los de la Red Natura 2000. Aunque la norma extiende algo que ya existe, el tema incluso suscit¨® el inter¨¦s del Rey durante la tramitaci¨®n parlamentaria. Pese a ser un experto cazador, el Rey ignoraba que ya estaba prohibido, seg¨²n revel¨® Narbona. Francisco, cazador madrile?o, explic¨®: "Cambiar la munici¨®n de plomo por la de acero supone un riesgo mayor. Cuando impacta, el plomo se deforma pero el acero no, de manera que un bal¨ªn de acero rebota y es peligroso. Y adem¨¢s obligar¨ªa a todo el mundo a cambiar de arma".

El l¨ªder de la marcha tambi¨¦n exigi¨® mantener formas de caza como el parany (los p¨¢jaros quedan atrapados en una barra impregnada de pegamento) o la caza de perdiz con reclamo. La ley permite expresamente esta modalidad y el parany le ha valido a Espa?a una condena del Tribunal Europeo. Los cazadores tambi¨¦n reclaman poder cazar en todos los espacios naturales. La norma s¨®lo lo proh¨ªbe en los parques nacionales, que suponen menos del 0,1% del territorio.

El presidente de Asaja, Pedro Barato, carg¨® contra la catalogaci¨®n de espacios dentro de la Red Natura 2000 de la UE. Los cazadores quieren que esa declaraci¨®n sea voluntaria, que lleve aparejada compensaciones y que se revise el territorio ya catalogado (un tercio de Espa?a). Los manifestantes defendieron que ellos protegen como nadie el medio ambiente y que para ello necesitan menos normas.