'CSI Barcelona': ?qui¨¦n mat¨® al director del museo?
Una exposici¨®n invita a investigar un asesinato
Que el tema central de una exposici¨®n sea el asesinato del director de un museo tiene su miga. Que adem¨¢s sea original¨ªsima, muy entretenida y formativa la hace francamente irresistible. Es lo que ocurre con Assassinat al museu, la exhibici¨®n que puede visitarse en el Museo de Ciencias Naturales de Barcelona y en la que uno puede sentirse polic¨ªa cient¨ªfico y ver cosas tan interesantes como un cad¨¢ver (de pega, gracias a Dios) abierto en la mesa del forense, una mosca verde gigante, un laboratorio de bal¨ªstica e interrogatorios de sospechosos del crimen. Planteada como una enorme y realista partida de Cluedo que se juega al natural y no en el tablero, la exposici¨®n, que sugiere la atm¨®sfera de las populares series televisivas de Crime scene investigation (CSI), es adem¨¢s una estupenda excusa para introducirse en los entresijos del m¨¦todo cient¨ªfico.
El p¨²blico se adentra en el escenario del crimen (perd¨®n, la exposici¨®n) tras contemplar un falso noticiario en el que se informa de la muerte del director del Museo de Ciencias Naturales barcelon¨¦s -la directora actual del mismo, Anna Omedes, se congratul¨® ayer, visiblemente aliviada, de que no fuera una mujer-. Las im¨¢genes muestran incluso a los Mossos d'Esquadra acordonando el lugar y a unos camilleros sacando el cad¨¢ver por la puerta del centro. Pertrechado con un cuadernillo para ir apuntando sus notas de investigaci¨®n, el visitante recorre la exhibici¨®n, en la que se le van facilitando pistas para resolver el asesinato. Un realista diorama del despacho del director, con la indispensable silueta en el suelo, permite familiarizarse con la escena del crimen. Seguidamente, hay que ir circulando por una serie de cub¨ªculos instalados en la Sala de la Ballena del museo cada uno de los cuales representa un laboratorio dedicado a un tema de la criminolog¨ªa y contiene, adem¨¢s, informaci¨®n relevante para aclarar el asesinato.
As¨ª, encontramos espacios sobre huellas dactilares, pisadas, fibras, bal¨ªstica, retratos robot y medicina forense. En este ¨²ltimo ¨¢mbito figura, brrrrr, el cuerpo del director, bajo una s¨¢bana, fr¨ªo y gomoso al tacto, en plena autopsia, abierto en canal (un escalpelo interactivo permite averiguar d¨®nde le dispararon). Han pasado 36 horas desde la muerte y ya empieza a descomponerse, se nos informa; nadie se quejar¨¢ de que el realismo aqu¨ª tenga un l¨ªmite.
Ese espacio forense incluye una ingeniosa reproducci¨®n de las c¨¢maras frigor¨ªficas de un dep¨®sito de cad¨¢veres: al abrir las puertas aparece informaci¨®n dentro. No menos escalofriante ser¨¢ para algunos otro ¨¢mbito, el dedicado a la odontolog¨ªa forense, con una siniestra silla de dentista... Especialmente interesante, dado que estamos en un museo de ciencias naturales, es el espacio de entomolog¨ªa forense, con espec¨ªmenes en diferentes grados de evoluci¨®n de esos simp¨¢ticos bichos que son la Lucilia sericata (mosca verde) y la Calliphora vicina (mosca azul), amiguitas de los muertos.
Taxidermista sospechoso
Al final del recorrido el visitante puede presenciar a trav¨¦s del preceptivo cristal de espejo los interrogatorios de los sospechosos (la secretaria, un anticuario, la empleada de la limpieza, el director de un museo extranjero -el que siga estos asuntos podr¨¢ preguntarse si le mat¨® para ganar el concurso internacional para optar a la plaza-, el conserje y el taxidermista). Las actuaciones, grabadas, son estupendas.
La exposici¨®n, adaptada al museo barcelon¨¦s, proviene de museo de ciencias naturales de B¨¦lgica y la ide¨®, seg¨²n explic¨® ayer la comisaria C¨¦cile Gerin, el entonces director del museo belga, Daniel Cahen, que adem¨¢s de ser un cachondo -visto el montaje-, es un apasionado de la novela negra. En B¨¦lgica, la exposici¨®n consigui¨® 100.000 visitantes en ocho meses. La comisaria explic¨® que el proyecto, en el que ha participado la polic¨ªa cient¨ªfica, era anterior al ¨¦xito de CSI. La exposici¨®n, pensada para todos los p¨²blicos, incluye elementos para que jueguen los m¨¢s peque?os. Podr¨¢ parecer raro llevar a los ni?os a un paseo forense, pero como sentenci¨® ayer durante la visita una madre con filosof¨ªa digna de Gil Grissom (CSI Las Vegas), "la vida tambi¨¦n es esto".
Ferran Adri¨¤ y el Museo de Zoolog¨ªa
Ferran Adri¨¤ desminti¨® ayer que tenga un proyecto para la principal sede actual del Museo de Ciencias Naturales de Barcelona (el emblem¨¢tico Castell dels Tres Dracs, originalmente un restaurante), edificio con muchos novios ante la prevista reordenaci¨®n del centro y la cesi¨®n al mismo del Edificio F¨®rum. El destino del viejo Museo de Zoolog¨ªa no est¨¢ claro, pues tampoco se ha decidido a¨²n que no vaya a seguir formando parte del Museo de Ciencias Naturales. De momento, a la espera de que la Generalitat concrete c¨®mo ser¨¢ el futuro Museo Nacional de Ciencias Naturales de Catalu?a, el Ayuntamiento ha empezado a mover ficha con la concentraci¨®n del museo (principal activo del futuro museo nacional y que actualmente incluye tambi¨¦n el Museo de Geolog¨ªa), el Jard¨ªn Bot¨¢nico y el Instituto Bot¨¢nico.
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